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En colaboración conLa Ley

Los bufetes pronostican un 2019 de altos riesgos

Los socios directores de 24 firmas opinan: preocupa el Brexit y la inestabilidad política

EFE

Los despachos de abogados son un termómetro privilegiado para medir el pulso de la actividad económica. Por su doble condición. En primer lugar, porque son actores principales de un importante sector, como es el legal. Y, en segundo término, porque conocen de primera mano las preocupaciones de las empresas y los profesionales del resto de ámbitos e intervienen directamente en sus movimientos y operaciones.

Bajo estas premisas, CincoDías ­Legal ha querido testar la opinión de los socios directores de 24 de los principales bufetes del país sobre cómo será 2019. A cada uno de ellos se le ha planteado una triple pregunta: ¿qué espera su firma del año que acaba de empezar?, ¿qué claves marcarán la evolución del sector legal? y ¿hacia dónde evolucionará el contexto político-económico (tanto nacional como internacional)?

Contexto político y económico

En las respuestas recogidas predomina una sensación: la de incertidumbre. Hay variedad en el grado de optimismo o pesimismo, pero la gran mayoría coincide en señalar que el contexto político es especialmente complejo y volátil. A nivel europeo, destaca la preocupación por el Brexit, de cuyo final nadie se atreve a hacer una predicción. Además, en el entorno global, la actitud de la Administración Trump sigue provocando fundados temores. Y, ya aterrizando en España, el ciclo electoral que arrancó con las elecciones en Andalucía, y que se prorroga con las próximas municipales y autonómicas de mayo (todo ello, con la amenaza de adelanto de las elecciones generales que sobrevuela la acción del Gobierno de Pedro Sánchez), agudiza la desconfianza de las firmas hacia la política, a la que se le augura un largo periodo de inestabilidad y de la que no se espera que colabore demasiado en ofrecer un marco claro y seguro para los negocios.

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Este escenario no es el mejor para mantener el crecimiento económico y la creación de empleo de los últimos años, tal y como apunta un buen número de los consultados. Alguno se atreve incluso a anticipar un frenazo de la actividad. Eso sí, esta posición no es mayoritaria. Impera la idea de que los indicadores económicos se mantendrán en positivo, si bien, es previsible que sufran cierta ralentización.

Digitalización e innovación

Así pues, 2019 se anticipa como una travesía de altos riesgos que exigirá a los despachos afianzar su posición de ­partners de sus clientes, profundizando en una actitud proactiva y que aporte valor añadido al negocio. En esta evolución, los socios directores coinciden en señalar que será clave la apuesta por la innovación y por la digitalización, dos conceptos que están presentes en la práctica totalidad de las respuestas. Las nuevas tecnologías deben servir para ofrecer servicios más eficientes y a un precio más competitivo. Pero también para buscar nuevas fórmulas o productos que atiendan a las necesidades cambiantes de los clientes.

Hay otras ideas que apuntan algunos de los socios directores que merecen ser destacadas. La primera, la necesidad de avanzar en políticas de igualdad en el seno de las firmas, una preocupación transversal en el conjunto de la sociedad en 2018 y a la que el sector legal no puede ser ajena. En segundo término, apostar por una mayor y mejor integración en los equipos de profesionales no abogados que permitan ofrecer un asesoramiento jurídico de mayor especialización y calidad. Y, finalmente, mantener la senda de internacionalización emprendida hace unos años. Latinoamérica sigue siendo el destino preferido, sin olvidar las oportunidades que ofrece el mercado asiático y, en especial, China.

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