La afición italiana al spagueti [western] (1)

«No desaparece [el programa de compra de activos]. Sigue siendo parte de la caja de herramientas. Es una nueva parte de la política monetaria».Mario Draghi en la rueda de Prensa del pasado jueves 14 de junio de 2018.

«Ch'ella mi creda libero e lontano» aria del tercer acto de la ópera «La Fanciulla del West» de Giacomo Puccini

Mario Del Monaco (Dick Johnson)Cornell MacNeil (Jack Rance)Orchestra dell'Accademia Nazionale di Santa Cecilia Franco Capuana (director)Teatro alla Scala (Milán) -1958

Dedicado a mi abuelo Manuel, al que siempre recuerdo leyendo a la luz de la ventana, las noveles de Marcial Antonio Lafuente Estefanía.

Popularmente, el wéstern fue un género cinematográfico típico del cine norteamericano ambientado en la época de la conquista y colonización del Oeste estadounidense, el llamado «far west» («lejano oeste»). Aunque con este anglicismo (proveniente de la palabra west -oeste en inglés) se hace referencia fundamentalmente a obras de cine también pueden considerarse de esta categoría algunas obras de la literatura. Es este último caso, las obras eran comúnmente conocidas como «novela del oeste» y muchos la consideran el verdadero origen de las películas de este género.

En estas novelas se empezó ya a confeccionar los personajes más característicos del género. Empezando por los vaqueros, que trasportaban el ganado por las inmensas llanuras, generalmente ligado a un propietario ganadero, los agricultores pioneros, generalmente en conflicto con los ganaderos, y el sheriff, al que el correspondía poner un poco de orden en los conflictos entre los que no faltaban los amorosos generalmente protagonizados por alguna de las alegres chicas del "Saloon". A todos ellos se les unía el bandido, el atracador de bancos, el forajido pistolero, los indios, los mexicanos, los militares y (durante la fiebre del oro) los buscadores de oro.^[1]

Hollywood supo sacar partido de esta colección de personajes variopintos y creó una género cinematográfico (el western propiamente dicho) que tuvo su época dorada entre los años 1940 a 1960. A partir de esos años entro en decadencia pero, a la vez, surgió un subgénero fuera de los EE.UU. que se dio en llamar «western europeo».

Por su parte, el western europeo, estuvo de moda en los años 1960 y 1970 y que se caracteriza por tener producciones europeas, en contraste con las películas tradicionales del género que se filmaban en Estados Unidos. España (Hoyo de Manzanares en Madrid, Fraga en Huesca pero principalmente el desierto de Tabernas en Almería) e Italia (Cinecittà) fueron los dos principales focos de actividad de este cine por lo que comúnmente era conocido como «spaghetti western» cuando se trataba de películas italianas o «chorizo western» cuando se trataba de películas españolas.

El spaghetti western, producciones generalmente de escaso presupuesto, se caracterizaron sin embargo por una estética especial. Destacaban sus personajes con escasa moral, rudos, duros y con altas dosis de violencia. A pesar de su descrédito, el subgénero del western europeo gozó de una gran admiración una importante demanda por parte del público, ya que entre 1961 y 1976 se produjeron en Italia y España unos 500 spaghetti westerns.

Sin embargo, la película más antigua de este género, rodada fuera de los Estados Unidos, que se recuerda fue del año 1936 y era alemana. Se titulaba «Der Kaiser von Kalifornien» (El emperador de California) del director alemán Luis Trenker. Sin embargo, todavía podemos ir más atrás en el tiempo. Ya antes de esta película hubo una ópera que también trató el tema del western y que podría considerarse realmente el primer western europeo: «La Fanciulla del West» (La chica del Oeste) de Giacomo Puccini y libreto en italiano de Guelfo Civinini y Carlo Zangarini.

La obra narra las desventuras finales del bandido Ramirez líder de una banda de ladrones. Al inicio de la obra se presenta en el "Saloon" como Dick Johnson de Sacramento. Este y Minnie, la ruda pero a la vez cándida cantinera, se reconocen. Ambos están enamorados. Desgraciadamente, el sheriff Jack Rance esta también enamorado de Minnie. Surge así un doble empeño del sheriff: liquidar a un bandido y, a la vez, un rival amoroso. Minnie con su habilidades (en hacer trampas) en la cartas logra salvar a Ramirez. En el último acto (al que pertenece el aria que escuchamos) Ramirez es nuevamente atrapado y antes de ser ahorcado, pide que no le desvelen a Minnie su trágico final. La obra tiene un "happy end" ya que Minnie vuelve a aparecer y, con la promesa de la redención de Ramirez como bandido, abandona la escena con su amado para vivir una nueva vida.

«La fanciulla del West» fue un encargo del Metropolitan Opera House de Nueva York y su estreno, un gran acontecimiento social en la ciudad, tuvo lugar en el año 1910. La obra fue un compromiso entre Giacomo Puccini con David Belasco para que éste le cediera los derechos de autor para la adaptación operística de otra obra de Belasco: «Madama Butterfly». Se estrenó el 10 de diciembre de 1910 en Nueva York con las más rutilantes estrellas del MET como era la soprano checa Emmy Destinn (en el papel de Minnie) y del tenor italiano Enrico Caruso (en el papel del villano Dick Johnson), ambos los más famosos cantantes en Europa y Estados Unidos en los años previos a la Primera Guerra Mundial.

El dúo Destinn-Caruso fue una de las principales atracciones de la época. En el escenario del Metropolitan Opera de Nueva York, la soprano canto en 250 representaciones, interpretando 21 papeles. Por su parte Enrico Caruso, a pesar de haber muerto a la prematura edad de 48 años, mantiene el récord de 863 apariciones en escenario neoyorkino. Fue el “tenor titular” del teatro durante 17 años. También integraba el reparto Pasquale Amato (en el papel del ambicioso sheriff Jack Rance). El director de orquesta no podía ser otro más que Arturo Toscanini, director musical del teatro en aquellos años.

Era el primer estreno mundial de una ópera en el Metropolitan Opera House y fue recibido con éxito en los Estados Unidos. Sin embargo, nunca fue tan popular en Europa, excepto quizás en Alemania. Allí disfrutó de un estreno triunfal en la Deutsche Oper de Berlín (en su antigua sede de Charlottenburg) en marzo de 1913, bajo la dirección musical de Ignatz Waghalter.

La reunión del Consejo de Gobierno del BCE

El BCE ha anunciado que continuará comprando bonos (el llamado QE europeo) a partir de septiembre hasta final de año a razón de 15.000 millones de €/mes frente a los 30.000 mill. actuales si bien la medida queda condicionada a que los próximos datos confirmen la perspectiva de inflación a medio plazo. Asimismo la institución monetaria explicitaba el horizonte que puede existir entre abandonar las compras netas de bonos (cuando un bono vence se repone la posición y eso no computan como compras adicionales) y la primera subida de tipos.

La entidad ha avanzado que los tipos de interés seguirán en esos niveles al menos hasta el verano de 2019. Y, en cualquier caso, tanto tiempo como sea necesario para asegurar que la evolución de la inflación se acerque al deseado 2% que persigue la entidad. No hay mayores pistas: “No hemos tratado si subiremos y cuando los tipos de interés”, dijo Draghi.

Si previamente a este reunión se empleaba la expresión “se mantendrán durante un extendido periodo de tiempo y bien pasado la finalización de las compras netas (QE europeo)” ahora se concreta en al menos hasta verano de 2019. El mercado interpretaba previamente un baremo entre 3-6 meses, pero la concreción realizada por Draghi es incluso más larga. La lectura global es que el BCE procede con el inicio de desmantelamiento de su actual laxa política monetaria, pero mantiene un tono de cautela-desconfianza por lo que opta por conservar flexibilidad (si los datos de inflación se confirman) así como aleja cualquier iniciativa de subida de tipos con una clara intención de contener una posible apreciación del EUR. La banca europea se ve perjudicada ya que espera una subida de tipos proto que ayudara a restablecer su rentabilidad.

Una vez más Draghi demuestra habilidad para limitar una psicología de mercado que se pudiera fundamentar en que comprometida la finalización del QE (europeo) el siguiente paso sería la subida de tipos. Resultado de todo ello ha sido una fuerte depreciación del EUR desde 1,1825 a 1,1560. En las sesiones previas el euro se había visto apoyado en los comentarios del economista jefe de la institución en los que anunciaba el desmantelamiento de las medidas que finalmente se anunciaban ayer.

El exministro de Economía español Luis de Guindos, que se estrenaba el pasado jueves como vicepresidente de la entidad, intervino en la rueda de prensa posterior a la reunión de la entidad sobre la liquidación de una entidad letona, que es donde se dio la cita. Guindos aprovechó la cuestión para pedir que las diferentes legislaciones de resolución en los países de la zona euro sean iguales.

Previamente a todo ello, la reunión del FOMC de la Reserva Federal determinó un aumentó los tipos de interés en un cuarto de punto el rango objetivo de los fondos federales (hasta el 1,75-2,00%) por segunda vez en el año y prevé otros dos aumentos adicionales. También se mostró más optimista en sus previsiones de crecimiento, estimando asimismo un mayor ritmo de la inflación para 2018. Se trata de la séptima vez que este comité incrementa los tipos de interés desde la salida de la política monetaria de tasa cero a finales del año 2015. Asimismo, señaló que espera dos subidas más de tipos de interés en lo que resta del año.

Algo más de un año antes, en octubre de 2014, la Reserva Federal finalizó su plan de compra de deuda (el QE "americano"). Entre los años 2007 y 2014, época de apogeo del QE americano, la Reserva Federal inyectó cerca de 4 billones de dólares. Su sucesor, el QE europeo va camino de 3 billones de euros.

NOTAS

1. Destacar al escritor Marcial Antonio Lafuente Estefanía autor de unas 2.600 novelas del oeste, y considerado el máximo representante del género en España.