El presidente de la CNMV anuncia que rebajará las tasas que cobra por sus servicios
Albella reconoce que el supervisor ha reforzado su plantilla pero exige más flexibilidad Señala que "todos los años se procede a la corrección de un número significativo de incidencias" en fondos de inversión
Mucho trabajo, una avalancha de cambios normativos y los medios justos, pese al reconocimiento de que el Gobierno ha permitido incrementar moderadamente la plantilla de técnicos por primera vez desde hace 10 años en la CNMV. Cierto, el supervisor se está reforzando con la incorporación de técnicos, pero Sebastián Albella, el presidente del organismo que presenta por primera vez el informe anual en el Congreso, también ha reclamado más flexibilidad.
"En un entorno como el actual, enormemente cambiante y como he dicho de gran competencia entre los mercados y plazas financieras, para poder dar respuesta a la creciente demanda de una supervisión de calidad, necesitamos también más flexibilidad", ha sentenciado en la comisión de Economía del Congreso. Acto seguido, ha señalado que, pese a que en teoría, la CNMV no está sujeta al mecanismo de oferta de empleo público anual, en la práctica los presupuestos desde 2015 "han venido desactivando esta flexibilidad".
La anterior presidenta de la CNMV, Elvira Rodríguez, logró introducir en la Ley del Mercado de Valores en 2015 un párrafo que abre al supervisor las puertas de contratar personal: “La CNMV decidirá acerca de la oportunidad de la convocatoria de procesos de selección de personal destinados a cubrir las vacantes de la plantilla aprobada en el presupuesto de explotación y capital de la entidad, quedando dichos procesos exceptuados de la oferta de empleo público”.
Pues bien, los Presupuestos Generales del Estado de 2016 bloquearon en la práctica esa posibilidad. La ley negó esa opción, al no especificarla de manera concreta. Elvira Rodríguez, exjefa del supervisor, dejó interpuesto un recurso contencioso-administrativo, como queja por no haber podido hacer uso de esa facultad. Hoy, Sebastián Albella vuelve a pedir que se le dé flexibilidad a organismo que preside, con 422 empleados a cierre de 2017, frente a los 401 del ejercicio anterior.
Es habitual que técnicos que trabajan para Sebastián Albella fichen por el otro gran vigilante del sector financiero, el que dirige Luis María Linde. Allí disfrutan, por lo general, de unas condiciones laborales notablemente más atractivas. Las últimas plazas convocadas por la CNMV recogen unos sueldos anuales de poco más de 30.000 euros brutos.
La CNMV puede exhibir unas cuentas envidiables, con unos gastos de 42,7 millones de euros en 2017, frente a los 41,2 incurridos en el ejercicio anterior, que se financian "exclusivamente con el producto de las tasas que aplicamos al sector". Sus ingresos fueron de 63,8 millones,un de manera que sus beneficios fueron de 20,7 millones de euros. La mayor parte de ese dinero se va al Tesoro.
Una parte de ese resultado es por la mejor evolución de los mercados y otra, por un componente estructural, En el informe anual, la CNMV explica que "está llevando a cabo un análisis de la estructura y situación de sus tasas con el objetivo de plantear los cambios necesarios para reducir el citado excedente en su componente estructural". Las tasas "deben guardar relación con el coste del servicio", ha sentenciado Albella.
Respecto a los fondos de inversión, con un patrimonio récord de casi 270.000 millones a cierre de marzo según la asociación del sector, Inverco, Albella ha especificado que han realizado análisis preventivos a efectos de asegurar que las gestoras cumplen sus obligaciones, que los conflictos de interés son gestionados de forma apropiada y que los partícipes y accionistas reciben información suficiente. "Durante el año se remitieron 808 requerimientos, la mayoría de ellos con medidas correctoras o recomendaciones", ha explicado.
Albella ha insistido en que controlan muy de cerca al sector de la inversión colectiva, al comparar los valores liquidativos de los fondos con otros estimados a partir de la evolución de los mercados. Así, como consecuencia de esta actuación y de otras "todos los años se procede a la corrección de un número significativo de incidencias y, en ocasiones, se detectan situaciones que dan lugar a la apertura de expedientes sancionadores".