Cortefiel ultima el primer contrato de electricidad entre productor y cliente en España

A través de la asociación de consumidores ACE y UNEF Cuatro productores de renovables suministrarán a la cadena de moda 25 GWh al año

La Asociación de Consumidores de Electricidad (ACE), dedicada a la gestión de servicios de energía, está intermediando la firma de un contrato de suministro eléctrico entre el Grupo Cortefiel, uno de sus socios, y cinco productores de renovables, cuatro de ellos integrados en la Unión Española Fotovoltaica (UNEF) y un quinto eólico. Se trataría del primer contrato a largo plazo que se firmaría en España entre un productor y un consumidor, sin que medie una comercializadora. Son los denominados PPA (Power Purchase Agreement, en sus siglas inglesas), de los cuales, hay ya cinco en marcha en España, aunque hasta ahora a través de una comercializadora.

 ACE cuenta con la sociedad limitada Asocomelect que actúa como un agrupador de la demanda. Esto es, une a varios consumidores para buscar una buena oferta de suministro en el mercado de generación. Por el lado de la oferta, UNEF ha desempeñado un papel relevante al acercar a sus socios productores con los de ACE, que suman un total de 250.

Cortefiel había negociado en los últimos meses con único productor que desistió debido a la volatilidad de los precios. Por su parte, la cadena de moda, ha aplazado la firma del contrato de suministro por el inminente cambio de imagen de marca que anunciará, precisamente, mañana, como adelantó Cinco Días el sábado.

El volumen contratado por el Grupo Cortefiel sería de unos 25 GWh al año, un volumen pequeño que puede ser cubierto financieramente sin problema. La cadena española de moda, con cuatro importantes marcas (Cortefiel, Springfield, Pedro del Hierro y Women’secret) está presente en 89 países con 1.982 puntos de venta.

ACE, consultora líder en asesoramiento y gestión de compra directa de energía eléctrica y el control de consumo, gestiona 5.000 GWh anuales, 1.000 MW de potencia, 10.000 puntos de consumo y 600 millones de euros de facturación.

UNEF, por su parte, sigue impulsando entre sus asociados la firma de los nuevos PPA, una opción que se está extendiendo en los mercados internacionales. Se trata de contratos en los que el vendedor se compromete a colocar en la red la energía que genere, y el comprador a consumirla en los términos pactados, que pueden o no restringir el despacho de dicha energía en el mercado liberalizado. Este tipo de contrato suele ser a largo plazo, a veces ligado a la vida útil de la planta.

Durante ese tiempo, el comprador paga por la disponibilidad de las plantas y por la energía que se genere, con una tarifa binómica pactada libremente. Contar con un PPA supone cubrir el riesgo de mercado a largo plazo a un precio razonable. Constituye asimismo una opción adecuada para asegurar un determinado nivel de garantía de suministro y fomentar la inversión en generación.

Este mecanismo contractual podría impulsar el desarrollo de nuevas instalaciones de renovables. Actualmente, en España las empresas del sector fotovoltaico han depositado 235 millones de euros en garantías ante la Administración para construir 23.500 MW, mucho más que los megavatios adjudicados en las subastas realizadas por el Gobierno el año pasado. La inmensa mayoría, 19.600 MW, son de proyectos que cobrarán el precio del mercado.

EDP y Pascual

El primer gran contrato de compraventa de electricidad de este tipo en España fue el firmado en julio del año pasado entre EDP Renovables y Calidad Pascual. Según el acuerdo, la eléctrica suministrará durante cinco años (entre enero de este año y diciembre de 2023) energía eólica al grupo alimantario producida en sus parques. El suministro se realiza a través de la comercializadora de EDP en el mercado libre.

A este contrato le han seguido otros: el firmado entre Talasol Solar y Ellomay Capital. En este caso, la generación producida por el proyecto fotovoltaicode Talasol en Talaván (Cáceres), de hasta 565 GWh al año. El de Enérgya-VM y Foresight Group, por el que aquella suministrará a esta compañía durante 10 años la producción de su planta de Torre Cotillas I (Murcia), que está en proyecto y tendrá una capacidad de 4 MW. También, por 15 años, la sociedad BayWA ha firmado un PPA con la planta fotovoltaica Don Rodrigo (Sevilla), a través de la comercializadora Statkraft.

Otro gran contrato fue el firmado recientemente entre Cox Energy, en alianza con Sonnedix, con la comercializadora Audax, para el suministro de energía. Cox lo calificó como “el mayor acuerdo de este tipo suscrito hasta la fecha para la compra de energía solar”, con una potencia de 660 MW.

Supermercados IFA, el siguente en contratar

Aunque se trata de contratos muy complicados, cuya negociación lleva meses, los contratos del suministro directo y a largo plazo de energía entre un productor y un consumidor, los llamados PPA, se están imponiendo en el mundo.

En España, la iniciativa de la Unión Española Fotovoltaica (UNEF) de organizar un encuentro para acercar a sus productores con los miembros de la Asociación de Consumidores de Electricidad (ACE) para firmar pactos de este tipo, está dando sus frutos.

Además del contrato entre el Grupo Cortefiel y cinco productores fotovoltaicos y eólicos para el suministro de 25 GWh al año para su cadena de establecimientos en España, otra cadena de distribución, el grupo de supermercados IFA, está negociando otro contrato de electricidad de este tipo.

En este caso, según fuentes empresariales, el proceso se halla en una fase final de un concurso en el que hay dos finalistas. IFA es el segundo grupo de distribución en ventas, el primero en la zona noroeste y la segunda en las metrópolis de Barcelona y Madrid. Con una cuota de mercado del 35%, IFA tiene un total de 34 miembros asociados.