La amenaza de Trump se cierne sobre los fabricantes alemanes de coches
BMW y Daimler caen en bolsa con fuerza tras el aviso de Trump Solo China compra más coches alemanes en el mundo que EE UU
La amenaza de extender los aranceles desde el aluminio y el metal al sector de la automoción levantó ayer todas las alarmas entre los grandes fabricantes de Alemania. Las acciones de Daimler y BMW cayeron con fuerza en la sesión de ayer, recogiendo el temor de los inversores al posible impacto que tendría la extensiones de la citada guerra arancelaria. EE UU es el mayor comprador del mundo de coches deportivos y berlinas realizadas por Daimler y BMW, como el Mercedes Clase S o el BMW 7, dos de los modelos más vendidos en EE UU.
Pero no solo compra vehículos alemanes, sino que también es una importante fábrica de vehículos (especialmente de los de mayor dimensión, como el Mercedes GLE o el BMW X5) para su posterior venta en Asia. EE UU es el segundo destino de las exportaciones de vehículos de Alemania, tan solo por detrás de China, mientras que es el mayor comprador de piezas. “Las medidas de castigo no pueden ser la respuesta”, aseguró Bernhard Mattes, presidente del lobby VDA, que aglutina a toda la industria germana de la automoción. “Una guerra entre EE UU y Europa debe ser evitada a toda costa. Si se produce solo habrá perdedores a ambos lados”.
El Gobierno alemán afirmó ayer que las políticas de “aislamiento y proteccionismo” del presidente estadounidense, Donald Trump, son el “camino equivocado” e insistió que una “guerra comercial” no beneficia a nadie. En una rueda de prensa ordinaria, el portavoz del Ejecutivo, Steffen Seibert, reiteró que Alemania está a favor del comercio libre y los mercados abiertos y que el gobierno está convencido de que “reducir conjuntamente las barreras comerciales es el camino correcto”. Esta reducción de obstáculos comerciales “no se logra mediante amenazas”, sino a través de negociaciones, subrayó.
Las grandes firmas alemanas no solo obtuvieron el respaldo del Ejecutivo alemán, sino también del portavoz de la Comisión Europea, Margaritis Schinas, quién apuntó que si las medidas del presidente estadounidense se materializan de forma que afecte a los intereses europeos “reaccionaremos de forma decisiva, pero proporcionada y de forma estrictamente compatible con la Organización Mundial de Comercio. Esto va de que Europa haga lo que tiene que hacer para defender sus intereses. No va de ninguna batalla. La UE es un proyecto de paz”, remarcó.
Si finalmente se materializan los aranceles, la UE contempla aplicar un arancel del 25% a una lista de productos del acero, agrícolas y otros de Estados Unidos para “reequilibrar” la situación y de forma “equivalente” al perjuicio que provocará en la industria europea y activar “salvaguardias” para preservar la estabilidad en el mercado europeo si suben las importaciones.