Telefónica afronta en Argentina la batalla regulatoria de la TV
Las telecos quieren que se les permita poder ofrecer televisión vía satélite cuanto antes
Telefónica se enfrenta en Argentina a distintos frentes regulatorios en un momento complicado, una vez que ha empezado a andar el nuevo gran operador, resultado de la fusión de Telecom y Cablevisión, mayor grupo de cable del país, controlado por Clarín. El primer envite se sitúa en la televisión de pago, clave para que Telefónica y otros grupos como Claro, filial de América Móvil, puedan ofrecer el llamado quadruple play, que incluye móvil, fijo, internet y televisión.
La pasada semana, el regulador Enacom autorizó a Telefónica y Claro a ofrecer servicios televisivos dentro de los paquetes convergentes de fijo-móvil en distintas zonas del país austral. Así, Telefónica podrá ofrecer servicios de televisión en Buenos Aires y provincias como Godoy Cruz, Guaymayen, Lujan de Cuyo y Mendoza.
Ahora bien, este primer permiso autoriza a Telefónica a ofrecer servicios de televisión a través de la red fija, pero no por satélite. Esta situación parece favorable a la nueva Telecom, porque tiene capacidad de ofrecer ya televisión en gran parte del país con su cable, mientras que las telecos están obligadas a desplegar fibra, un proceso más lento. Solo de la mano del satélite, tecnología a la que las telecos no han podido acceder hasta ahora, podrían empezar a ofrecer quadruple play con mayor rapidez.
En Argentina se espera que el presidente Mauricio Macri firme un decreto de necesidad y urgencia para cumplir con la decisión de habilitar la convergencia, y cambiar el servicio de radiodifusión vía satélite. La firma debería tener lugar antes de que acabe enero, aunque no sería descartable un retraso.
Además, las telecos temen que el decreto pueda establecer una restricción temporal de entrada en el satélite hasta comienzos de 2019, escenario que también complicaría su situación.
Este escenario penalizaría a las telecos en la configuración de sus ofertas televisivas frente a Telecom, que también cuenta con una fuerte posición en el mundo de los contenidos audiovisuales.
En términos generales, en el sector se ha criticado que el Gobierno Macri haya favorecido la fusión de Telecom y Cablevisión, para crear un grupo nacional y al mismo tiempo facilitar la entrada de Clarín en el negocio móvil. Las acusaciones se centran en que se ha permitido la integración, sin restricciones, de dos empresas que han dado lugar a una operadora que tiene una cuota de mercado del 53% en la banda ancha fija, del 35% en el móvil y de más del 50% en la televisión de pago.
En este sentido, en la zona norte del país, hay ciudades en las que Telecom tiene una cuota en la banda ancha en los hogares cercana al 100%.
Otro de los puntos donde se han centrado las protestas del sector es en el dominio del nuevo operador en el espectro móvil. Y es que Telecom cuenta con 220 MHz de espectro, cuando el límite legal es de 140. La compañía debe devolver frecuencias al Estado, si bien tendrá de plazo dos años para hacerlo. El escenario podría cambiar si, como se maneja en el sector, hay una nueva subasta de espectro, que pudiera venir acompañada por cambios en los límites.
A su vez, tanto Telefónica como el resto de operadoras se han mostrado críticas con el retraso en la entrega de frecuencias procedentes de la última subasta realizada por el Gobierno Kirchner. Parece que este espectro se va a entregar próximamente, eso sí, tras un litigio judicial.
Un país de relevancia
Los mercados financieros parecen convencidos del poderío de Telecom Argentina, cuyas acciones se han revalorizado cerca de un 140% en los últimos doce meses. La empresa tiene en la actualidad una capitalización bursátil superior a 12.000 millones de dólares (unos 9.870 millones de euros).
Telefónica de Argentina ha mantenido una tendencia de crecimiento en los últimos tiempos. En los nueve primeros meses del año, la filial registró un aumento de ingresos del 34% en términos orgánicos hasta 2.604 millones de euros, cifra que supone casi un 7% del total del grupo. A mediados del pasado año, en los mercados se especuló con la opción de una posible colocación en Bolsa de parte del capital de Telefónica de Argentina por parte del grupo español.