China castiga la deuda soberana mundial e impulsa la cotización de los bancos españoles
La rentabilidad del bono a diez años de EE UU, en máximos de marzo de 2017 Sabadell lidera los ascensos del Ibex con un alza del 4%
La tranquilidad del inicio de año empieza a resquebrajarse. En esta ocasión la inestabilidad llega desde EE UU. La rentabilidad de su deuda a diez años retomó las subidas y el bono con vencimiento en 2028 se aproxima al 2,6%, niveles que no registra desde marzo de 2017 cuando las promesas de Donald Trump y la tercera alza de tipos por parte de la Fed desde finales de 2015 hacían presagiar un repunte acelerado de los tipos en la primera economía del mundo. Con esta subida, que se traduce en una caída de los precios de los bonos, la rentabilidad de la deuda estadounidense marca un punto de inflexión después de 30 años consecutivos de caídas.
China. que posee las reservas de divisas más grandes del mundo ( 3,1 billones de dólares, de los que 1,2 corresponden a deuda de EE UU), es el responsable de este comportamiento. Según las informaciones recogidas por Bloomberg y Reuters los funcionarios del gobierno del gigante asiático están revisando las posiciones extranjeras del país y han recomendado frenar e incluso reducir las compras de bonos estadounidenses ante el menor atractivo de estos activos. La medida que de momento se desconoce si se aplicará podría suponer un palo en las ruedas para el secretario del Tesoro de EEUU que tiene previsto emitir más deuda para financiar el aumento del déficit derivado de la aplicación de la reforma fiscal de Trump.
La decisión de Pekin sigue los pasos de las medidas aplicadas hace ya un año. A comienzos de 2017, la segunda economía del mundo empezó a desprenderse de activos estadounidenses ante las amenazas proteccionistas de Trump.
El ascenso de las rentabilidades se dejó sentir también en los vencimientos más cortos como los cinco y dos años. Sin embargo, esta tendencia no es nueva, sino que acompañando a la deuda estadounidense desde que la Fed iniciara el proceso de normalización monetaria con el fin del programa de compra de activos y la posterior subida de tipos. Con el repunte de ayer, la rentabilidad de la deuda a cinco años ronda el 2,37%, máximos desde febrero de 2011. Es decir, EE UU paga prácticamente lo mismo en los vencimientos a 10 y cinco años.
El aplanamiento de la curva de tipos estadounidense se ha acelerado en los últimos meses, lo que inquieta a unos inversores que empiezan a poner en cuarentena al mercado de renta fija. Por su parte, el bono a dos años alcanza máximos de 2008 al situarse en el 1,97%.
Con estos ascensos, el mercado empieza a anticipar una aceleración en el proceso de normalización monetaria que en EE UU se traduciría en un nuevo ascenso de los tipos. A esto se suma la decisión adoptada por sorpresa por el Banco de Japón que comunicó que empezará a reducir las compras mensuales de activos.
Todo ello tuvo su efecto inmediato en el alza de las rentabilidades de la deuda europea, que unido a las subida de los precios del crudo llevan a muchos a especular con una revisión de las expectativas de inflación por parte del BCE. El bono español a diez años subió al 1,54% desde el 1,51% del martes mientras el alemán, que ayer cambió su referencia, cerró el 0,475% frente al 0,458% previo.
El aumento de los tipos en el mercado secundario de deuda sirvió de impulso a la banca, el sector más beneficiado por un hipotético endurecimiento de la política monetaria. Después de años en los que los ingresos han estado penalizados por los bajos tipos de interés, el fin de las medidas ultralaxas es vista como el rayo de esperanza para la mejora de los márgenes.Aunque de momento son solo suposiciones, los inversores han empezado a ponerlo en precio. En una jornada en la que el Ibex 35 concluyó en empate, los bancos brillaron con luz propia.
Por encima de todos destacó Sabadell, que después de que el martes recuperara los niveles previos al 1 de octubre, ayer se anotó un 4%, convirtiéndose por segunda jornada consecutiva en el valor más alcista del selectivo español.En lo que va de año la entidad que preside Josep Oliu 12,68%.
Junto a Sabadell se situaron el resto de bancos españoles. Bankia sumó un 2,84%; Santander, 2,42%; CaixaBank, un 2,39% mientras Bankinter y BBVA repuntaron un 1,79% y un 1,21%, respectivamente. En el lado opuesto se situaron Cellnex (-3,51%), Colonial (-2,72%), Inditex (-2,53%) y Siemens Gamesa (-2%).
El peso del sector financiero en la Bolsa española, es significativo, pero lo es aún más en el índice italiano.Mientras las principales plazas de la zona euro se vieron castigas por las subidas del euro frente al dólar, que a lo largo de la jornada llegó a recuperar los 1,20 billetes verdes, el Mib y el Ibex escaparon a la oleada de ventas. No obstante, fue el selectivo milanés el que lideró los ascensos en Europa con un alza del 0,66%.
La fortaleza del euro pasa factura al Dax
Las noticias que llegan desde China no solo se dejaron sentir en el mercado de deuda, sino también en el de divisas.El dólar prolonga la debilidad de los últimos meses.Esto se traduce en un ascenso del euro, que aunque al cierre de los mercados europeos se anotaba un 0,2%, a lo largo de la sesión las subidas llegaron a superar el 0,5%, suficientes para que la moneda única recuperara los 1,20 dólares.
u La consecuencia más inmediata de la apreciación del euro fue el castigo de las Bolsas europeas, especialmente las de perfil más exportador como elDax, que bajó 0,78%. Por su parte, el Euro Stoxx se dejó un 0,36% y el Cac francés, un 0,35%.