Un año de prosperidad para la industria española
En 2017 se ha registrado un récord de patrimonio en fondos: 263.000 millones. También han surgido nueve gestoras
Cerramos 2017 como año récord de patrimonio en los fondos de inversión españoles. Según cifras de Inverco, la industria española gestiona un patrimonio de 263.000 millones de euros, superando los máximos alcanzados en mayo de 2007, si exceptuamos el patrimonio que entonces tenían los malogrados fondos inmobiliarios. El crecimiento en el año natural ha sido importante, de unos 26.000 millones de euros, aunque 2013 y 2014 fueron ejercicios con mayor incremento.
No debería sorprendernos demasiado. Con la economía y los mercados ofreciendo buenos resultados y con un dinero importante todavía embalsado en productos poco rentables, entre ellos los depósitos bancarios, el trasvase a inversiones que están ofreciendo mayor rentabilidad parece bastante razonable. En los propios fondos de inversión se ve también esta dinámica; monetarios, garantizados y rentabilidad objetivo pierden patrimonio en 2017, mientras todo el crecimiento viene explicado por el incremento patrimonial en fondos mixtos (tanto renta fija como renta variable) y en fondos de renta variable.
Lo más interesante de lo que está ocurriendo en nuestra industria, sin embargo, tiene más que ver, en mi opinión, con cómo están variando los pesos que, de esa tarta patrimonial, se están repartiendo los distintos actores. Las diez gestoras españolas más grandes (76% del total activos gestionados) han perdido casi un 2% de cuota de mercado en 2017 respecto a las gestoras más pequeñas, en general, independientes. Un 2% puede parecer escaso, y desde luego no es como para llamar a casa –como diría un gestor que tengo sentado enfrente–, pero supone unos 5.000 millones de euros que, según cómo se repartan, pueden alegrarle la vida a más de una gestora.
En el último Informe Smart-ISH (2016), Universo de gestores españoles con nombre propio comentábamos que a los gestores de fondos de autor españoles les costaba seguir el ritmo de crecimiento de los grandes grupos. No parecía un problema de rentabilidad –como explicamos en dicho informe–, sino más bien del tipo de industria de gestión de activos y, en último término, de modelo de distribución de productos y de asesoramiento financiero en España, muy dominado por las grandes entidades financieras.
Afortunadamente, a golpe de rentabilidades diferenciales, la gestión independiente empieza a ganar terreno. Además, están sabiendo conectar mucho mejor con sus inversores o potenciales inversores con una comunicación más fluida y muy transparente a través de las redes sociales, lo que se está traduciendo en una ganancia de notoriedad evidente.
Acabamos de conocer el fondo español más rentable de 2017. El agraciado, Japan Deep Value Fund FI, está gestionado por Marc Garrigasait –de Gesiuris Asset Management– y ha obtenido una rentabilidad del 37,4% el año pasado. Marc es un veterano gestor que, con Koala Sicav (+16,8%), está presente en la cartera de nuestro fondo Smart-ISH desde su lanzamiento en 2011. Ha pasado años buenos y no tan buenos, pero el tiempo parece querer darle la razón. Mi más sincera enhorabuena, Marc.
Otras menciones especiales para la gestión española –en términos de rentabilidad– de 2017 son para Merchfondo FI, Algar Global Fund FI y Santander Small Caps España FI, todos con una rentabilidad superior al 26% en el año.
Algo así como premio extraordinario 2017 podríamos otorgar a True Value FI, asesorado por Alejandro Estebaranz y José Luis Benito. No solo, otra vez, por una rentabilidad más que meritoria, 21,5% en el año, sino por haber crecido de manera extraordinaria. El fondo alcanza ya los 170 millones de patrimonio, habiéndose multiplicado por cinco en los últimos 12 meses. Contar con más de tres años de un excelente track record y un patrimonio superior a los 100 millones de euros les puede abrir las puertas de los inversores institucionales.
Este año que termina ha sido testigo del lanzamiento de nueve nuevas gestoras en España (la más conocida para el lector probablemente sea el proyecto liderado por Francisco García Paramés, Cobas Asset Management) que, unidas a las seis de 2016 y a las cinco de 2015, ponen de manifiesto –además de un crecimiento que se acelera– la oportunidad que muchos profesionales del sector financiero están apreciando en el mundo de la gestión de inversiones.
Nos enfrentamos a un año 2018 apasionante. Nueva regulación, auge de la gestión pasiva, la constante búsqueda de rentabilidad en un entorno de tipos muy bajos. Espero, en unos 12 meses, volver a escribirles sobre el crecimiento de nuestra industria, de nuevos proyectos y de historias de éxito. Feliz día de Reyes y mucha suerte para 2018.
Ángel Olea es Director de inversiones de Abante