Los registradores remiten al Sepblac 140 casos con indicios “muy sólidos” de blanqueo
El registrador debe proceder a la inscripción aunque sospeche estar ante un posible delito El volumen de casos donde saltan las alarmas es de unos 16.000 al año
Uno de los delitos más complicados de detectar y, por tanto, de perseguir es el de blanqueo de capitales por varias razones. La primera de ellas es porque se trata de una acción, el lavado de dinero, asociada a lo que los juristas denominan otros delitos subyacentes o actividades delictivas previas. Otra de las razones es que suele tener numerosas ramificaciones y además es complicado por su marcado carácter transnacional, lo que también dificulta su persecución.
De todo ello se habló este viernes en el Colegio de Registradores de España al presentar las conclusiones de las jornadas llevadas a cabo esta semana y los últimos datos sobre en qué consiste la colaboración que llevan a cabo estos funcionarios con otros sujetos obligados a comunicar cualquier indicio de lavado de dinero en el ejercicio de su actividad. También lo son los notarios o la banca entre otros, y está previsto que en breve pasen a serlo los abogados.
Así, el director del Centro Registral Antiblanqueo del Colegio de Registradores (CRAB), José Miguel Masa, aseguró este viernes que en los diez primeros meses de este año, los registros han remitido 13.136 comunicaciones indiciarias de blanqueo al CRAB. De ese volumen de expedientes y después de ser analizados, finalmente fueron remitidos al Servicio Español de Prevención del Blanqueo de Capitales (Sepblac) un total de 140 expedientes con indicios muy sólidos de blanqueo de capitales.
El pasado año, el CRAB recibió más de 16.000 alertas de los registros de posibles acciones irregulares, de las que “entre 400 y 500” fueron después enviadas al Sepblac.
Masa explicó por qué el número de casos reportados cada vez es menor. Él lo atribuyó a que los registradores cada vez están mejor informados sobre cómo detectar prácticas que puedan ser constitutivas de un delito de blanqueo, por lo que son capaces de discriminar mejor los indicios sólidos.
Por el contrario, y con la información disponible no pudo aventurar si otra razón de este descenso es que en realidad esté disminuyendo el volumen de delitos de blanqueo.
Masa recordó que los registradores son entre todos los sujetos obligados a comunicar indicios de blanqueo de capitales, los únicos que no tienen derecho a abstenerse a realizar la inscripción registral que se les solicite, en aras de proteger la seguridad jurídica.
Así, el CRAB ha desarrollado sistemas informáticos que detectan posibles casos de blanqueo (mediante los denominados supuestos indiciarios) y remiten una alarma al registrador para que sea él quien tome la decisión de si envía al citado centro el caso, en cuyo caso queda exento de responsabilidad.
El análisis posterior busca dar solidez a los indicios, ya que el objetivo final de este proceso es aligerar la carga de trabajo del Sepblac.
Entre enero y octubre, los registradores también facilitaron más de 400.000 informaciones solicitadas por los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado, los servicios de inteligencia, el Sepblac, el Banco de España o la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), así como de los órganos judiciales, todas ellas relacionadas con investigaciones por blanqueo.
Algunas claves
Áreas geográficas. El director del CRAB, José Miguel Masa, confirmó que las zonas donde más alarmas saltan por posibles casos de lavado de dinero son las áreas con mayor desarrollo turístico y, por ende, urbanístico, así como en las grandes capitales.
Legislación. Preguntado si la actual normativa es suficiente para prevenir, perseguir y castigar el blanqueo, Masa y el ex Fiscal General del Estado, ahora en Garrigues, Eduardo Torres Dulce, coincidieron en que sí es adecuada, si bien está en permanente cambio.
Bloqueo de bienes. Uno de los aspectos en los que coincidieron en que debería desarrollarse más la ley es en el poder que se le brinda al registrador para que decrete el bloqueo de un bien, algo que no se ha hecho hasta ahora nunca.