El Brent corrige, pero se mantiene en máximos de dos años
El crudo cede más de un 1%, aunque conserva los 58 dólares Los inversores se debaten en si el rebote es temporal o se prolongará en el tiempo
El crudo se ha tomado este martes un respiro. El lunes el Brent llegó a dispararse más de un 3% y encaramarse no solo a máximos del año, sino al nivel más alto desde julio de 2015. Después ha tocado una recogida de beneficios para los inversores. Cedió en torno a un 1% hasta los 58 dólares, aunque no pierde esos máximos.
Si bien durante buena parte del año los inversores dudaban una y otra vez sobre la capacidad de la OPEP y del mercado para ajustar la oferta y la demanda de crudo y presionar el precio al alza. En esta segunda parte del año un cóctel de noticias positivas ha recuperado el mercado alcista para esta materia prima.
El primero de estos motivos llegó la semana pasada en forma de informe de la Agencia Internacional de la Energía. Mientras que las anteriores previsiones de este organismo no eran tan positivas como el mercado requería, la mejora económica y el repunte del consumo de petróleo en la temporada alta mejoraron las expectativas. Así, la AIE cifró en 1,6 millones de barriles el crecimiento de la demanda de crudo. 100.000 barriles más de lo esperado.
El segundo fue el alto grado de cumplimiento del último acuerdo de la OPEP de recorte de la producción de crudo entre los países firmantes. Los últimos cálculos, previos a la última cumbre técnica del cartel, eran del 118%. Esta buena cintura (que no había sido así durante la primavera) compensa que dos países de la organización, Libia y Nigeria, se hayan mantenido ajenos a los recortes e incrementado el ritmo de bombeo una vez que han dejado atrás sus respectivas guerras civiles.
A esto se le han sumado dos factores externos al mercado del crudo. Por un lado, la victoria del sí en el referéndum por la independencia del Kurdistán. La amenaza de que la parte norte de Irak se independice y arrastre a la población kurda de Iran y Turquía ha llevado a cerrar la frontera con el país. Y a la república presidida por Erdogan a amenazar con cortar los oleoductos que trasladan al crudo producido allí hasta Europa, su principal fuente de riqueza.
Antes de ello, el paso de los huracanes por el Caribe ha llevado a la distancia entre el Brent y el Texas al punto más alto en dos años. Aunque en un principio el daño sobre las plantas de refino había hecho temer el efecto sobre la demanda global, lo cierto es que ha hecho que la oferta de crudo desde el sur de EE UU quede bloqueada. Y que se centre solo en el petróleo europeo.
La clave ahora para los analistas está en vaticinar si el rebote del petróleo será temporal o se prolongará en el tiempo. Desde el banco de inversión suizo Julius Baer, se muestran cautelosos por que la corrección se prolongue. De hecho, Norbert Ruecke, jefe de Análisis de Comodities, afirma que comienzan a abrir posiciones cortas sobre el crudo para cubrirse de que eventualmente la tensión geopolítica que soporta al Brent se disipe. Para ETF Securities, la clave a largo plazo está en noviembre. Entonces se volverá a reunir la OPEP para decidir si prolonga e intensifica el recorte en la producción de 1,8 millones de barriles al día que acordó en noviembre. "Sin una extensión, los mercados globales de crudo pueden volver a registrar excedentes", asegura en un informe.