Los 10.400 puntos: ¿un nuevo techo de cristal para el Ibex?
Los inversores, más pendientes de la Fed que del discurso de Trump en la ONU El euro retoma vigor y roza de nuevo los 1,20 dólares
A pesar de abrir con leves recortes, las Bolsas europeas se han contagiado este martes rápido del entusiasmo que reinó en Wall Street la noche anterior. Una fiesta que ni tan siquiera ha aguado la amenaza de Donald Trump de "destruir totalmente" Corea del Norte pronunciada ante la Asamblea de las Naciones Unidas. Al cierre del mercado en Wall Street, el Dow Jones subía un 0,18% y marcó su quinta sesión en máximos, mientras que el S&P 500 hizo lo propio por tercera vez consecutiva (0,11%). Un optimismo que, sin embargo, no fue suficiente para que el Ibex reconquistase los 10.400 puntos, pese a subir un 0,39%.
El miedo por que la escalada de tensión entre Corea del Norte y EE UU despliegue una guerra nuclear a nivel global se va disipando de la mente de los inversores, después de haber marcado el devenir del mercado el mes pasado. Con la Reserva Federal reunida desde hoy, esta es la cita que más expectativa despierta. El mercado descuenta que Janet Yellen anuncie el miércoles un paso más en la retirada de estímulos y endurezca su discurso con respecto a la subida de tipos.
Frente a una renta variable que se mostró apática, en las divisas sí tuvieron mayor peso las palabras de Trump. El euro, que registraba ligeras subidas a lo largo de la jornada, se animó tras la intervención del presidente y rozó de nuevo los 1,20 dólares que ya marcó en agosto. Precisamente una divisa norteamericana que ganaba peso en las últimas jornadas era la esperanza del mercado a que la Fed retomase su proyecto de subir tipos una vez más este año. Algo que se llegó a ver cuestionado durante los momentos de máxima debilidad de la moneda norteamericana.
Las inusitadas subidas del euro penalizaron al Dax, que fue el índice europeo que subió con menor fuerza, . Una divisa fuerte cuestiona la marcha de las exportadoras alemanas, un importante pellizco de la Bolsa de Frankfurt y el motor de la economía germana (y, por ende, de la europea).
Las palabras de Trump también penalizaron la rentabilidad del bund, después de ocho sesiones seguidas al alza. En cuanto a los bonos periféricos, la mejora de la nota sobre la deuda portuguesa por S&P 500 –que los sacó de la calificación de basura- les garantizó una segunda sesión a la baja. La del español a 10 años se situó en el 1,56%.
Este comportamiento de la renta fija no fue óbice para que los bancos (que sufren cuando la rentabilidad de la deuda a largo plazo cae) cerrasen alza. Por encima, Siemens Gamesa se coronó como mejor valor del Ibex. Sube un 3,36% y vive su mejor sesión en dos semanas tras firmar un contrato en China con el que pretende salvar la debilidad del mercado indio. Después, IAG ha sacado partido con un alza del 2,45% a los problemas de Ryanair con sus pilotos, que les ha llevado a cancelar más de 500 vuelos solo en España. Y Repsol, que sube un 1,06% y capitaliza el rebote del Brent (de más de un 5% en la última semana), en máximos de abril, condicionado por ambos lados entre la subida de la producción en Estados Unidos y la reducción de las exportaciones saudís.