Hacer más provisiones beneficiará a la banca europea
La norma NIIF 9, que entrará en vigor en 2018, les permitirá prestar más Las entidades dicen que afectará a los ingresos, pero ignoran las ventajas a largo plazo
Los sabios pero incómodos consejos rara vez se aprecian. Véase los bancos europeos, que a partir de 2018 se verán obligados a provisionar los préstamos incobrables de otra manera. Dicen que eso pesará sobre los dividendos y los ingresos a corto plazo, pero ignoran los beneficios a largo plazo.
Desde el año que viene, con las nuevas normas de contabilidad globales, denominadas NIIF 9, los prestamistas ya no podrán esperar a que un préstamo vaya mal para registrarlo en forma de pérdidas. Para los créditos sanos, las provisiones tendrán que hacerse según las pérdidas proyectadas para el año siguiente. Y si la calidad del crédito se está deteriorando, las pérdidas tendrán que registrarse a lo largo de la duración del préstamo. Todo esto se sumará al dinero que los bancos ya tienen que apartar para los préstamos incobrables existentes.
En resumen, los bancos de la UE tendrán que hacer mayores provisiones. Sus ratios de préstamos morosos alcanzaron su máximo en 2012, tres años después que en EE UU, y están cayendo más lentamente.
Las provisiones iniciales pueden afectar en principio a los ingreso netos de los bancos y hacer que estén menos dispuestos a prestar. Los pagos a los accionistas también pueden sufrir. La firma de rating Moody’s estima que las nuevas normas reducirán las ratios de capital de máxima calidad CET1 hasta en 60 puntos básicos, aproximadamente el importe anual de ganancias retenidas que Société Générale ha añadido a su ratio CET1 durante los tres últimos ejercicios. El banco francés puede tener que recortar dividendos para mantener tales subidas con el nuevo régimen.
Sin embargo, es probable que a los bancos, los inversores y la economía les vaya mejor cuando los malos tiempos lleguen, porque llegarán. Habrá menos necesidad de que los prestamistas hagan grandes e inesperadas provisiones durante las recesiones, lo que significa que podrían prestar más que con las reglas actuales. Su coste de capital también es probable que caiga a lo largo del ciclo económico si los tenedores de bonos se sienten mejor protegidos. Los que dan consejos dolorosos no deben esperar agradecimiento. Pero NIIF 9 puede acabar haciendo un favor a los bancos.
Los autores son columnistas de Reuters Breakingviews. Las opiniones son suyas. La traducción, de Carlos Gómez Abajo, es responsabilidad de CincoDías.