Jesper Brodin, un CEO digital para la república de Ikea
Tras 22 años en el grupo, se convierte en su líder en pleno giro al comercio online
Ikea quiere seguir creciendo y para eso ha decidido dar un cambio (aunque no radical) a su equipo directivo. Jesper Brodin (Suecia, 1968), actual responsable de la cadena en Suecia, se convertirá el 1 de septiembre en su consejero delegado. Más de dos décadas trabajando para la firma nórdica avalan una experiencia y conocimiento del negocio suficientes como para lograr el objetivo marcado por Ikea: duplicar para 2020 las ventas logradas en 2012. Es decir, llegar a los 50.000 millones de euros.
“Estoy convencido de que su amplia experiencia y su pasión por la vida casera y las ventas le permitirán continuar con éxito el gran trabajo realizado por Peter Agnefjäll”, señaló Lars-Johan Jarnheimer, presidente de Ingka Holding, empresa matriz de Ikea. Agnefjäll ha decidido abandonar el cargo voluntariamente tras cinco años de intenso trabajo, pues considera que es el “paso natural a dar”. “Es un puesto muy intenso en el que trabajas más o menos 365 días al año, unas 15 o 16 horas al día”, explicó el ya ex consejero delegado que, antes de embarcarse en un nuevo proyecto, se tomará un tiempo de descanso con su familia.
Durante este lustro se han producido varios cambios en el seno de Ikea que reorientan su negocio y sus objetivos. El año pasado, la cadena tomó la decisión de centrarse en el apartado comercial del negocio y, por tanto, en las peticiones de sus clientes, y derivar el diseño, la producción y la distribución de sus productos a su filial Inter Ikea. La firma sueca también ha comenzado a abrir establecimientos en el centro de las ciudades, está intentando reforzar sus ventas online y ampliando su presencia en países como EE UU y China. Además, en poco tiempo abrirá su primer establecimiento en India –un país en el que espera tener 25 puntos de venta en una década– y llegará a Serbia.
“Necesitamos una perspectiva a largo plazo. Están ocurriendo muchos cambios en el mundo a nuestro alrededor”, afirmó Brodin al conocer su nombramiento, una nueva responsabilidad por la que se siente “muy emocionado”.
El nuevo CEO llegó a la cadena de muebles y artículos para el hogar hace más de dos décadas, con tan solo 26 años, como director de compras en Karachi (Pakistán), donde tuvo que liderar por primera vez un equipo de personas. Un reto, pero también la herramienta fundamental para que todo funcione: “La clave para lograr que todo ocurra es un equipo de personas curiosas y apasionadas con gran talento y motivación que juntas hagan posible lo imposible”, ha declarado en alguna ocasión.
Poco después desarrolló la base de proveedores de Ikea en Indonesia y Malasia. En cuatro años, Brodin se convirtió en el asistente del fundador del grupo, Ingvar Kamprad, y del director general en ese momento, Anders Dahlvig, una época en la que aprendió cómo se lidera una gran compañía. Por esta época, en 1996, se produjo el desembarco de Ikea en España con la apertura de una tienda en Badalona.
Su ascenso no paró y tres años después de su nombramiento como ayudante de los dos altos cargos fue designado business area manager de cocinas y comedores, su empleo soñado, como ha llegado a afirmar. De hecho, a día de hoy sigue siendo un gran defensor de la marca y su espíritu innovador. Durante este periodo trabajó en Suecia, pero pronto se trasladó de nuevo a Asia, en esta ocasión a China, para convertirse en el responsable de compras de Ikea en el país, donde en la actualidad cuenta con ocho tiendas. El país asiático es uno de los mercados, junto a Australia, Canadá y Polonia, con un crecimiento más rápido.
En 2011, Brodin regresó a Älmhult, la sede de Ikea en Suecia, como jefe de compras. Fue en este pueblo de 9.000 habitantes (en el que cerca de 5.000 trabajan para el fabricante de muebles) donde la multinacional instaló su primera tienda.
Finalmente, tras dos años en este cargo, llegó a su puesto actual, que abandonará en menos de tres meses: director de Ikea Suecia y responsable del desarrollo y suministro de productos, lo que supone liderar un equipo de 12.000 personas.
“Estoy deseando trabajar con Jesper mientras damos los siguientes pasos para convertirnos en el líder mundial multicanal de venta de mobiliario del hogar”, afirmó el presidente de la matriz de la firma. Lars-Johan Jarnheimer resaltó además la labor realizada por el actual CEO, que ha permitido la expansión de Ikea en “nuevos y fundamentales mercados”, así como “acelerado su transformación para adaptarse a las necesidades de los clientes”.
Uno de los principales cambios ha sido el impulso de la tienda online: ya venden a través de internet en 13 de los casi 30 países en que están presentes y esperan alcanzar los 5.000 millones de euros en ventas online para 2020 (frente a los 1.400 millones que logró en el último ejercicio fiscal, cerrado en agosto de 2016). Brodin tendrá que construir una república independiente y digital.
Cuarto líder en una década
Jesper Brodin es el sexto consejero delegado de Ikea desde que Ingvar Kamprad la fundara hace 74 años. No obstante, durante la última década han pasado por el puesto otras tres personas.
Realizó un máster de Ciencias en Ingeniería Industrial en la Universidad Chalmers de Tecnología, ubicada en Gotemburgo (Suecia).
En la actualidad, vive en Älmhult, pero a partir de septiembre tendrá que trasladarse a Leiden (Holanda), donde está la sede de Ikea.
La música y la navegación son dos de sus aficiones, aunque la principal es pasar tiempo con su familia.