Hacienda aclara que los viajes de los médicos pagados por la industria no tributan por IRPF
El departamento de Montoro aclarará las dudas en el reglamento de IRPF Los gastos de los laboratorios en formación no están sujetos a tributación
El Ministerio de Hacienda se ha comprometido a modificar el reglamento del IRPF para que quede claro que “los cursos de formación del personal sanitario, financiados por empresas” ni tributan ni van a tributar como renta, lo que se aplica a los congresos médicos pagados por la industria farmacéutica.
Se despeja así una duda que lleva sobrevolando alrededor de un año y creando incertidumbre en el sector médico respecto a sus asistencias a congresos pagadas por los laboratorios. Desde que el año pasado la industria farmacéutica, como medida de transparencia, publicara lo que le cuesta en cada caso esos viajes, inscripción y alojamiento, surgió la inseguridad entre los facultativos por si debían declarar ese coste –que ellos no reciben en metálico– como retribución en especie.
Tras la reunión de este lunes del ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, con el presidente de la Organización Médica Colegial de España (OMC), Serafín Romero, el Ministerio ha explicado en un comunicado que la norma será dotada “de mayor precisión” para aclarar que esta formación recibida por el personal médico no tiene la consideración de rendimiento del trabajo en especie.
La reunión se ha producido después de que en un reciente informe la Agencia Tributaria concluyera que la asistencia a congresos y jornadas médicas con gastos pagados por las compañías farmacéuticas debía tener la consideración de retribución en especie, lo que generó preocupación e incertidumbre en el colectivo médico.
El informe de la Agencia Tributaria recogía una resolución previa en el mismo sentido del Tribunal Económico-Administrativo Central del pasado 4 de abril, que a su vez se basaba en el criterio ya expresado por la Dirección General de Tributos.
Desde Farmaindustria se acogió “con satisfacción” el pronunciamiento de Hacienda. La patronal reiteró su convencimiento de que la actual formulación de la formación continuada constituye un modelo que beneficia a todos los agentes implicados: “administraciones, laboratorios, profesionales sanitarios y, sobre todo, pacientes”. Actualmente todo ese gasto de formación continuada recae en los laboratorios, que son quienes asumen que los médicos puedan asistir a congresos y conferencias. Y ese modelo podía ponerse en duda si los médicos debían incluirlo en su declaración de la renta.
La patronal “entiende que el pronunciamiento Hacienda deja constancia de la voluntad clara y firme previamente manifestada por el Gobierno a Farmaindustria de lograr una solución equilibrada y que atienda a todos los intereses legítimos en este asunto, especialmente al acceso de los profesionales sanitarios a la formación”.
La Organización Médica Colegial de España (OMC) ha salido satisfecha de la reunión solicitada a Montoro, cuyo compromiso por aclarar la cuestión ha servido para disipar la “inquietud” desatada entre los profesionales médicos por el informe de la Agencia Tributaria, según ha afirmado en un comunicado.
“Es un paso adelante para normalizar la situación y desde la OMC nos hemos comprometido, desde la independencia y el deber del cumplimiento de nuestras normas deontológicas, a asumir la encomienda de definir el marco por el que se debería regular la formación médica en España, que sirva para despejar dudas fiscales, garantizar la transparencia y evitar los conflictos de interés”, añade la nota.
De acuerdo con la OMC, Hacienda les ha trasmitido que la modificación no implica ningún cambio legislativo puesto que se trata de aclarar en el reglamento una situación que ya existe, con el fin de aportar certidumbre y seguridad jurídica.
Qué conceptos estaban en duda
El pasado junio, los laboratorios publicaron los primeros datos de pagos al sector médico, tanto para facultativos como para organizaciones sanitarias y científicas. En total, la industria desembolsó 496 millones de euros, de los que 119 millones se destinaron a ayudas para que los profesionales sanitarios pudieran acudir a actividades científicas y reuniones profesionales.
Los pagos a médicos por participar en ensayos clínicos o trabajos para la industria, obviamente deben tributar en el IRPF. La incertidumbre surgió, por ejemplo, cuando un médico viaja a EEUU a un congreso científico, con gastos pagados de inscripción, hotel y alojamiento. En ese caso el profesional no recibe el dinero, pero existían dudas sobre si ese valor debía reflejarlo en su declaración como pago en especie.