Fondos temáticos: cómo ganar dinero anticipando el futuro
Apuestan por fenómenos como el envejecimiento de la población o el ahorro energético Están muy enfocados al largo plazo y son algo más volátiles
Los grandes temas de nuestro tiempo también han llegado a la industria de la inversión. Inquietudes globales como el envejecimiento de la población en el mundo desarrollado, los cambios demográficos en los países emergentes, el empuje de la robótica y la realidad virtual o el cambio climático y la necesidad de potenciar la eficiencia energética calan en el ánimo de los inversores. Y ante ellos se comienza a surgir una creciente oferta de productos que aspiran a encontrar valor en esas tendencias globales, en fenómenos económicos y sociales que son ya una realidad y que van más allá de una campaña de márketing para vender productos.
Las grandes gestoras están haciendo una decidida apuesta por lo que ya se denomina inversión temática. Su filosofía es incorporar a sus fondos el potencial que encierran estas megatendencias, sin pasar por alto que se trata de inversión en renta variable, que requiere del correspondiente análisis de valoración y rentabilidad de las compañías. En el sector defienden además la inversión temática como fórmula con la que desvincularse del ciclo económico, aunque el momento actual permita una apuesta mucho más clara que antes por los valores cíclicos, con la mira puesta en el largo plazo.
“Las carteras pueden beneficiarse de tendencias de varias décadas, como la urbanización, el envejecimiento de la población y el crecimiento de las clases medias de los países emergentes. Es previsible que esas tendencias persistan sean cuales sean los resultados electorales o las decisiones de los bancos centrales, y además no dependen del momento en que se encuentre el ciclo económico”, defienden en UBS.
Laura Donzella, responsable de ventas de Nordea AM en Iberia y Latinoamérica, señala que los fondos de inversión temática “permiten invertir en megatendencias con un fuerte potencial de crecimiento por lo que, en ocasiones, pueden no estar correlacionados con el ciclo económico y, por ello, generan rentabilidades en segmentos de mercado que un inversor no encuentra en las clases de activos tradicionales”.
Las carteras pueden beneficiarse de tendencias de varias décadas, al margen de resultados electorales y de decisiones de bancos centrales, según apunta UBS.
La visión de Nordea AM o de UBS es compartida también por otras gestoras internacionales con fuerte presencia en España como Fidelity, BlackRock, Credit Suisse o Robeco. “La inversión en criterios temáticos está cobrando cada vez más fuerza en el mercado, no solo en el europeo, sino también en el mercado español que, por otra parte, se está volviendo cada vez más sofisticado y exigente”, aseguran en Nordea AM.
Visto el potencial de negocio que para muchas compañías plantean tendencias que se consolidarán en los próximos años como el envejecimiento de la población o el auge de los robots como mano de obra, ¿qué ventajas ofrecen los fondos temáticos frente a fondos de inversión tradicionales que busquen igualmente las mejores opciones para el largo plazo? ¿Es de verdad necesario subirse a uno de estos productos para aprovechar la ola de rentabilidad que puede encerrar el mundo del futuro?
Para Fernando Luque, experto de Morningstar, “puede haber un punto de moda en la inversión temática, pero está claro que se trata de temas de actualidad, de los temas del momento”. En su opinión, son una buena opción para complementar una cartera de fondos de inversión. Luque rechaza la idea de que su vocación de inversión sea a más largo plazo que la de cualquier otro fondo: “El horizonte temporal de los fondos temáticos es el mismo que el de un fondo cualquiera de renta variable, ni más ni menos”. Y aconseja que el inversor tenga en cuenta la importancia de apostar por una tendencia desde el principio, no ya cuando el sector se haya recalentado y pueda dar señales de burbuja de precios. “Si todos los fondos apuestan por lo mismo puede surgir un problema. En robótica por ejemplo las compañías suelen ser de pequeña y mediana capitalización”, advierte.
En Robeco reconocen que una desventaja de los fondos temáticos es que las tendencias por las que apuestan pasan a menudo por una fase de moda o fama excesiva. “Es muy importante por lo tanto mantener siempre a la vista la oportunidad de materializar la inversión y no solo tener lo que se dice una gran historia”, explican. “Aconsejamos siempre a los inversores invertir en tendencias a largo plazo, pero al mismo tiempo vigilar la rentabilidad a corto plazo. Preferimos tendencias que ya están teniendo lugar y considerar los ingresos reales”, añade la gestora holandesa. Las rentabilidades de los fondos temáticos ronda el 10% anual en los últimos años, una evolución comparable a la de tantos otra fondos de Bolsa, sin ese carácter específico.
Otra puntualización que hacen los gestores sobre los fondos temáticos es su mayor volatilidad. “No podemos olvidar que cualquier fondo temático, al estar enfocado en un tema específico, podría tener una mayor volatilidad”, apunta Donzella, desde Nordea AM. Para Fernando Luque, de Morningstar, “se trata de una cuestión de gestión de riesgos y al estar dentro de una misma industria, el fondo puede flucturar más que el conjunto del mercado y ser más volátil”. El experto apunta además que los fondos cotizados o ETF pueden llegar a ofrecer más opciones de inversión temática que los propios fondos temáticos, con un menor volumen de patrimonio.
BlackRock apuesta de hecho por los ETF para la inversión temática y ha lanzado cuatro índices temáticos, junto con iStoxx y Factset. La gestora estadounidense detecta como grandes tendencias el envejecimiento de la población, la innovación sanitaria, la digitalización y la automatización y robótica. “Se trata de fuerzas del mercado que tienen el poder de cambiar la economía global, están afectando a la forma en que vivimos y trabajamos”, explica Aitor Jauregui, responsable de desarrollo de negocio de BlackRock en Iberia.
Los gestores advierten que, al estar enfocados en un tema específico, estos fondos podrían tener una mayor volatilidad
Para Fidelity, las grandes tendencias que marcarán la inversión en los próximos años tienen que ver con la demografía, las nuevas tecnologías –disrupción digital, robótica, el internet de las cosas, el coche autónomo, baterías y acumuladores energéticos...–, el agua, las infraestructuras y la logística, la innovación en medicina y las fintech. Esta gestora defiende el carácter a largo plazo de la inversión temática. “La atención en renta variable incide en una parte relativamente pequeña del valor de una empresa, que viene determinada por los beneficios que generará en los siguientes tres años, y no en la porción más grande de su valor, representada por su rentabilidad más allá de ese período”, sostienen fuentes de la gestora.
“Hay muchas ideas interesantes de inversión, tendencias claras que van más allá del márketing, pero hay que tener en cuenta que se trata de una inversión en Bolsa, con los riesgos que supone. No hay que dejarse seducir por una temática como tal sin más”, advierte José María Luna, director de analisis de Profim.