REE ganó el 4,7 % más, con un aumento de ingresos
El beneficio hasta marzo asciende a 181,8 millones de euros La cifra de negocio ascendió a 496,5 millones de euros, un 1,8 % más
Red Eléctrica de España (REE) logró un beneficio 181,8 millones de euros en el primer trimestre del año, un 4,7 % más que en el mismo periodo de 2016, apoyado en un aumento de los ingresos, ha anunciado hoy la compañía.
La cifra de negocio ascendió a 496,5 millones de euros, un 1,8 % más que hace un año, principalmente por la entrada en servicio de nuevas instalaciones de transporte en España, mientras que los ingresos de la actividad de telecomunicaciones e internacional se mantuvieron en línea con respecto al primer trimestre de 2016.
El resultado bruto de explotación (ebitda) se situó en 400,7 millones de euros, un 2% más, y el neto (ebit) en 276,9 millones, un 1,4% más, ha informado hoy la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
En un comunicado, la compañía ha detallado que el incremento del ebitda viene explicado, además de por el crecimiento de los ingresos, por la evolución de los costes operativos.
Los costes de aprovisionamientos y otros gastos de explotación se han elevado hasta los 78,9 millones de euros, un 18,2% por encima de los registrados en los tres primeros meses del año pasado, tanto por las inversiones hechas en los proyectos en construcción de Perú y los gastos asociados a siniestros.
Los gastos de personal aumentan en un 0,7% con respecto al mismo periodo del ejercicio anterior, un incremento que está ligeramente por debajo del crecimiento experimentado por la plantilla, que se situó en 1.764 personas a 31 de marzo de 2017.
Las inversiones del Grupo Red Eléctrica han sido de 87,6 millones de euros, lo que supone un descenso del 68,4 % que los 277,5 millones registrados en el mismo periodo del año anterior, que incluían 199,8 millones de inversión realizados en la adquisición del 50% de la compañía chilena TEN en 2016.
De la cifra total de inversión del primer trimestre de 2017, 49,9 millones corresponden a inversiones internacionales en Perú, entre las que se incorpora la adquisición del 45% del capital de Redesur.
La compañía cerró el ejercicio con una deuda financiera neta de 4.852,7 millones de euros frente a los 4.949,5 de finales de 2016.