Intel y Sharp responden a Trump: invertirán 13.100 millones en EE UU
Ambas compañías anuncian la construcción de sendas fábricas, una de semiconductores que creará 3.000 nuevos puestos de trabajo, y otra de paneles de cristal líquido.
Dos grandes empresas tecnológicas, Intel y Sharp, planean una inversión conjunta de 14.000 millones de dólares (unos 13.100 millones de euros) en sendas factorías. El consejero delegado de Intel, Brian Krzanich, anunció hoy que invertirán 7.000 millones de dólares en una nueva fábrica de semiconductores en Arizona. Una planta que, según señaló, creará 3.000 nuevos puestos de trabajo cuando esté plenamente operativa. Será la tercera factoría que la compañía abra en esa localidad. Intel prevé que la planta esté lista en tres o cuatro años.
El anuncio coincidió con una visita a la Casa Blanca del ejecutivo, que indicó que con esta inversión quería dar una muestra de apoyo “a los impuestos y política regulatoria” de la Administración de Donald Trump, según informa Reuters. Pese a este apoyo hacia el nuevo presidente estadounidense, Intel forma parte del grupo de 127 compañías tecnológicas que presentaron la semana pasado un escrito legal contra el veto migratorio del nuevo Gobierno.
El fabricante de chips no fue el único que hizo un anuncio que responde a los planes de Trump de que las empresas creen empleos en el país. La tecnológica nipona Sharp también planea una inversión de más de 7.000 millones de dólares en EE UU para construir una planta de pantallas de cristal líquido (LCD), según informaron fuentes del Ejecutivo nipón a la agencia Kyodo. El proyecto forma parte del nuevo plan de negocios de la empresa, en pleno proceso de reestructuración tras ser adquirida a finales del pasado agosto por la taiwanesa Hon Hai, que cotiza como Foxconn y es conocida por fabricar los iPhone e iPad de Apple, entre otros productos tecnológicos.
En este caso, la inversión se ha dado a conocer justo antes del viaje a EE UU del primer ministro japonés, Shinzo Abe, quien se reunirá con Trump, con el objetivo de subrayar la contribución industrial y creación de empleo que las empresas japonesas hacen a la primera economía mundial, entre otros temas. La reunión entre Trump y Abe tendrá lugar este viernes en Washington, informó Efe. El objetivo de Sharp es comenzar a construir este año la nueva planta en EEUU e iniciar la producción en 2020. El proyecto contará con la participación de otras empresas niponas del sector y con financiación de los bancos japoneses Mizuho Bank y Bank of Tokyo-Mitsubishi UFJ.