Zero Latency: la mayor experiencia de realidad virtual del mundo llega a España
La 'startup' asturiana 7Fun abre en Madrid el primer centro de ocio de realidad virtual multijugador de Europa. Zero Latency permite a seis personas participar simultáneamente en una batalla contra zombis virtuales.
La startup española 7Fun ha colocado a Madrid en el centro de la realidad virtual. La compañía ha abierto en la capital española el primer centro de ocio de realidad virtual multijugador Zero Latency que existe en Europa. Se trata de un local donde la acción tiene lugar en una zona de juego de 200 metros cuadrados reales y donde los jugadores –provistos de múltiples dispositivos– pueden moverse con libertad y verse unos a otros mientras participan simultáneamente en una misma batalla virtual contra zombis. La apertura de este centro de ocio alternativo tiene lugar después de que la joven firma asturiana se haya hecho con los derechos de explotación para toda Europa de Zero Latency, la mayor experiencia de realidad virtual del mundo creada por la empresa australiana del mismo nombre.
Esta firma, con sede en Melbourne, ya ha exportado también “y con gran éxito” este tipo de centros a EEUU y Japón. En este último país, en alianza con la popular compañía de videojuegos Sega, según explicó Alberto Marcos, director de desarrollo de 7Fun, una empresa que diseña, construye y gestiona centros de ocio, independientes o integrados en centros comerciales. La firma española, en posesión de la licencia para toda Europa, cuenta con planes ambiciosos de expansión. “Abriremos más centros en España (el siguiente posiblemente en Barcelona) y en múltiples capitales europeas, como París, Londres y Lisboa. Cada centro supone una inversión de un millón de euros.
La ‘startup’ asturiana tiene los derechos de explotación de esta tecnología para Europa. Planea abrir múltiples centros
Marcos cuenta que Zero Latency supone “un nuevo paso adelante para la realidad virtual con respecto a la tecnología que actualmente está en el mercado doméstico”. No utiliza ninguno de los cascos que ya han llegado a los consumidores, sino que apuesta por tecnología propia basada en la plataforma abierta de realidad virtual OSVR. “No es posible jugar en casa a nada parecido. El enorme escenario en el que tiene lugar la experiencia [en el caso de Madrid 200 metros cuadrados cuadrados, y 400 en el de Melbourne] y el poder hacerlo en compañía de familiares y amigos supone un paso adelante para la industria”.
64 cámaras graban los movimientos
Los centros no tienen por dentro paredes físicas para que los jugadores puedan correr, andar y luchar para sobrevivir a distintas oleadas de zombies virtuales que les atacarán durante la partida (pronto lanzarán otros dos videojuegos para aumentar la variedad de experiencias). “Esa libertad de movimiento se consigue gracias a que cada jugador lleva un casco de realidad virtual, un ordenador cargado a la espalda como una mochila, un micrófono y armas simuladas impresas en 3D”, continúa Marcos, que explica que hay en la sala 64 cámaras siguiendo los movimientos de los jugadores. Esa información se envía a un servidor, que la procesa y la devuelve a las mochilas que llevan los jugadores. “Es entonces cuando se renderiza la imagen que se reproduce en el casco de realidad virtual; todo en tiempo real y con una latencia cero (desfase que se produce entre lo que hace el jugador y cuándo lo ve)”.
35 euros por partida
Aunque es ahora cuando se da a conocer públicamente, el centro de 7Fun se abrió el pasado noviembre y desde entonces ha recibido a más de 3.500 jugadores, con una media de edad superior a 45 años. Quizás por el precio, pues cuesta 35 euros la partida de 30 minutos.
7Fun confía en el tirón que va a tener la realidad virtual como expertos en ocio. Esta industria alcanzará un valor de 6.400 millones este año, según las últimas previsiones de Statista. Y no será solo gracias a las plataformas propietarias, los cascos domésticos o a los proyectos de empresas. Los centros de ocio también parece que jugarán un papel clave en este crecimiento. Sin ir más lejos, más de 20 parques de atracciones de EEUU instalaron montañas rusas de realidad virtual en 2016, según el informe Virtual and Augmented Reality. Are You sure It Isn’t Real? de la consultora Citi GP.