La estabilidad abre paso a nuevas operaciones
Los niveles de precio tocan fondo en Europa y las refinanciaciones se ralentizan
El ejercicio 2016 ha supuesto un punto de inflexión para el mercado de préstamos en España. Las operaciones de refinanciación han comenzado a estabilizarse para dar paso a una mayor actividad en el mercado de fusiones y adquisiciones, un negocio que ya está predominando en Europa.
El volumen total de préstamos en España alcanzó los 59.249 millones, lo que supone un descenso del 6,8% respecto al año anterior, con los datos recopilados por Thomson Reuters. Además, los expertos aseguran que los niveles de precio han tocado fondo en el continente. Sin embargo, el balance es más que positivo, ya que en la recta final del año España comenzó a dar signos de nuevas operaciones de inversión, que se traducen en un alza de la actividad de fusiones y adquisiciones. “La refinanciación se ha estabilizado en España en 2016 y, en general, se ha ralentizado en Europa, al haber tocado fondo los niveles de precios”, apunta José María Muro-Lara, director de cobertura de clientes y financiación inmobiliaria de ING.
El año pasado, los sectores más activos fueron construcción, energía y servicios. El ranking lo volvió a liderar Santander, seguido de CaixaBank y BBVA,según Thomson Reuters. Entre las operaciones más importantes destacaron las de ACS (2.350 millones), Acciona (2.200 millones) y Ferrovial (1.250 millones); la refinanciación de Iberdrola (2.500 millones) o Gestamp (1.152 millones). Telefónica también tuvo un papel protagonista, al llevar a cabo dos refinanciaciones por valor de 3.000 y 2.500 millones. También MásMóvil, que financió la adquisición de Yoigo y Pepephone.
“Se ha visto mucho apetito por la inversión y, en muchos casos, se han producido sobresuscripciones muy importantes”, señala José Manuel Arcenegui, director de banca corporativa de Banca March. Así, las grandes empresas que no refinanciaron su deuda en 2015, mejorando sus condiciones, lo han hecho en 2016, ajustando más, si cabe, los precios. “En las medianas empresas se ha visto una actividad moderada, en línea con 2015, siguiendo con la de ajuste de condiciones en precio y flexibilizando, en parte, la financiación”, añade Arcenegui, quien asegura que en la segunda parte del año “se empezó a ver cierta actividad de fusiones y adquisiciones con financiación asociada”.
- Operaciones más pequeñas
Pese a que ha sido un ejercicio positivo, lo cierto es que se ha registrado una caída considerable respecto al volumen total. Para Daniel Martin Haas, director de préstamos en Bankia, se ha debido a que el tamaño de las mismas se ha reducido significativamente. “Salvo las contadas compañías del Ibex 35, ha habido muy pocas que han superado los 1.000 millones de financiación”, recuerda. Otro factor que ha influido, según Martin, es el número de novaciones o modificaciones sobre algún aspecto del préstamo. “Los amend and extend (A&E), por los cuales se reducen precios y se alargan levemente los plazos, tuvieron en 2015 una gran relevancia. Aunque en 2016 ha habido menos novaciones que en 2015”, comentan. Asimismo, existen otras fórmulas alternativas que siguen compitiendo con el mercado de préstamos: “Como la emisión de bonos y, en menor medida, el direct lending [sin intermediación financiera]”, apunta Ángel Valdovinos, director de financiación sindicada de Popular.
El año que terminó también fue importante para las fusiones y adquisiciones, aunque aún pesa más la refinanciación que la inversión nueva. “Distintas empresas españolas también optaron por impulsar aún más los vencimientos”, explica Richard Basham, responsable de préstamos sindicados de Citi en EMEA.
En la misma línea, José Eguren, director de banca de empresas de Bankoa Crédit Agricole, sostiene que parte de la financiación captada para el largo plazo “se ha empleado en la sustitución de la de a corto plazo”. Y es que, durante el ejercicio pasado, las financiaciones corporativas se elevaron hasta los casi siete años de media.
En 2017, más fusiones y adquisiones
José María Muro-Lara, de ING, asegura que en 2017 se reactivarán las operaciones corporativas “por la estabilidad política”. Société Générale espera además “una reducción significativa” de las refinanciaciones y que se mantengan las compras de centros comerciales. José Manuel Arcenegui, director de banca corporativa de Banca March, confía también en ese repunte de actividad de fusiones y adquisiciones y de operaciones con firmas de capital riesgo”.
En Bankia creen que seguirán “las refinanciaciones, extensiones y ampliaciones de importes” corporativas, y que habrá más competencia en plazo y apalancamientos. Y Richard Basham, responsable del área de Citi en EMEA, espera que los prestatarios se centren en “la optimización y ampliación de los vencimientos”.