Innovación: la clave del éxito económico y empresarial
La recuperación económica en España no está garantizada
A finales de 2016, la economía española crece un 3,2% interanual (INE), dos décimas menos que el trimestre anterior. El consumo y la inversión se frenan, pero el sector exterior y el gasto público mejoran su aportación. El frenazo ha sido mayor en el sector industrial y en servicios. En cambio, el turismo, el comercio, las comunicaciones y las actividades profesionales aportan los mejores resultados. El Banco de España, aunque prevé una leve desaceleración en 2017 ha mejorado las previsiones de crecimiento de la economía española hasta el 2,5% del PIB. Sin embargo, seguimos con el mismo modelo productivo previo a la crisis, somos una economía de servicios, necesitamos industria y agricultura, como Estados Unidos, Alemania o Francia y, sobre todo, hemos de incorporar un nuevo factor en la ecuación que haga que nuestra economía funcione como es debido.
¿Cómo conseguir un crecimiento económico sostenible en España, menos sujeto a los vaivenes coyunturales y con generación constante de empleo de calidad? Yo sostengo que la innovación –empresarial y tecnológica– es el principal motor de crecimiento en las economías avanzadas, según World Economic Forum. De ahí, la importancia de invertir en I+D+i, por parte de los Gobiernos. Además, de manera coyuntural, la innovación, especialmente la tecnológica, ha ayudado a que unas naciones salgan antes de la crisis que otras y vuelvan a crecer y crear empleo. Estados Unidos, que ha invertido tres veces más en innovación tecnológica y empresarial que Europa, especialmente en el sector privado, salió de la recesión seis años antes que la Unión Europea, reduciendo su tasa de paro a menos de la mitad de la que tiene Europa.
La recuperación económica en España no está garantizada: The Economist, Business Week Bloomberg, The Wall Street Journal, Financial Times, y otros medios de comunicación internacionales advierten que, como consecuencia de las anunciadas políticas económicas de Donald Trump, Norteamérica y el mundo corren un serio riesgo de volver a la recesión. En nuestro caso, primero, han sido necesarias reformas estructurales, como la laboral y la financiera, entre otras muchas, para que España dejara de decrecer y destruir empleo. Las reformas dieron sus frutos y, desde el segundo semestre de 2013 el país no ha dejado de crecer y crear empleo: una media del 3% de crecimiento en PIB, medio millón de nuevos puestos de trabajo al año. El Gobierno prevé crecer el 2,5% el año que viene y crear otro medio millón de empleos. Falta decir el cómo lo va a conseguir: business as usual o reformas estructurales...
Por eso creo que, ahora, precisamente ahora, España tiene la oportunidad de dar un salto cualitativo y cuantitativo esencial para cambiar su modelo productivo y construir una economía sostenible en el tiempo, menos sujeta a los vaivenes de los ciclos económicos. He dedicado 30 años a estudiar las palancas que la política económica debe mover para que la economía española evolucione y deje de depender de sectores estacionales para avanzar hacia la economía del conocimiento. No hace falta reinventar la rueda, porque tenemos el ejemplo norteamericano, desde un punto de vista macroeconómico. Esas claves nos dan la hoja de ruta necesaria para avanzar por la senda correcta. Obama, en febrero de 2009, dedicó un 10% de su paquete de estímulo a imbuir economía y empresas en las tecnologías de la información.
Y, como todos sabemos, “son las empresas las que generan riqueza y crean empleo”. He dedicado los últimos doce años a realizar estudios económicos que ayudan a explicar en detalle los casos de éxito de grandes empresas españolas que marcan el camino a seguir en sus sectores de actividad: CaixaBank (perteneciente al grupo La Caixa mediante Criteria Caixa, que depende de la Fundación Bancaria La Caixa), banco más innovador tecnológicamente del mundo, según Forrester, Gartner, The Banker y Euromoney, en los últimos cinco años; Telefónica, empresa líder en telecomunicaciones y que, en España, es banco de pruebas exitoso y vanguardista en digitalización, big data, convergencia, cloud, contenidos y televisión, fibra óptica, etc. El Corte Inglés, con su proceso exitoso de transformación digital de los dos últimos años, hasta arrebatarle en nuestro país el liderazgo en comercio electrónico al líder mundial, Amazon; Gas Natural Fenosa y la innovación aplicada a las energías limpias; Abertis, líder mundial en gestión de infraestructuras inteligentes, utilizando las últimas tecnologías; Cellnex Telecom, líder europeo en gestión de infraestructuras de telecomunicaciones, etcétera.
España tiene empresas que pueden marcar el camino a seguir, porque ellas ya lo están recorriendo de la mano de la innovación. De cada una de estas empresas –y otras del Ibex 35– viven cientos de miles de pymes. La innovación en la gran empresa española debe actuar como efecto transformador con el 99,88% del tejido empresarial español, que son pymes (3,2 millones, entre pymes y autónomos).
Por último, el sector innovador por excelencia, que es el tecnológico, tanto el tradicional (HP, IBM, Microsoft, Intel, SAP, Sage, Oracle, Salesforce, etc.) como el nuevo (Apple, Google, Amazon, Facebook), que actúan como efecto tractor del resto de sectores de actividad. Sin lugar a dudas, esto es así en Estados Unidos, donde suponen el 70% del PIB –considerado sectorialmente– y donde un trabajo de manufactura en tecnologías de la información genera 16 puestos de trabajo en otros sectores (William Jefferson Clinton, en Back to work). Todas estas empresas tienen filiales en España que ayudan a las pyme y autónomos a ser mejor, es decir, a mejorar su gestión empresarial: La Radiografía de la Pyme de Sage dice que la pyme otorga (escala 1 a 10) un 7,6 de importancia a las TIC como elemento para mejorar su gestión empresarial.
Los tres aspectos contemplados aquí, componen un todo intelectual y conceptual en que la innovación empresarial y tecnológica es el hilo conductor y esencial, palanca del cambio económico que necesita España para consolidar definitivamente la recuperación.
Jorge Díaz-Cardiel es Socio Director de Advice Strategic Consultants. Autor de ‘Innovación y éxito empresarial’