El Ibex, incapaz de salvar la sesión, dice adiós a los 9.400
La libra recupera un 1,7% frente al dólar
La hoja de ruta expuesta por la primera ministra británica Theresa May para la salida de Reino Unido de la Unión Europea confirma la apuesta por el brexit duro, con el abandono definitivo del mercado único, y avanza un tono duro de cara a las negociaciones, en las que May incluso ha lanzado un ultimátum a sus vecinos europeos al advertir que “un mal acuerdo podría ser peor incluso que la falta de acuerdo”. La cotización de la libra, que tanto ha acusado en las semanas previas la posibilidad de una ruptura radical con la UE, sin medias tintas, reaccionó sin embargo con un fuerte repunte, el más elevado en un solo día desde octubre de 2008.
La libra llegó a subir a los 1,24 dólares, con un alza del 2,86%, y se apreció otro 1,84% frente al euro, hasta 1,15. La divisa británica puso freno momentáneo a un derrumbe que no ha cesado desde el pasado 24 de junio, cuando se conoció el resultado del referéndum que ha arrastrado su valor a mínimos de más de tres décadas. Desde aquella votación pierde el 16,7% frente al dólar y el 11,5% frente al euro. Y ha intensificado su descenso a medida que crecía la posibilidad de una ruptura total con la UE, que quedó confirmada, y que Theresa May ya avanzó en su discurso ante el Partido Conservador el pasado octubre.
El repunte de ayer, tras las caídas de las jornadas precedentes, se explica en que además de su apuesta por la salida definitiva de Reino Unido del mercado único europeo, May también avanzó que el acuerdo final de ruptura con la UE deberá ser aprobado por el Parlamento británico, lo que a juicio de los inversores abriría la puerta a suavizar las propuestas más radicales en aras del máximo acuerdo político posible. May también ha señalado que pese a que la salida de la UE implica necesariamente el abandono del mercado único, trabajará para alcanzar el “máximo acceso posible a él”. Así, el objetivo del ejecutivo británico pasaría por minimizar los daños que el divorcio de la UE puede ocasionar a la poderosa industria financiera de la City, clave para la economía del país. En este sentido, May añadió que evitará la “caída por el precipicio” que teme el sector empresarial y financiero si las negociaciones se prolongan más allá de los dos años inicialmente previstos.
En paralelo al alza de la libra, la Bolsa de Londres registró la caída más pronunciada de los parqués europeos, del 1,46%. El FTSE se ha disparado el 14% desde el brexit gracias al tirón de las empresas exportadoras, las grandes beneficiadas del derrumbe de la libra. Las mayores caídas correspondieron a la operadora de cruceros Carnival y a la tabaquera BAT, con descensos de más del 3%.
El descenso de la libra, que hace más competitivas las exportaciones británicas, ha permitido amortiguar en parte el impacto económico inicial del brexit pero promete tener un reflejo determinante en el alza de los productos importados, más caros para el bolsillo del ciudadano. Así, la inflación en Reino Unido ya ha cerrado 2016 en máximos desde julio de 2014, en el 1,6%.
El resto de Bolsas europeas mantuvieron un comportamiento indeciso. El Ibex 35, que se pasó gran parte de la sesión luchando por mantener el signo positivo, finalmente claudicó y cayó un 0,16%, diciendo adiós a los 9.400 puntos. Los mayores descensos corrieron a cargo de ArcelorMittal y Acerinox, las dos representantes del sector de recursos básicos, el segundo sector más castigo en Europa (-0,59%). En el lado opuesto, es decir, el de las ganancias, los mayores ascensos del Ibex 35 fueron registrados por Popular, IAG y Acciona. El banco que presidirá Emilio Saracho se anotó un 6,65% después de que Citi aconsejara comprar títulos de la entidad. Los analistas del banco estadounidense no descarta una opa sobre Popular y fija como precio objetivo los 1,30 euros por acción. Por su parte, la aerolínea subió un 3,77% apoyada en la recuperación de la libra.
Solo el Mib italiano, que hoy ha corregido las caídas registradas tras la rebaja del rating, ha escapado a los números rojos y se ha anotado un 0,25%. El Dax alemán retrocede un 0,13%, el Cac francés, un 0,46% y el Euro Stoxx, un 0,29%.
El mercado de deuda ha permanecido ajeno a las declaraciones de premier británica y prolonga la estabilidad de las últimas sesiones. La rentabilidad de la deuda española a diez años cerró en el 1,39% frente al 1,42% de un día antes mientras el bund alemán se mantuvo sin cambios en el 0,32%. Los escasos movimientos registrados por ambos bonos fueron suficientes para que la prima de riesgo cediera tres puntos básicos, hasta los 107.