Apostar a ganador con las divisas
Los seguros de tipo de cambio ganan popularidad en España a medida que las pequeñas empresas se internacionalizan y aumenta la volatilidad del euro-dólar
Gestpointgsm es una pequeña empresa dedicada a la compraventa mayorista de móviles nuevos y usados. La compañía adquiere grandes volúmenes de teléfonos, por lo general excedentes de stocks, a operadores y fabricantes y los revende a distribuidores en países donde la tecnología está menos desarrollada.
Como parte de su negocio, la empresa participa en subastas de saldos en todo el mundo. Hace dos años ganó la licitación de un lote en Latinoamérica gracias a que había ofrecido el mejor precio en dólares, la moneda estipulada en las bases del concurso. Pero en algunas subastas, como la de este caso, el adjudicatario no paga hasta que recibe la mercancía, lo que puede tardar dos meses.
Cuando llegó ese momento, un movimiento inesperado del tipo de cambio había disparado la cantidad de euros que Gestpointgsm necesitaba para desembolsar en dólares la suma comprometida. A partir de entonces y a raíz de esta mala experiencia, la empresa utiliza en todas sus operaciones seguros de tipo de cambio.
La compañía, con sede en Madrid, empezó en 2010 comprando móviles a particulares a través de su página web, pero hoy este negocio es marginal. Su fuente principal de ingresos es el mercado mayorista, donde se abastece de muchos países con monedas diferentes.
A diferencia de los bancos, los brókeres de divisas no cobran comisión, solo aplican un pequeño diferencial
“La mitad de nuestras compras viene del extranjero, pero la entrega no es inmediata, sino que puede tardar dos o tres meses. En ese lapso, el alza en la cotización de la divisa puede encarecer la importación. Para diluir ese riesgo, cada vez que cerramos un contrato aseguramos el tipo de cambio”, afirma Miguel Herrán Villota, primer ejecutivo de Gestpointgsm.
Al igual que esta, muchas pymes han internacionalizado sus negocios para crecer y reducir la dependencia del mercado local. Entre enero y octubre de 2016, las empresas españolas exportaron a un promedio de tres países, aunque en el caso de aquellas cuyas ventas superan los 50 millones de euros, la media subió a 40, según las últimas estadísticas del Icex.
Esto no significa que tengan que lidiar con 40 monedas diferentes, porque la zona euro todavía es el destino de más de la mitad de las exportaciones españolas (si bien en los últimos 10 años su cuota se ha reducido del 59% al 52%) y gran parte del comercio mundial se realiza en dólares. Pero las que sí han salido fuera de la Unión Monetaria han tenido que aprender a manejar el riesgo de que oscilaciones bruscas en el tipo de cambio dañen la rentabilidad de sus operaciones.
La importancia de tener bajo control esta variable se ha acrecentado en los últimos meses debido a la fuerte caída sufrida por el euro frente al dólar y por la libra con respecto a la moneda única y el billete verde, tras conocerse el resultado de las elecciones en EE UU y el referéndum en Reino Unido, respectivamente.
Manuel Domínguez-Blanco, gerente global de foreign exchange de Moneycorp, señala que “2016 nos ha recordado que los mercados de divisas son, por naturaleza, volátiles e impredecibles”.
Frente a este albur, las empresas disponen del seguro de tipo de cambio, un producto que garantiza una cotización fija durante un periodo establecido para un importe determinado, pase lo que pase en el mercado de divisas.
Conversión directa
Cada exportador acuerda con su cliente la divisa en que se efectuará la transacción. Algunos, por asegurarse los contratos, aceptan cobrar en yuanes, rupias o reales y se cubren con el seguro. Eso evita que pierdan dos veces con el tipo de cambio. A diferencia de los bancos, que trabajan con un número limitado de monedas, Moneycorp trabaja con 120, con lo cual el cambio es directo de yuanes a euros, por ejemplo, sin pasar por el dólar.
Fernando Cid, director de la filial de Afex, pone como ejemplo el caso de una compañía que todos los meses importa 50.000 dólares de China. “Si el dólar se aprecia, esas importaciones le van a costar más y, por tanto, afectará a su cuenta de resultados. ¿Qué puede hacer? Si sabe con certeza que este año va a necesitar 600.000 dólares, puede contratar un seguro por esa cantidad para que todo lo que compre a lo largo del año se cambie a la cotización de hoy”, explica.
Cada empresa decide qué porcentaje de sus compras o ventas desea asegurar, en función de la naturaleza de su negocio, el grado de predictibilidad de sus operaciones y su aversión al riesgo. “Algunas prefieren cubrirse al 100% y otras, solo una parte, porque así como el dólar puede apreciarse de 1,10 a 1,05 euros, también puede depreciarse a 1,15, lo que abarataría sus compras”, destaca el ejecutivo de Afex.
Según los brókeres de divisas, el uso de este instrumento, también conocido como forward, gana popularidad en España a medida que las pymes se internacionalizan. Precisamente, el aumento de la demanda motivó a Afex, firma de origen estadounidense, a abrir una oficina en Madrid, que este mes cumple un año. “El 80% de nuestros clientes son pequeñas empresas”, indica Cid.
La entrada en el mercado de agencias especializadas que, pese a su longevidad –tanto Afex como Moneycorp se dedican al trading de divisas desde 1979–, operan con la estructura de una fintech, también está contribuyendo a acercar este servicio a las pymes, ya que al acceder a grandes volúmenes de dinero y trabajar con costes bajos, pueden ofrecer precios más competitivos que los bancos.
“No cobramos por la contratación, únicamente aplicamos un margen sobre la operación. Como movemos 25.000 millones de dólares al año, podemos obtener de los bancos un tipo de cambio muy ajustado, que trasladamos a nuestros clientes y nos permite ganar dinero sin dejar de ofrecerles un ahorro respecto a lo que conseguirían en el mercado”, asegura.
Precisa Cid que si, por ejemplo, el euro-dólar se cotiza en el mercado interbancario (el precio de referencia) a 1,10, el seguro se le brinda al cliente a 1,0950. “Ahí hay un diferencial de 50 pipos [décimas, en la jerga del sector] con el que ganamos dinero”, abunda. Los bancos, en cambio, cargan sobre este margen una comisión que calculan en base al tipo de cambio el día de la contratación, el diferencial de tipos de interés entre las dos divisas involucradas y el plazo de la cobertura.
Además del precio, en Gestpointgsm, que trabaja con Afex, valoran también la atención personalizada y la rapidez en la operación. "Para una pyme como nosotros, negociar el tipo de cambio y contratar el seguro con una llamada telefónica era impensable hace cuatro años", destaca Herrán Villota. "Con los bancos no sabíamos a qué tipo de cambio estábamos contratando el seguro hasta que cerraba el mercado. Ahora lo sabemos al momento", subraya.
Fe de error. Este artículo se actualizó el miércoles 18 de enero a las 11:52 para reflejar que el volumen de dólares que intercambia Afex es de 25.000 millones y no 25 billones como se indicó originalmente.
La lección del ‘brexit’: nunca confiarse
El seguro de tipo de cambio es muy útil también para empresas que prestan servicios en el exterior. Es el caso de Enertis, consultora que asesora a compañías en proyectos de energías renovables.
La firma tiene oficinas en Madrid, San Francisco, Londres, Ciudad del Cabo y Santiago de Chile y trabaja en numerosos países, entre ellos China. De los 8 millones de euros que facturó el año pasado, el 98% procedió del extranjero.
La empresa cobra estos ingresos en dólares y libras, pero paga sus gastos y nómina en euros, por lo que está sometida a las variaciones del tipo de cambio.
Hasta 2010, el grueso de su negocio estaba en países europeos como Alemania y Francia, por lo que no necesitaba protegerse del efecto divisa. Pero ese año se expandió a EE UU y América Latina y resolvió asegurar el cambio euro-dólar.
La decisión de cubrirse en libras es más reciente y se tomó a consecuencia del sorpresivo resultado del referéndum en Reino Unido. “El brexit sí nos afectó. Si bien la cuota de ventas del mercado británico no es muy alta, tuvimos una pérdida de margen”, confirma una fuente del grupo.
Fernando Cid, de Afex, comenta que el episodio del brexit es revelador de la importancia de valorar al interior de cada empresa la conveniencia o no de asegurar el tipo de cambio y en qué porcentaje.
“En vísperas del referéndum, muchas compañías barajaron los escenarios que podían presentarse. Aunque el mercado descartó la idea de que saliera el sí, los sondeos eran poco esclarecedores. Antes de la votación, algunos clientes cerraron coberturas por un porcentaje determinado, algunos por el 100%, y hoy están celebrando esa decisión porque finalmente ganó el no y en un solo día la libra perdió 10 puntos, una caída de la que aún hoy no se ha recuperado”, expresa.
Enertis, que este año prevé facturar 9,2 millones de euros, tiene contratadas coberturas para el 56% de sus ingresos en dólares y para el 14% en libras, al plazo de un año.