Trump no podrá mantener todo el empleo en EE UU
El acuerdo con Carrier para mantener 1.000 puestos en Indiana no es escalable al resto de la industria
Donald Trump ha cerrado un acuerdo para mantener en el Estado de Indiana 1.000 empleos que iban a mudarse a México. Visto de cerca, el trato con el fabricante de aire acondicionado y calefacción Carrier es un inteligente ejercicio de relaciones públicas, pero como política industrial no será fácil de escalar. Carrier, unidad del fabricante militar United Technologies, se hizo célebre en las elecciones presidenciales por su voluntad de sacar empleos del país. Trump, que amenazó en la campaña con imponer aranceles si así ocurría, anunció el martes el acuerdo, al que llamó “un gran negocio para los trabajadores”.
Los detalles sugieren que el pacto no es tan maravilloso como puede parecer. Aunque la compañía ha dicho que mantendrá 1.000 puestos de trabajo en el país, la matriz todavía planea reducir 600 empleos en la planta de Indianápolis, según The Wall Street Journal. También planea cerrar otra fábrica de Indiana, con 700 trabajadores. Eso sugiere que 1.300 puestos de trabajo en total aún podrían cruzar la frontera.
Un total de 1.300 puestos de trabajo aún podrían cruzar la frontera de México
Por otra parte, Carrier no aceptó el acuerdo hasta que el Estado no aprobó 6,6 millones de euros en exenciones fiscales durante 10 años, lo que significa que los residentes de Indiana estarán subvencionando los empleos que se queden.
Trump viajó a Indianápolis el jueves para celebrar el acuerdo, pero este será difícil de imitar a nivel nacional. United Technologies gana miles de millones de dólares con sus negocios con el Gobierno federal, por lo que tenía motivos para ceder. Y los Estados no pueden darse el lujo de dar incentivos fiscales a todas las empresas que amenacen con enviar empleos al extranjero.
En términos económicos, si los trabajadores estadounidenses siguen siendo mucho más caros que los mexicanos, puede que el acuerdo solo esté aplazando la cuestión. Incluso si el presidente entrante se las arregla para asustar a más empresas para que mantengan los empleos en EEUU, eso no hará otra cosa que animar a reemplazar seres humanos por robots.