Hacienda eliminará deducciones de sociedades y subirá los especiales
El Gobierno quiere mantener los tipos del impuesto de sociedades pero eliminar unas deducciones y revisar otras
El Gobierno revisará el Impuesto de Sociedades y elevará algunos impuestos especiales como el tabaco para cumplir con los ajustes de 5.500 millones de euros que la Comisión Europea ha pedido a España de cara a 2017, según trasladaron a Europa Press en fuentes del Ministerio de Hacienda, que precisaron “que no se tocará” ni el IRPF ni el IVA para no afectar al consumo y a la recuperación económica.
De esta forma, la intención del departamento que lidera Cristóbal Montoro es realizar “ajustes” en aquellas figuras tributarias “que no dañen la fortaleza de la recaudación tributaria”. Así, contempla mantener los “elementos esenciales” del Impuesto sobre Sociedades (no se modificarán los tipos actuales), pero se eliminarán algunas deducciones y otras se revisarán, “especialmente aquellas cuya reforma consolide la corrección de los desequilibrios macro”, como el desempleo o el endeudamiento.
Este año el Gobierno aprobó el aumento del pago fraccionado mínimo del Impuesto sobre Sociedades para recaudar unos 9.000 millones de euros más, aumento que se mantendrá también en 2017, pero que no deja de ser un cambio temporal del impuesto a la espera de aprobar una reforma más en profundidad para consolidar de manera definitiva una mayor recaudación por este tributo, en caída libre tras la rebaja del impuesto que aprobó el Ejecutivo en la anterior legislatura.
También contempla Hacienda la posibilidad de elevar algunos impuestos especiales, como el tabaco, el alcohol o hidrocarburos, con el fin de profundizar en la “corrección” del sistema fiscal de determinadas actividades que tienen “efectos externos negativos”.
Subida segura al tabaco
Concretamente, fuentes de Hacienda trasladaron a Europa Press que el impuesto sobre el tabaco subirá a raíz de una sentencia europea que obliga a España a suprimir el sistema actual de doble mínimo, tal y como ha pasado en Italia, consistente en un tipo impositivo que se incrementa cuando el precio está por debajo de un límite predeterminado.
Lo que no está tan claro es qué pasará con el Impuesto sobre Hidrocarburos, ya que el Gobierno no quiere perjudicar ni a los transportistas profesionales ni a los autónomos, por lo que podría elevar el impuesto pero eximir de esta subida a dichos profesionales.
Preocupación en el sector de las bebidas
La Federación Española de Bebidas Espirituosas (Febe), Cerveceros de España y la Federación Española del Vino (FEV) han alertado de que una eventual subida de los impuestos especiales, que estaría estudiando el Gobierno para cumplir el déficit, provocará una caída del consumo, una menor recaudación y un recorte en los empleos.
En concreto, el director ejecutivo de Febe, Bosco Torremocha, ha recordado al Gobierno que la industria de bebidas espirituosas y su cadena de valor “son un importante generador de riqueza y empleo en España”.
Las bebidas espirituosas aportaron a la economía en 2015 más de 7.500 millones de euros y generaron más de 330.000 empleos, directos e indirectos, en “sectores claves para la economía” como el turismo, la hostelería y los servicios. Además, la contribución de esta industria a la Hacienda Pública superó los 2.000 millones de euros, en concepto de IIEE, IVA e Impuestos Especiales.
Torremocha ha insistido en declaraciones a Europa Press que la subida de impuestos especiales ha tenido “negativos efectos” recaudatorios para el Estado. “La recaudación está por debajo de la de hace una década a pesar de haberse subido cuatro veces los tipos en este período, y en cambio ha ocasionado un impacto muy negativo para las empresas y su competitividad y el empleo”, ha señalado, al tiempo que insta al Ejecutivo a “mantener la política fiscal actual”.
El sector de las bebidas espirituosas confía en no sufrir un nuevo incremento de impuestos, después de que la industria regresara a la senda positiva en 2015, tras crecer un 2% en España, rompiendo una década de importantes caídas al recuperarse el consumo y la economía.
Por su parte, el presidente de la Federación Española del Vino (FEV), Christian Barré, ha reiterado que modificar el 'statu quo' en materia fiscal “supondría un riesgo a la competitividad de un sector con un gran valor económico social en el conjunto de la economía y en el sector agroalimentario español, cuyas empresas facturaron cerca de 6.100 millones de euros”.
Junto con las medidas que el Gobierno deberá remitir a Bruselas en las próximas semanas para asegurar el cumplimiento del objetivo de déficit del 3,1% del PIB para el próximo año, el Ejecutivo está negociando con PSOE y Ciudadanos el techo de gasto del Estado para 2017 y los objetivos de estabilidad para los años 2017, 2018 y 2019, primer paso para la elaboración de las cuentas públicas del próximo año.
Techo de gasto congelado
La previsión del Gobierno es poder cerrar el acuerdo con estos grupos --fundamentalmente con el PSOE que es clave para que su aprobación salga adelante-- a lo largo de esta semana para convocar el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF), que ratifique los objetivos de déficit para el trienio 2017-2019, y el viernes, 25 de noviembre, aprobar ya el techo de gasto en Consejo de Ministros, o a más tardar, el viernes siguiente, 2 de diciembre.
La cifra que contendrá el techo de gasto de 2017 será superior al aprobado para 2016, pero si se tiene en cuenta lo que realmente se ha gastado el Estado este año, tras elevarse el objetivo de déficit público al 4,6% del PIB, será “muy similar” al gasto final de este ejercicio, por lo que España mantendrá congelado el presupuesto público, según indicaron a Europa Press en fuentes del Ministerio de Hacienda.
Para el Gobierno, la aprobación del techo de gasto y de los objetivos de estabilidad es fundamental porque, sin dichos objetivos, los gobiernos autonómicos no pueden aprobar sus Presupuestos y recibir los remanentes del Fondo de Liquidez Autonómica (FLA) y las nuevas aportaciones del mismo, por lo que confía en que tanto PSOE como Ciudadanos den su apoyo a dicha aprobación y no bloqueen el funcionamiento de los gobiernos autonómicos.
La recaudación por tabaco, estable
El Estado mantendrá estable su recaudación fiscal del tabaco en el entorno de los 9.000 millones de euros en 2016, en un año en el que las ventas continúan en la senda de ligero crecimiento y en el que el contrabando sigue con una constante tendencia a la baja, según han informado a Europa Press en fuentes del sector.
En concreto, la recaudación a través de impuestos especiales e IVA del mercado del tabaco, que incluye cigarrillos, cigarros, liar y pipa, descendió un 0,48 hasta septiembre, tras alcanzar unos ingresos de 6.890,54 millones de euros.
Del total recaudado por las arcas públicas en estos nueve meses, 5.369,6 millones correspondieron al Impuesto Especial sobre las Labores del Tabaco, un 0,46% menos, y los 1.520,9 millones restantes al IVA, lo que supone un retroceso del 0,53%.
De continuar con esta tendencia en lo que resta de año, Hacienda recaudará en el entorno de los 9.000 millones de euros al cierre de 2016, después de crecer en 2015 por primera vez en cinco años, con unos ingresos de 9.137,67 millones de euros.