La distribución vuelve al centro
El sector español de distribución se caracteriza por su capacidad para innovar y marcar nuevas tendencias. Desde los sistemas de cobro hasta el desarrollo logístico, pasando por la explosión de la venta online, el retail nunca ha temido inyectar nuevos conceptos, ideas y estrategias a una actividad cuya base histórica es la más tradicional del mundo de los negocios: vender artículos. La virtud de esta forma de entender la actividad empresarial está en la capacidad de adaptarse a los cambios sociales y, en ocasiones, incluso a provocarlos. Por ello conviene prestar especial atención a la nueva estrategia que están implementando las grandes compañías del sector, que han optado por mover sus establecimientos desde el extrarradio al centro de la ciudad. El modelo de compra semanal, quincenal o incluso mensual en la periferia y con el automóvil como herramienta indispensable tuvo su momento, a imitación de los híper franceses, pero de ello hace ya lustros. Hoy, de la mano de la recuperación de los hábitat urbanos, ganan peso nuevas formas de consumo que obligan a la distribución a lanzarse a la proximidad, e incluso a la inmediatez, como en el caso de los productos frescos en alimentación. Un modelo que además va a acelerar el mercado de locales medianos y grandes y de buena ubicación.