Iberdrola activa en Portugal su plan hidroeléctrico de 1.500 millones
El grupo adjudica a la austriaca Andritz un contrato de 140 millones
Iberdrola ha apretado el botón de inicio a su proyecto hidroeléctrico del Alto Támega en Portugal, uno de los mayores en la historia del país y la iniciativa más importante de este sector en Europa, ya que requiere unas inversiones de 1.560 millones para sumar una capacidad de 1.158 MW con tres presas.
Todo el sector de bienes de equipo de Europa está muy pendiente del plan hidroeléctrico de Iberdrola en Portugal, por el alto volumen de contratación de instalaciones que requiere. Una vez que la multinacional que preside Ignacio Galán ha activado el proyecto del Alto Támega, el primer gran contrato ha recaído en la empresa austriaca Andritz Hydro.
La eléctrica española ha adjudicado a esta compañía, y por un importe de 140 millones, el suministro del equipo electromecánico y de la tubería forzada de la central hidroeléctrica de bombeo de Gouvães, que estará integrada en la más grande de las tres presas que completarán el proyecto del Alto Támega.
La puesta en marcha del complejo energético está prevista entre los años 2021 y 2023, según el ritmo de las obras y tras desplegar unas inversiones de más de 1.500 millones. Estará ubicado en el río Támega, al norte del país y cerca de la ciudad de Oporto. El compromiso de Iberdrola con las autoridades lusas es que el proyecto redunde en beneficio de la economía de la zona, con la generación de empleo y de carga de trabajo de calidad para las empresas locales.
Durante la construcción del complejo hidroeléctrico, cuyas obras pueden durar hasta seis años, Iberdrola generará 3.500 puestos de trabajo directos y otros 10.000 indirectos. Una vez en actividad, las tres plantas que explotarán los recursos de las presas de Gouvães, Alto Támega y Daivões requerirán de sus respectivos equipos de operación y mantenimiento, que estarán formados por profesionales portugueses.
A pleno rendimiento, el complejo sumará una capacidad de 1.158 MW y estará en condiciones de producir 1.760 GWh al año.
Alto Támega es un paso más en la apuesta de Iberdrola por las energías limpias, tras sus inversiones en eólica marina. El grupo español es la tercera vez que confía, para un proyecto de envergadura, en Andritz Hydro, una empresa que tienen su sede en la ciudad austriaca de Graz y que cotiza en la Bolsa de Viena.
Andritz, con 25.700 trabajadores, ya ganó los concursos de Iberdrola para el suministro de equipos a las centrales hidroeléctricas de San Pedro II (Galicia) y Aldeadávila (Castilla y León).
En el ámbito hidroeléctrico, Iberdrola es líder de almacenamiento de energía, con más de 4.400 MWinstalados mediante tecnología de bombeo. El grupo cuenta con el mayor centro de Europa en este segmento, el de Cortes-La Muela (Valencia). Estas plantas son una “salvaguarda” del suministro de electricidad. Permiten almacenar energía a través del rellenado de agua, mediante el bombeo desde un embalse a otro depósito. Ese tránsito genera gran cantidad de electricidad en poco tiempo y sin emisiones a la atmósfera.