El río revuelto del Galaxy Note 7
Es una oportunidad para robar cuota de mercado y los competidores chinos están a punto de abalanzarse sobre ella
Huawei y Lenovo están salivando con el fracaso del Samsung Galaxy Note 7. La decisión del grupo coreano de acabar con él es una oportunidad para sus rivales chinos, y Huawei parece mejor preparado que el resto.
Puede que la debacle del Note 7 sea uno de los fallos de seguridad más costosos en la historia de la tecnología. Los analistas esperaban que se vendieran hasta 19 millones de dispositivos. A 810 euros por unidad, supone una pérdida de unos 15.000 millones de euros.
Es una rara oportunidad para robar cuota de mercado, y los competidores chinos, en particular Huawei y Lenovo, están a punto de abalanzarse sobre ella. Ambas empresas quieren expandirse internacionalmente con la vista puesta en el mercado de smartphones premium, dominado hasta ahora por Samsung y Apple. A diferencia de otras empresas chinas como OPPO, Vivo y Xiaomi, Huawei y Lenovo ya producen modelos premium, y también disfrutan de vínculos con transportistas y distribuidores de las economías desarrolladas. Lenovo está teóricamente bien colocada en EE UU gracias a su compra de Motorola por 2.600 millones en 2014.
Desafortunadamente, Lenovo lo está pasando mal con su negocio de teléfonos. A principios de año comunicó las primeras pérdidas en un ejercicio en seis años, por los costes de adquisición y reestructuración y las débiles ventas. En el segundo trimestre, sus envíos mundiales de teléfonos se desplomaron un 31% interanual. El año pasado, además, despidió a 3.200 empleados para reducir costes y sus acciones sufrieron un duro golpe.
"Huawei y Lenovo quieren expandirse internacionalmente con la vista puesta en el mercado de 'smartphones' premium, dominado hasta ahora por Samsung y Apple"
Queda Huawei, que ya ocupa el tercer lugar, tras Apple y Samsung, en términos de cuota de mercado mundial. El modelo premium Mate parece una alternativa al Note 7, y la compañía ya tiene una cuota de mercado del 12% en Europa Occidental.
Las preocupaciones en torno a la seguridad nacional han manchado a Huawei en EE UU, mientras que Lenovo todavía está tratando de integrar a Motorola, por lo que no será fácil. Los competidores tampoco se quedarán dormidos: LG y Google están preparando sus estrategias, y también es una oportunidad para Apple. Huawei y Lenovo tendrán que redoblar sus esfuerzos para transformar las pérdidas de Samsung en sus ganancias.