La campaña de EE UU mueve las divisas mundiales
Los agentes de cambio sitúan a Hillary Clinton más cerca de la Casa Blanca. Aún podría haber muchos giros en las divisas, pero estas ya han mostrado que las previsiones no son lo suyo.
Si se puede creer a los inversores globales, Hillary Clinton está un paso más cerca de la Casa Blanca. Los agentes de cambio han emitido su veredicto sobre el primer debate presidencial de Estados Unidos favoreciendo a las divisas de los países que se verían perjudicados por una victoria del republicano, Donald Trump. Sin embargo, los mercados financieros no son precisamente buenos a la hora de meterse en la mente del electorado.
Las declaraciones políticas de Trump son vagas y, a veces contradictorias. Sin embargo, los inversores pueden sacar algunas conclusiones generales acerca de lo que haría si llegara al Despacho Oval. La retórica proteccionista del candidato republicano es una mala señal para el comercio y el crecimiento global, lo cual perjudicaría a los activos de mayor riesgo y, en particular, a las exportaciones de los vecinos de Estados Unidos, México y Canadá. Una victoria de Trump probablemente haría que los inversores salieran corriendo a refugios tradicionales como el yen japonés y el dólar.
La temprana reacción del mercado al debate, por tanto, refleja lo que sugería la encuesta de los espectadores de la CNN: que la candidata demócrata Clinton llegaría a la cima. El peso mexicano y el dólar canadiense se dispararon, y el yen se cayó inicialmente.
Pero sería un error tomarse estos movimientos demasiado en serio. Los inversores ya no tienen una visión clara del resultado de las elecciones ya que los expertos hace un año predijeron que Trump nunca alcanzaría la candidatura republicana. Ahora los sondeos de Reuters / Ipsos muestran que se acerca al 40% de los votos.
Los giros en las dividas podrían llegar a ser más pronunciados a medida que la campaña electoral de Estados Unidos se intensifique. En lo que se refiere a predecir el resultado, los mercados de divisas están a la cola. Los votantes moverán los hilos.