Políticos y empresarios, de la mano para emprender
Un proyecto de movilidad en la ciudad con motos para cortas distancias, una herramienta para mejorar la transparencia en la gestión de las administraciones públicas, un modelo de negocio para promover el consumo de castañas y así relanzar la plantación de castaños en Asturias… Son algunos de los proyectos que se presentaron ayer durante la clausura de los programas de Liderazgo Público y Corporativo en Emprendimiento e Innovación, desarrollados por las escuelas de negocios Deusto Business School e Icade, con la colaboración de la Fundación Rafael del Pino y el Círculo de Empresarios. El objetivo: lanzar ideas innovadoras para mejorar la sociedad. Esta vez con un añadido diferente. A los emprendedores y empresarios, que habitualmente se encargan de sacar a la luz estas iniciativas, en esta ocasión, les han acompañado personalidades del sector público:concejales de ayuntamientos de toda España y senadores.
“Las administraciones públicas son clave en todo el proceso de transformación. Pero igual de necesario es el otro peso de la balanza, las organizaciones privadas”, apuntó el director general de la Fundación Rafael del Pino, Vicente Montes. Directivos del sector público y privado presentaron diez proyectos en los que llevan trabajando desde hace meses, todos ellos dirigidos a mejorar el ecosistema emprendedor español.
A las ideas citadas se añaden otras, como una herramienta para mejorar la gestión de la industria farmacéutica, u otra para permitir votar a través del móvil en las elecciones. Todos estos directivos, son a los que el presidente del Congreso, Patxi López, definió como verdaderos líderes. “El liderazgo no es la capacidad de estar siempre presente, ha de estar alejado de la presencia vacía”, afirmó, en relación a aquellos que acaparan el foco mediático, pero que no lideran. “Una persona que está rodeada de cámaras y que hace publicidad no es un líder”. Y España, recordó López, necesita líderes, tanto en política como en la empresa. Pero no solo España, también el Viejo Continente. “En Europa no estamos sobrados de líderes, por eso ahora, tras el Brexit, los que quedamos en el proyecto europeo tenemos que responder y continuar hacia delante”, afirmó el ministro de Economía, Luis de Guindos.
Para impulsar a las empresas y startups es necesario el apoyo del capital. “Un emprendedor solo es quien cree en una idea, invierte y arriesga por ella para sacarla adelante”, recordó el presidente del Congreso. Y en España sigue existiendo un vacío que lastra el emprendimiento: “el desprestigio del fracaso y la financiación”. El fracaso es, enfatizó López, la mejor escuela de aprendizaje, a la que se debe conceder un valor añadido por todas las conclusiones que se pueden extraer de un error. “Además, debemos conseguir que el capital y los inversores se comprometan a compartir riesgo y aventura con los emprendedores, es la única manera de avanzar”, advirtió.
Un caso de premio: Carboforest
El proyecto empresarial que se llevó el gran premio fue Carboforest, enfocado a sacar partido a los activos forestales que, por ahora, no se están aprovechando. Una de las ideas de esta iniciativa es vender certificados de CO2 a las grandes empresas, a través de la plantación de árboles.
De esta forma, las grandes organizaciones pueden compensar las emisiones de dióxido de carbono que produce su actividad. El vicepresidente del Círculo de Empresarios, Matías Rodríguez Inciarte, explicó los beneficios que supone vincular a los parlamentarios y a las empresas en un trabajo común. “Son los mejores conocedores de sus respectivos sectores, y es la mejor forma de lograr una administración de calidad”.
El jurado estuvo compuesto por José Luis Romero, director de recursos humanos del Corte Inglés, José Manuel Romay-Becaria, presidente del Consejo de Estado, Antonio Basagoiti, de Banco Santander o Paulo Morgado, consejero delegado de Capgemini España, así como Patxi López, presidente del Congreso.