La antiguas cajas pactan una subida salarial del 1% en 2017
Se congela el salario en 2015 y 2016, sube un 1% en 2017 y un 1,25% en 2018
Tras año y medio de negociación, aprovechando hasta el último minuto de la tercera prórroga aprobada, patronal y sindicatos han logrado desbloquear la negociación y pactar un nuevo convenio colectivo de las antiguas cajas de ahorro para el periodo 2015 a 2018.
Finalmente, el acuerdo ha sido sellado la patronal Acarl y los sindicatos CC OO, Csica y UGT, en representación del 85% de los 81.000 trabajadores a los que afecta el nuevo convenio.
“Ha sido difícil y complicado, no sólo por la negociación, sino también por el entorno que, no ha sido nada favorable para que pudiéramos progresar en los acuerdos”, ha reconocido en la firma Javier Murillo, secretario general de la Asociación de Cajas de Ahorros para Relaciones Laborales (Acarl), subrayando que finalmente el marco recoge “una moderación salarial interesante” que además está “vinculada a la rentabilidad y los resultados” de cada entidad.
En concreto, los representantes de las antiguas cajas de ahorros –la mayoría de las cuáles funciona hoy ya como bancos que cuelgan de fundaciones- han pactado un alza salarial mínima del 2,25% para el periodo de cuatro años.
Dos años de congelación
El detalle del acuerdo fija dos años de congelación, para los ejercicios 2015 y 2016, un alza del 1% para 2017 y otra del 1,25% para el último año de vigor del convenio. A partir de ahí, las retribuciones pueden subir en función de los resultados de cada entidad.
Así, para los dos próximos años, si una entidad culmina el ejercicio con beneficios deberá sumar un 0,25% más de sueldo a sus plantillas, otro 0,25% más si el rango de rentabilidad ROE es igual o superior al 6% y otro 0,25% adicional –un 0,50% en 2018- si el ROE supera el 10%.
“En términos económicos consideramos que es un incremento con una moderación salarial importante. En algunos años sin incremento, los dos primeros, que es un esfuerzo importante”, ha reconocido el secretario de Servicios de Movilidad y Consumo de UGT, Miguel Ángel Cilleros, defendiendo que el acuerdo “marca el camino para que ese futuro de renovación del sector tenga unos cimientos asentados en la garantía y estabilidad del empleo”.
“Lo más importante para nosotros es que haya un convenio que regule las condiciones de un sector que está aún en tránsito, amenazado por las perspectivas de negocio, problemas del pasado no resueltos y un futuro con tipos de interés mínimos”, ha defendido José María Martínez, secretario general de la federación de servicios de CC OO.
“La gran dificultad para este convenio ha sido que hemos vivido entre tres y cuatro reestructuraciones y cambios de condiciones de trabajo en algunas entidades que han dificultado que hubiera acuerdo”, ha detallado apuntando a los ajustes de empleo en BMN, Liberbank o Cajasur.
La pugna por los horarios
Unos ajustes que han estado a punto de ser la puntilla a un acuerdo que, como ha dicho el presidente de Csica, José Luis Rodríguez Alfayate, se antojaba “imposible” por otro factor clave: la negociación de los horarios del sector.
En paralela a la negociación del convenio, algunas entidades, con Bankia como paradigma, han tratado de implantar un nuevo modelo de jornada que permita abrir las sucursales todas las tardes.
Una batalla que acabó trasladándose a la negociación del convenio colectivo sectorial y que ha dado lugar a algunos de los encontronazos más encendidos. Finalmente, sin embargo, la única modificación del nuevo convenio en este sentido es que se reduce en una hora el horario de trabajo de los jueves por la tarde, con las 19:00 horas como límite.
Más allá, sin embargo, se deja abierta la puerta a que cada entidad negocio con los representantes de sus plantillas la implantación de horarios especiales a cambio de determinadas compensaciones específicas.
Nuevo sueldo de entrada
Otra de las principales novedades del acuerdo es que se introduce una nueva escala salarial inferior a la anterior, con un salario de 15.000 euros el primer ejercicio, que busca facilitar la renovación de las plantillas impidiendo que se les integre mediante becas y otras fórmulas por las que venían recibiendo 9.000 euros anuales.
Rebajar el salario de entrada al sector es una medida que ya tomaron los bancos en el convenio alcanzado este año, aunque en su caso el sueldo inicial se fija en los 18.000 euros anuales.
Otra idea prestada del convenio de los bancos es que los trienios pendientes se liquidan y se abre un periodo de negociación de 18 meses para acordar una modernización de este concepto salarial para su posible ligazón a resultados. De no llegar a pacto, se volvería a la fórmula tradiconal.
El acuerdo también incluye otros beneficios como la reducción del tipo de interés mínimo de los préstamos de vivienda se rebaja al 0,9% en 2017 y al 0,5% en 2018 para la cartera viva también. También se mejoran permisos y se equiparan las parejas de hecho al matrimonio.