Tres ‘caravaggios’, por primera vez en España
Fue uno de los pintores más influyentes y revolucionarios de la época y es considerado precursor de la pintura del Barroco. Michelangelo Merisi da Caravaggio (Milán, 1571-Porto Ércole, 1610) llevó una vida atropellada, huyendo de ciudad en ciudad por altercados y reyertas. De 1592 a 1606 vivió en Roma, de donde tuvo que marcharse tras matar a un hombre en una pelea. Una vida con claroscuros, técnica que dominó también con el pincel. Durante sus primeros años en esta ciudad, Caravaggio pintó cuadros, que vendió a través de marchantes por cantidades modestas. Se trata de escenas de género y naturalezas muertas con frutas y flores, especialidad que ya había desarrollado en su Lombardia natal. Con Muchacho mordido por un lagarto (1593-1595) consiguió asombrar a sus contemporáneos, tanto por las cualidades miméticas del jarrón con flores como por la expresión melodramática del joven.
Esta obra y otras 52 más forman parte de la exposición Caravaggio y los pintores del norte, que hasta el 18 de septiembre se puede ver en el Museo Thyssen-Bornemisza, procedentes de colecciones privadas, museos e instituciones como el Metropolitan Museum de Nueva York, la Galleria degli Uffizi de Florencia, el Museo del Prado, el Ermitage de San Petersburgo, el Rijksmuseum de Ámsterdam o la iglesia de San Pietro in Montorio en Roma. Se trata de una muestra sobre la figura del pintor lombardo, del que se exhiben 12 obras, y su influencia entre los pintores del norte de Europa, que fascinados por su pintura difundieron su estilo.
De Caravaggio se podrán ver, por primera vez en España, ya que no han sido expuestas anteriormente, tres obras: Muchacho pelando fruta, El sacrificio de Isaac, una de las piezas estrella, de la exposición, según el comisario de la misma, Gert Jan van der Sman; y San Juan Bautista en el desierto. Además se exhiben: David vencedor de Goliat, Los músicos, San Francisco en meditación, o su última obra documentada, El martirio de Santa Úrsula, (1610). Junto a Caravaggio, se expondrán obras de autores de la Escuela de Utrecht, como Dirck van Baburen, Hendrick ter Brugghen o Gerard van Honthorst; de la Escuela Francesa, como Simon Vouet, Claude Vignon o Valentin de Boulogne; o Flandes, entre otros.
La exposición se ordena en torno a seis salas: Caravaggio en Roma; Los primeros admiradores en Roma, con cuadros de Adam Elsheimer y Peter Paul Rubens; Artistas y amantes del arte; otra en el que cuelgan cuadros de pintores de la Escuela de Utrecht, otra sobre Pintores franceses en Roma, y una última estancia de Nápoles y el sur de Italia, en el que destaca el artista flamenco Matthias Stom.