El BCE y el crudo impiden al Ibex reconquistar los 9.000 puntos
La cita con el BCE y la reunión de los ministros de petróleo de la OPEP ha provocado vaivenes en el mercado español, que ha resistido la caída del crudo aunque no ha recuperado los 9.000
Jornada de optimismo para el mercado español. Después de haber comenzado junio teñido de rojo y perdiendo la barrera psicológica de los 9.000 puntos, el Ibex ha regresado hoy con mayor fuerza amparándose en uno de sus fieles aliados, el presidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi. Aunque la cita con el banquero italiano no ha deparado grandes cambios para las Bolsas europeas, lo cierto es que los parqués del continente han iniciado la jornada al alza a la espera de la intervención del representante del BCE.
Durante su comparecencia posterior a la reunión de la institución europea, Draghi ha puesto fecha a las operaciones de compra de deuda corporativa y LTRO’s para la banca, además de revisar al alza sus pronósticos de inflación y crecimiento para 2016. Este optimismo ha acabado trasladándose, en un primer momento, a las Bolsas del Viejo Continente, aunque poco ha durado la euforia tras conocer el resultado de la reunión que los ministros de petróleo de la OPEP(Organización de Países Exportadores de Petróleo) han mantenido en Viena. Los miembros de la OPEP han acordado mantener sin cambios los niveles actuales de producción de crudo. Así, nada más conocer la decisión, el petróleo y ha replegado sus alas y se ha embarcado en una travesía a la baja que ha llevado al Brent, de referencia en Europa, a cotizar en los 49,69 dólares, tras registrar una caída del 0,06%. Este retroceso ha llegado como un jarro de agua fría para los mercados, que han enfriado los ascensos experimentados durante al jornada y volvieron a las pérdidas.
El Ibex ha sido uno de los pocos índices en capear las idas y venidas del petróleo, cerrando con una subida del 0,46%, hasta los 8.957,9 puntos amparado en el buen comportamiento de ArcelorMittal (+5,3%) y de Banco Popular (+5,23%) después de que Moody’s hubiese mejorado la perspectiva del banco hasta positiva durante la víspera.
En el resto de parqués europeos, aunque el color rojo se ha impuesto durante la mayor parte de la sesión, finalmente el signo mixto ha sido el ganador. Así, el Footsie británico ha cerrado plano, el Cac francés ha retrocedido un 0,2%, el Dax alemán ha subido un 0,04% y el Mib italiano ha registrado un descenso del 0,1%.
Al otro lado del Atlántico, los inversores también han conocido los datos sobre el mercado laboral estadounidense. En esta ocasión, el paro semanal se situó en los 267.000 solicitudes, por debajo de los 270.000 que se esperaban. Estas cifras supondrían, de nuevo, dar más alas a la Fed para que lleve a cabo una posible subida de tipos en junio. Esto ha hecho que los índices estadounidenses se mantengan a la baja. Así, al cierre de los mercados europeos, el Dow Jones caía un 0,18%, el S&P retrocedía un 0,21% y el Nasdaq se dejaba un 0,14%.
En el mercado de deuda, la estabilidad ha sido la tónica imperante. El interés del bono español a 10 años ha caído hasta el 1,48%, desde el 1,49% de ayer. Por su parte, la prima de riesgo ha escalado desde los 135 puntos básicos hasta los 137. Todo ello, después de haberse celebrado la subasta del Tesoro español, con el que se han captado 4.091 millones de euros en bonos a cinco años y obligaciones a 10 y 30 años, cerca del máximo de 5.000 millones marcado en los objetivos de la subasta, con los intereses más bajos en las tres emisiones y con una demanda que ha superado los 7.400 millones de euros, 1,5 veces por encima de los casi 5.000 millones colocados finalmente en los mercados.
En el mercado de divisas, el euro, después de la euforia inicial tras las palabras de Draghi, ha acabado conteniéndose y ha vuelto a depreciarse hasta cotizar en los 1,11 dólares.