El desafío de digitalizar el sector turístico
El 'big data' permite a las empresas del sector anticiparse a los visitantes La información que se genera antes, durante y después de un viaje puede ser aprovechada
No es ningún secreto. El sector turístico es uno de los pulmones de España y de su economía. Pese a que el año pasado perdiese su segunda posición mundial en ingresos por turismo, desbancado por China, España cerró 2015 permaneciendo en el podio, eso sí, en tercer lugar, con 50 millones de euros en ingresos, según datos de la Organización Mundial del Turismo (OIT).
Por esa razón se vuelve vital adaptar el sector a los nuevos tiempos, para que la irrupción de las nuevas tecnologías no le pille desprevenido y no pasen de largo todos los beneficios que generan los visitantes. El año pasado fueron 68 millones los turistas que pisaron suelo español, a los que se le sumaron otros 40 millones, los que no pernoctaron en el país. El beneficio de este impacto se refleja en estas cifras, y lo será en mayor medida si el sector sabe gestionar todo su potencial.
La digitalización fue la columna vertebral de la última edición de Youth and Jobs, celebrada en Santa Cruz de Tenerife y en Las Palmas de Gran Canaria en esta semana, y organizada por la Universidad Europea. El objetivo: analizar e impulsar la transformación digital en las empresas y su impacto en los profesionales. Y en el caso del sector turístico, que en este sentido cuenta con un enorme margen de beneficio, qué mejor que empaparse con los consejos y recomendaciones de los expertos y ejecutivos de Canarias, una de las comunidades que mayor número de turistas atrae anualmente, que ronda los diez millones de personas.
Precisamente por esto, se incidió en cómo impacta el turismo en el resto de sectores económicos y en otras empresas que, a priori, no se enmarcan en este mundillo. “Por eso, es necesario que el consejero de turismo de Canarias esté presente en todos los ámbitos de decisión del Gobierno regional”, aseguró Antonio López de Ávila, presidente de la Sociedad Estatal para la Gestión de la Innovación y las Tecnologías Turísticas (Segittur), y miembro del Consejo Asesor de Turespaña.
Esto serviría, continuó, para poner en contacto de forma más directa a los representantes de los principales sectores que impulsan la economía con los expertos del ámbito tecnológico que abanderan e impulsan la innovación. “El turismo es nuestra gran industria, incide en todos los sectores de la economía y no puede permanecer ajeno ni a la transformación digital que se está produciendo ni a las grandes oportunidades de negocio que ello supone”, recalcó López de Ávila.
En esta tesitura cobra protagonismo, de nuevo, el big data, uno de los términos que se han repetido en todas las jornadas organizadas por la Universidad Europea. Porque si este sistema de seguimiento y análisis de datos está revolucionando la inmensa mayoría de los sectores, en el turismo las posibilidades se multiplican. “Permite hacer un seguimiento exhaustivo de las personas que visitan cada lugar, su género, sus edades, de qué países y ciudades vienen y qué es lo que consumen”, relató López de Ávila. De esta forma, las localidades receptoras de estos turistas pueden utilizar esta ingente cantidad de datos para anticiparse y conocer el perfil del turista con antelación a su llegada. “Y que de esta forma la región se prepare al visitante y pueda dar una mejor experiencia y calidad, sin ir al rebufo de sus exigencias y demandas”, apuntó.
No se debe olvidar que, en un elevadísimo porcentaje, el turista que visita España ya es un visitante digital que genera una información valiosísima, que se extiende desde los meses previos al viaje hasta incluso los meses posteriores a él. “Sin olvidar todos los datos que genera durante el propio desplazamiento”, recordó López de Ávila.
Si el 'big data' multiplica las posibilidades en todos los sectores, en el sector turístico esto se multiplica", explica Antonio López de Ávila, de Segittur
En este sentido, el papel del emprendimiento actúa como catapulta. “Es la oportunidad de abrir nuevos huecos de mercado, para reducir costes y mejorar la vivencia de las experiencias en el destino”, aseguró el presidente de la Asociación de Jóvenes Empresarios de Tenerife, Airam Rodríguez, que incidió, además, en la importancia que tiene que las actitudes emprendedoras se enseñen en las etapas iniciales de la educación, una idea que se ha visto repetida en las cuatro jornadas de Youth and Jobs que ha organizado la citada universidad.
La tesis es común: la universidad es el nexo de unión entre los futuros profesionales y las empresas. “Por eso, si el turismo es la industria que mueve la economía en Canarias, las instituciones docentes deben formar a grandes profesionales del sector”, comentó la rectora de la Universidad Europea de Canarias, Cristiana Oliveira.
Explicó que el uso de móviles y otros dispositivos ya forman parte del día a día de las personas, que el desarrollo digital influye sobre las decisiones que se toman antes de elegir un destino turístico y que también contribuyen a la toma de decisiones una vez que se ha pisado tierra y se ha llegado al destino. “Por eso, desde la propia universidad no podemos permanecer ajenos a esta realidad”, reconoció la rectora. Más aún en la propia Comunidad canaria, donde el 35% del empleo está estrechamente relacionado con el sector turístico y depende de él. “Esa es la razón por la que en Canarias tenemos que ser referentes en el mundo entero en esta transformación, puesto que la aplicación de la tecnología que se haga en un sitio es replicable y puede reproducirse en otros destinos”, remarcó López de Ávila. España es, precisamente, pionero en el mundo desde el año 2012 en un proyecto que actúa como simiente de esta transformación.
Turespaña, del que López de Ávila es miembro del consejo, es un organismo público encargado de desarrollar el marketing y la estrategia del sector turístico español, “coordinando y liderando a los actores públicos y privados y actuando como puente entre ellos”. El objetivo, explicó este directivo, es impulsar destinos turísticos inteligentes, para que los organismos públicos y los privados cooperen y trabajen juntos y expriman al máximo el beneficio de este sector. “Y así tomar las decisiones tras un análisis profundo y huir del método del ensayo y el error”, recalcó.
Las instituciones docentes deben formar a profesionales para que se adapten a los nuevos tiempos de cada sector", afirma Cristiana Oliveira, rectora de la Universidad Europea de Canarias
Y es que, conectando a todos los agentes que intervienen en el sector, se pueden multiplicar los beneficios y ahorrar en gastos. “Si tres meses antes de que un turista venga sabemos sus gustos, a qué museos quiere ir, en qué tipo de establecimientos comprará o qué localidades visitará, cada pieza que forma parte del proceso turístico, podrá prepararse y ofrecer un servicio mucho mejor”, alegó. Sin embargo, para poder llevar a cabo toda esta transformación, es necesario también que entren en juego el mundo empresarial y emprendedor.
Por un lado, explicó Cristiana Oliveira, “hay que conocer las necesidades del mercado y trasladarlas a las titulaciones universitarias, para que los estudiantes se preparen para el mundo de la empresa actual”. Porque aunque, hoy en día, la inmensa mayoría de los alumnos sean nativos digitales, “hay que formarles para que esos conocimientos que tienen sepan aplicarlos al mundo corporativo, sentenció.
Además, de la misma forma que las instituciones públicas empiezan a colaborar con el sector turístico privado para obtener todo el rédito posible, también se precisa que se elimine el exceso de barreras burocráticas para la creación de empresas y para el apoyo de las que ya operan, con el fin de mejorar no solo el empleo, “sino también la competitividad y la calidad de los servicios”, afirmó Alejandro Pérez, presidente de la Asociación de Jóvenes Empresarios de Las Palmas. En la batalla de la digitalización del turismo deben intervenir todos los actores implicados en el sector, desde la base de la educación, y de forma transversal, tanto el círculo privado como el público.