Trump aún es el favorito a la nominación republicana, pero sus rivales se unen

Trump aún supera en casi 300 delgados al senador de Texas Ted Cruz. Debe alcanzar la mágica cifra de 1237 delegados antes de la convención del partido Republicano en julio. Las probabilidades de que lo consiga, o de que se acerque mucho, siguen siendo muy altas. Los estados que celebrarán primarias en las próximas semanas son Pennsylvania, Rhode Island, Maryland, Delaware e Indiana. Es terreno poco favorable para el conservador Cruz, y más favorable a Trump (progresista que engaña con su discurso conservador) y el tercero en liza, el gobernador de Ohio John Kasich. Cruz también tendrá dificultades en California, un estado con 172 delegados cuya primaria es el 7 de junio y dónde las encuestas dan ventaja a Trump. Por todo ello, Cruz y Kasich han acordado un pacto de no agresión y de aunar esfuerzos en los estados que aún deben celebrar primarias para que sus votantes apoyen al que tenga más posibilidades de derrotar a Trump. Esto lo deberían haber acordado hace meses, pero sus egos lo impedían. En su viaje por Europa, Obama explica a sus preocupados líderes el funcionamiento de las primarias y convenciones. Los hermanos Koch, billonarios y propietarios de un conglomerado industrial que incluye empresas de petróleo y químicas, han dado a entender que prefieren una victoria de Hillary. Se producirá. Pero será ajustada, y Trump seguramente será su rival.