FCC pacta con la banca para soltar el lastre de la deuda convertible
Amortiza el 80% de la deuda de este tipo en una subasta inversa con los 12 bancos acreedores Recompra la deuda con una quita del 15%
La dirección de FCC ha despejado una de las mayores incertidumbres que ha venido pesando sobre la compañía en los tres últimos años, la que se refiere a la deuda del tramo ‘B’ ó convertible en acciones. Según ha podido saber Cinco Días, en las últimas horas la constructora ha pactado con 14 de sus bancos acreedores la recompra de casi 400 millones de esa deuda con una quita del 15% a favor de la empresa, lo que aún deja un saldo favorable en la caja. Gana así estabilidad el gigante que arrancó su reestructuración hace ya cuatro años con un plan de desinversiones por más de 2.200 millones.
La operación se ha materializado a través de lo que es conocido en el argot financiero como subasta holandesa o a la inversa, en la que se sitúa primero para cobrar el banco que acepta una mayor quita. El descuento de partida era del 15% y, según fuentes financieras, la quita media final ha sido ligeramente superior a esa cifra.
De este modo, FCC emplea unos 340 millones del capital obtenido en la reciente ampliación de 709 millones y se ahorra, por el citado descuento del 15%, cerca 60 millones de los fondos captados en la recapitalización que ha motivado la opa del magnate mexicano Carlos Slim.
Entre los bancos que han pactado con FCC figuran los seis grandes españoles: Santander, BBVA, Popular, Sabadell, CaixaBank y Bankia. Una vez liquidado este nuevo ajuste, lo que sucederá a lo largo de los próximos días, la firma que dirige Carlos Jarque mantendrá en el tramo B entre 100 y 120 millones en créditos convertibles en papel de la compañía, lo que representa alrededor del 2,8% del capital.
En todo caso, la nueva posición de este monto de deuda bancaria, que es la que FCC paga más cara al tener un tipo de interés cercano al 5%, dista mucho de los 1.300 millones en que fue constituido el tramo B. En la refinanciación cerrada en 2013 se aplazó el vencimiento hasta 2018 de préstamos por 4.500 millones en una operación de vida o muerte –única en Europa ese año por su volumen- que incluía el riesgo de que la banca pudiera tomar una importante participación en la cotizada. A partir de aquí, las dos ampliaciones de capital en poco más de un año, de 1.000 y 709 millones, respectivamente, han tenido como prioridad atajar esta deuda tóxica. Por el camino, con la entrada de Carlos Slim como accionista de referencia, perdió el control Esther Koplowitz, hoy segunda accionista de FCC con el respaldo económico del multimillonario mexicano.
- Otro frente abierto
A la espera de que la CNMV dé su veredicto sobre la opa de Carlos Slim sobre FCC, la dirección financiera de la misma sigue teniendo tarea para estabilizar el trasatlántico. Se busca ahora un acuerdo de refinanciación con los acreedores de la filial cotizada Cementos Portland Valderrivas para refinanciar un endeudamiento que alcanza los 823 millones. Un peso que se ha tornado difícilmente soportable debido a la caída de negocio que ha supuesto la crisis de la edificación y obra civil en España.
Parte de la última ampliación de capital, hasta 300 millones de euros, serán destinados precisamente a dar un recorte a la deuda de la mayor cementera española con lo que se busca la adecuación de su estructura financiera a la realidad de un mercado que ha caído a una quinta parte del que fue en 2007 y para el que se augura un lento ritmo de recuperación hasta niveles que aún estarían en menos del 50% de lo que el mercado doméstico demandaba antes de la crisis.
La operativa financiera en FCC recae ahora en el mexicano Miguel Ángel Martínez Parra, hombre de la máxima confianza de Slim y quien fue director financiero de la constructora Ideal, y Víctor Pastor, quien ya fue artífice de la refinanciación de 2013 y parece haberse ganado la confianza del consejero delegado Jarque.
Slim tiene al consejero delegado, Carlos Jarque; contará con mayoría en la Comisión Ejecutiva y en la de Retribuciones y Nombramientos, y, en un principio, está previsto que la presidenta del grupo siga siendo Esther Alcocer, aunque no ejecutiva.
Slim espera noticias de la CNMV
1. El primer accionista de FCC, Carlos Slim tiene presentada ante la CNMV el folleto de la opa sobre el 100% del grupo de infraestructuras. El regulador la ha admitido a trámite y debe pronunciarse, entre otras cosas, sobre el precio. Slim estima como equitativo el pago de 7,6 euros por acción. Una oferta que arroja una prima del 15,36% en el momento de publicarse y que supera los 7,02 euros por acción pagados por Slim en su compra más cara en los 12 meses previos al anuncio de opa. El 14 de enero de este año el vehículo Inversora Carso se hizo con 70.000 acciones de FCC a los citados 7,02 euros por unidad.
2. El nuevo dueño de FCC ha garantizado la opa con avales bancarios de dos de los mayores acreedores de la constructora. Caixabank presta garantías por 1.000 millones y Santander cubre otros 529,6 millones, con lo que quedan a resguardo todas las obligaciones del pago que puedan resultar de la oferta teniendo en cuenta que ante la opa quedan inmovilizados los paquetes del primer accionista, con cerca del 35%, y también de la segunda, Esther Koplowitz, que mantiene un 22% de la empresa.
3. Carlos Slim ha manifestado ante la CNMV que su intención es que FCC siga siendo una empresa cotizada tras la opa. Una vez ejecutada la operación de compra, debe celebrarse una junta extraordinaria en la que el consejo crecerá desde los 11 a 15 sillones, con ocho plazas reservadas al accionista mexicano. Koplowitz se quedaría con cuatro asientos y habrá tres independientes. Actualmente cada parte ocupa cuatro. Slim tiene al consejero delegado, Carlos Jarque; contará con mayoría en la Comisión Ejecutiva y en la de Retribuciones y Nombramientos, y, en un principio, está previsto que la presidenta del grupo siga siendo Esther Alcocer, aunque no ejecutiva.