Meliá desembarca en Irán tras el fin de las sanciones comerciales
Meliá ha entrado en Irán. 26 años después de su llegada a Cuba, la compañía ha decidido entrar en el mercado iraní, donde operará un hotel en el mar Caspio. La cadena hotelera mallorquina ha firmado un acuerdo con el grupo industrial e inmobiliario iraní Azimzadeh Carpet por el que gestionará el primer establecimiento de cinco estrellas internacional en el país.
El grupo hotelero fundado por la familia Escarrer abrirá las puertas del establecimiento, que se llamará Gran Meliá Ghoo, en 2017. El hotel, que ocupará una torre de 130 metros de altura y que contará con 319 habitaciones de lujo de diferentes tipologías, entre las que habrá una suite presidencial de más de 500 metros cuadrados, según adelantó ayer la compañía, que no tendrá que acometer ninguna inversión directa al tratarse de un establecimiento que operará bajo contrato de gestión. El hotel estará situado en el desarrollo inmobiliario Ghoo, Diamante de Oriente Medio, que será un complejo residencial, comercial y hotelero construido en la localidad Salman Shahr, un destino vacacional frente al Caspio.
El anuncio se produce después de que el histórico acuerdo firmado en julio que supuso el levantamiento de las sanciones de Naciones Unidas a la República Islámica cinco años después de su inicio. La decisión supone el regreso del país al mercado económico y financiero internacional y según los cálculos del Fondo Monetario Internacional (FMI) supondrá la llegada de 3.210 millones de dólares anuales de inversión extranjera al país, que se complementarán también con la vuelta al mercado del petróleo del país, tras levantarse la prohibición de importar crudo desde la Unión Europea.
El consejero delegado de Meliá Hotels International aseguró ayer que “creemos firmemente en el potencial turístico de Irán y nos sentimos orgullosos de haber merecido la confianza de nuestros socios y promotores de este magnífico proyecto, que ratifica una vez más nuestra capacidad de competir por los mejores proyectos hoteleros en cualquier parte del mundo”. La compañía mallorquina busca así convertirse en uno de los grupos internacionales de referencia en el mercado turístico iraní.
La llegada de Meliá se produce después de que Accor irrumpiera en el país el pasado mes de octubre, con la apertura de dos hoteles, de las enseñas Ibis y Novotel. Además, varias cadenas de Oriente Medio como Jumeirah y Rotana han mostrado su disposición a operar hoteles en el país. Un mercado en el que hasta 1979, fecha en la que se inició la revolución impulsada por el Ayatollah Jomeini que derrocó al sah e instauró la República Islámica, había enseñas como Hyatt o Sheraton.
El pasado mes de septiembre, una delegación española liderada por José Manuel García-Margallo, Ana Pastor y José Manuel Soria, se desplazó a Irán para retomar las relaciones comerciales, acompañados por representantes de Repsol, Cepsa, Gas Natural Fenosa, Indra, Isolux, OHL, Grupo Sacyr, Seat y Paradores. La cadena hotelera de titularidad pública selló entonces un acuerdo para estudiar la posibilidad de aportar su know how en el mercado hotelero persa.
Dentro de la industria turística española, la agencia de viajes online Destinia opera en el país desde el pasado mes de julio con una oficina física en su capital, Teherán, convirtiéndose en la primera agencia de viajes occidental en desembarcar en el país.
Fuentes del sector reconocen que Irán es un mercado a largo plazo pero destacan el potencial de un país “muy virgen” para la industria turística y recuerdan que es el segundo país más poblado de Oriente Medio tras Egipto (77 millones de personas). Irán cuenta con una situación geográfica privilegiada, al estar situado entre Europa y Asia. Además, el World Travel & Tourism Council (WTTC) prevé que este año se eleve el gasto político en el país un 6,8%. El país tiene unos 150 hoteles de cuatro y cinco estrellas en la actualidad y prevé aumentarlos hasta unos 400.
Meliá está presenta en Oriente Medio en países como Egipto, donde cuenta con dos hoteles; Emiratos Árabes y Catar, con un establecimiento en cada uno. En este último destino ha anunciado hace un mes la incorporación de un segundo hotel en Doha, bajo la enseña Innside.