La cadena Room Mate refuerza su apuesta tecnológica
La cadena hotelera Room Mate Hotels sigue inmersa en su plan para convertirse en “un player global”. Junto a su estrategia de expansión internacional, dentro de la que este año abrirá siete nuevos establecimientos en ciudades como Barcelona, Rotterdam, Estambul, Milán, Málaga y Miami, la empresa fundada y presidida por Enrique Sarasola ha reforzado su apuesta por la innovación tecnológica, que ya la llevó a ofrecer el wifi gratuito fuera de sus hoteles en 2013.
La empresa invertirá ocho millones de euros en su nueva estrategia digital. “La digitalización no es un objetivo sino una herramienta para conseguir que el cliente conozca bien la marca y podernos anticipar a lo que va a querer en un futuro”, asegura Víctor Fernández, consejero delegado de la compañía.
Room Mate ha desarrollado su proyecto de digitalización de la mano de socios internacionales como PwC y una de las principales herramientas de CRM –estrategia de negocio enfocada al cliente–. Todo ello para tener una relación con sus clientes “más allá del mundo de la hotelería”, afirma Roberto Sánchez Simón, director general de marca y estrategia de la compañía.
El proyecto pasa además por el lanzamiento de una nueva plataforma de venta en internet, en un momento en el que las reservas online suponen ya el 65% del total de la cadena, incluyendo el portal de venta directa de Room Mate. Una nueva herramienta que la empresa prevé lanzar durante el mes de marzo y sobre la que ya está haciendo pruebas.
“Para su desarrollo nos hemos fijado en el negocio del retail, más que en la industria hotelera”, apunta Sánchez Simón, que reconoce que “lo más novedoso de la venta online se encuentra ahora en el sector de la distribución.
Otra de las novedades que prepara la compañía es un índice de tendencias propio, que conjugará la información que la empresa recibe de los viajeros con el análisis del big data con el objetivo, según destacan desde RoomMate, de “ser capaces de pensar como el cliente”.
Room Mate prevé abrir un mínimo de 4.200 habitaciones hasta 2019. La compañía, que logró unos ingresos de 50,6 millones en 2015, un 7,3% más que un año antes, gracias a la mejora de la ocupación, que alcanzó una media del 87,34%. En lo que va de año la empresa ha registrado además un crecimiento en reservas de sus establecimientos ubicados en España –Madrid, Barcelona y Málaga– superiores a los dos dígitos.