El coste de no tener Gobierno en los próximos seis meses
El incierto panorama que ha surgido de las elecciones del 20D y las dificultades iniciales para conseguir mayorías invitan a pensar que el Gobierno en funciones podría no ser tan transitorio como en principio se preveía y podría permanecer más tiempo del estimado a la espera de que se cierre un acuerdo. Un escenario que rechazan las organizaciones empresariales, que consideran que tendría un efecto perjudicial sobre la actividad y sobre las decisiones de los inversores extranjeros. La que lo rebatió con más vehemencia fue Exceltur, un lobby empresarial del sector turístico formado por 24 grandes compañías que presentó ayer dos escenarios diferenciados, en función de si se conforma un Gobierno fuerte y estable en la primera mitad del ejercicio o si no se produce esta hipótesis.
“No se puede abusar de esa situación, porque mucho tiempo trae consecuencias”, avisa el presidente de Pimec
En el primero de ellos, en el que se conforme un gobierno antes de julio, la organización prevé que el PIB turístico crecerá un 3,4%, siete décimas más que el PIB español. Se trataría del séptimo año consecutivo en el que el turismo crecería más que la economía española. En el segundo de ellos, que contempla la falta de acuerdo y la más que probable nueva convocatoria de elecciones, el lobby revisa a la baja sus perspectivas y prevé que ese indicador solo avanzaría un 2,7%, siete décimas menos y por debajo del crecimiento del PIB. “La formación de un gobierno estable va a ser un factor crucial en las perspectivas del comportamiento del gasto turístico de los españoles en 2016, por sus implicaciones sobre las decisiones de inversión en España”, apuntó José Luis Zoreda, vicepresidente ejecutivo del lobby. El coste de prolongar el gobierno en funciones, según el director de estudios e investigación de Exceltur, Oscar Perelli, podría ascender a 900 millones, correspondientes a esas siete décimas. En ese contexto, Zoreda reclamó altura de miras para propiciar una mayor cohesión a nivel país entre la clase política, la clase empresarial y entre todas las fuerzas sociales para intentar cuanto antes la formación de un gobierno estable que asegure seguridad jurídica “con el más amplio respaldo posible de las fuerzas políticas constitucionalistas”, entre las que incluyó a Podemos.
“La incertidumbre afecta a la inversión y al empleo”, advierte el presidente de Confebask
En la misma línea, Josep González, presidente de la patronal catalana de pequeñas y medianas empresas (Pimec), valoró ayer de forma positiva, la formación de un nuevo gobierno en Cataluña in extremis. “Siempre he mantenido que la convocatoria reiterada de elecciones no perjudicaba a la economía, siempre y cuando se continuara gobernando antes y después de los comicios. Desde el punto de vista empresarial, siempre habíamos manifestado que no nos preocupaban demasiadas elecciones, siempre que se continuase gobernando, pero en la medida que pasa el tiempo y no existe gobierno, se convierte en preocupación”, apuntó. “Pero de eso no se puede abusar, porque mucho tiempo sin gobierno trae consecuencias”.
El presidente de Confebask, Roberto Larrañaga, también reclamó que se forme un gobierno “estable” en España porque, “las inestabilidades e incertidumbres afectan a la inversión y al empleo”. En este sentido afirmó que no le gustaría que se produjera una situación como la catalana en Euskadi, “que es ahora mismo la envidia” del Estado por su “estabilidad”. En una entrevista concedida a Radio Euskadi, recogida por Europa Press, reiteró que al colectivo empresarial le preocupa la inestabilidad política o cualquier otro tipo de inestabilidad que cause incertidumbres. “Nosotros siempre necesitamos unas reglas de juego muy concretas con las que actuar y todas estas inestabilidades e incertidumbres nos afectan. Fundamentalmente en inversión y empleo”, remarcó el responsable de la patronal vasca, que insistió en que “para que un empresario invierta en capital humano o en inversiones de tipo productivo, necesita un marco estable y unas condiciones de estabilidad y de certidumbre”.
Deustche Bank mantiene su previsión de crecimiento
España crecerá por encima del 2,5% en 2016 con independencia de lo que ocurra con el gobierno, según explicó la economista jefe del centro de inversiones de Deutsche Bank, Rosa Duce, durante la presentación del informe sobre Perspectivas económicas y de estrategia de inversión para 2016, elaborado por la entidad financiera, que sitúa en el 2,8% la previsión de crecimiento para este año.
Las previsiones de la entidad bancaria son bastante optimistas, ya que prevé que el crecimiento del PIB español esté por encima de la media europea para 2016 que, según sus estimaciones, se situará en el 1,6%. No obstante, la expansión de la economía española que se inició hace dos años se mantendrá con cifras algo más bajas que en 2015 ante la “pérdida de fuelle” de algunos factores, como la debilidad del euro o el anticipo a julio de las rebajas fiscales, que fueron decisivas para impulsar el consumo en la segunda mitad de 2015.
Además, el estudio prevé que la prima de riesgo se mantendrá este año en los niveles bajos del pasado ejercicio, pese a la incertidumbre política, lo que considera que será clave para financiar la abultada deuda pública española. “Incluso en un escenario de nuevas elecciones, no se esperan subidas de la prima de riesgo significativas, y en todo caso, serán temporales, con lo que no se pondrá en peligro la actual recuperación”, subrayó la economista jefe de Deutsche Bank.
El informe prevé que la economía europea crecerá un 1,6% en 2016, apoyada en la debilidad del euro, el impulso del crédito, la menor presión fiscal y la bajada del precio del petróleo a mínimos históricos.