En Andalucía, no más de 3 días y casi siempre en casa de familiares
España está a punto de cerrar un año record para el turismo extranjero, con una llegada de 68 millones de visitantes. Son tres millones más que en 2014 y suponen un nuevo máximo histórico, cimentado en la inseguridad en destinos competidores del norte de África y el abaratamiento del euro frente al dólar y la libra esterlina, que ha propiciado un crecimiento muy fuerte de la llegada de turistas británicos, el mercado más importante, y estadounidenses, el que más puede subir en el corto plazo.
Al mismo tiempo, el turismo nacional, duramente golpeado por el desempleo y los ajustes, empieza a mostrar signos de mejoría tras una larga travesía de cinco años de caída. Lo que no ha cambiado es la manera de viajar de los residentes, tal y como revela la última encuesta elaborada por el INE, correspondiente al tercer trimestre del año (julio-septiembre).
La primera diferencia respecto a los extranjeros es que estos concentran sus estancias en la temporada alta (julio a septiembre) y que los nacionales las dividen a lo largo de todo el año. Dos datos que lo corroboran es que más de la mitad de las estancias son fines de semanas y que el segundo mes en el que más se mueven los turistas residentes es el que coincide con la Semana Santa.
El 90,4% opta por destinos nacionales
La encuesta, realizada a 13.204 personas, constata que los españoles siguen prefiriendo el destino nacional frente al extranjero (en especial Andalucía, elegida por el 18,5% de los encuestados), que se decantan por no pasar más de 3 días y que optan mayoritariamente por pernoctar en casas de familiares o amigos. De los 58 millones de desplazamientos que realizaron los españoles entre julio y septiembre, 52,8 millones (un 90,6% del total) se produjeron a algún destino nacional, mientras que solo 5,4 millones (un 9,4%) tenían como objetivo un país extranjero. Unos porcentajes que son muy similares a los de trimestres anteriores y muestran la predilección por enclaves situados en España.
Y dentro de ellos sobresale Andalucía, la cuarta en preferencia por los extranjeros y la primera por los españoles, como revela el hecho de que haya sido visitada por casi 11 millones de españoles en el tercer trimestre, un 18,8% del total. Ya a cierta distancia le sigue Cataluña, con 7,2 millones (un 12,5%) y Comunidad Valenciana, con 6,6 millones (un 11,3%). Entre el cuarto y el sexto lugar aparecen tres regiones (Castilla y León, Galicia y Castilla-La Mancha), que apenas reciben visitantes foráneos y que dependen en exclusiva del turismo nacional. Desde la patronal hotelera Cehat han reclamado insistentemente al Ejecutivo la aprobación de incentivos fiscales para que los hoteles permanezcan abiertos en esas autonomías y contraten personal durante la temporada baja, con el fin de evitar el cierre en invierno.
Estancias cortas dentro, largas fuera
Otro factor que caracteriza al turismo español es su propensión a realizar estancias cortas. La estadística del INE revela que la mayoría de residentes que optan por destinos nacionales no realizan viajes que superen las tres noches (un 57,4% del total), mientras que el porcentaje que prefiere pasar estancias más prolongadas es significativamente más bajo. Entre 4 y 8 noches, el porcentaje baja al 24,8% y más de ocho noches tan solo aparece un 17,8% de los encuestados. Unas cifras radicalmente diferentes en el caso de los españoles que optan por viajar a un destino extranjero y que generalmente optan por pasar más días. Solo el 20,6% reduce su estancia a tres días y el resto se reparte en porcentajes similares (en torno al 40%) entre 4 y 8 noches y más de las ocho noches.
Pero si hay un rasgo distintivo del visitante nacional frente al extranjero es su fobia al alojamiento hotelero. El 62,4% de los extranjeros se aloja en hoteles, porcentaje que baja al 20,7% si se analiza el conjunto del turismo español y al 18,1% en el caso de aquellos residentes que optan por visitar un destino nacional. Entre los 52 millones de residentes que engloba esta última posibilidad, 24,8 millones (un 45,4% del total) optaron por alojarse en casas de familiares o amigos frente a los 9,5 millones (un 18,1%) que eligieron quedarse en un hotel. De hecho, esta opción no es la segunda más elegida entre los encuestados, sino que queda relegada en tercer lugar en favor de la vivienda en propiedad, con 9,6 millones (un 18,3% del total).
La estadística también revela que el alquiler sigue siendo una opción minoritaria entre los visitantes españoles, con un 8,4% del total frente al 12% de los extranjeros, pese al boom de las plataformas de apartamentos turísticos como Airbnb.