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Inmaculada García Martínez, presidenta de LAE

“El sorteo de Navidad es único por nuestro carácter”

García Martínez asegura que las ventas están volviendo a niveles de 2010 tras el descenso de los últimos años.

Inmaculada García Martínez, presidenta de la Sociedad Estatal Loterías y Apuestas del Estado (Selae).
Inmaculada García Martínez, presidenta de la Sociedad Estatal Loterías y Apuestas del Estado (Selae).Pablo Monge

El sorteo extraordinario del 22 de diciembre, un rito ineludible de las celebraciones navideñas, es un juego para compartir, único y muy difícil de copiar porque está pegado a nuestras costumbres y forma de ser, explica a Efe la presidenta de Loterías y Apuestas del Estado, Inmaculada García Martínez.

Pregunta: Decir Navidad es decir sorteo de la Lotería. ¿Todo listo?

Respuesta: Está todo preparado, esperando el gran día. El mismo 23 de diciembre ya empezamos a preparar el sorteo del año siguiente. Es tan intenso y especial para esta casa que, prácticamente, todo el año trabajamos para él.

P: El Teatro Real se ha consolidado como escenario habitual.

R: Será el cuarto sorteo allí. Ha resultado muy bien. No tiene mucho aforo, pero el marco es incomparable.

P: El de Navidad es el sorteo más tradicional, pero ¿se aplican los avances tecnológicos?

R: La puesta en escena es siempre la misma, pero detrás están todas las nuevas tecnologías, que permiten, en un tiempo récord, saber dónde ha caído el Gordo, cuántos premiados hay, poder pagar con rapidez... Una tecnología muy potente al servicio de un sorteo de toda la vida.

P: ¿Qué hace de este sorteo el más importante del mundo?

R: Todos los países tienen sus loterías y sorteos. La diferencia sustancial, que lo hace único y digno de admiración -y del que debemos sentirnos muy orgullosos- es la tradición que hay en España. No hay ninguno que tenga su antigüedad. Está tan arraigado que es parte de nuestra cultura.

P: ¿Es inimitable?

R: Es una cultura del lugar de trabajo, de los amigos, de la familia, de compartir, de disfrutar eligiendo el número, comprándolo, celebrando el premio. Todo eso es único. Es muy difícil de copiar. Para empezar tienen que ser países que tengan una fiesta tan arraigada como la Navidad, que tenga también un período largo de preparación. Explicar eso es tan difícil cuando tienes más de 200 años de tradición...

P: ¿Depende también de nuestro carácter?

R: Efectivamente, somos muy latinos y el clima ayuda, muy abiertos, hacemos mucha vida en la calle y eso fomenta también compartir la lotería.

P: Hablemos de las campañas publicitarias. Después de anuncios formalistas, el año pasado se dio un salto para contar historias humanas.

R: No creo que hubiera un salto. El año pasado convocamos un concurso para adjudicar el proyecto creativo y la campaña. Queríamos que reflejara lo que es nuestra lotería, y nuestra lotería de Navidad es un juego para compartir. El anuncio que ganó en 2014 (de la agencia Leo Burnett) tuvo una ejecución magnífica, un impacto muy bueno en la reputación de nuestra imagen y fue muy premiado. Y en ventas se notó.

P: ¿Y este año?

R: Creo que hemos vuelto a acertar, con repercusión en prensa nacional e internacional y redes sociales. El concurso era para un año con la posibilidad de ampliarlo otro. Evidentemente, lo prorrogamos porque había sido un éxito. Queríamos y debíamos seguir con el mismo mensaje: compartir. Ha habido un giro importante, pues se trata de un corto de animación. Es una historia muy bonita, de interacción entre compañeros de trabajo en un fábrica de maniquíes. Con personas hubiera sido mucho más complicado hacerlo. Justino, el protagonista, es un personaje amable y entrañable, con el que nos sentimos cómodos e identificados. Creo que ha triunfado.

P: ¿Cuál ha sido el coste?

R: Lo mismo que el año pasado. Nosotros presupuestamos en publicidad un 2% de la facturación.

P: En 2014 hubo un aumento de ventas de Navidad

R: Un incremento del 4,64% después de seis años de bajada, que se debió a la salida de la crisis. Pero también a que hubo una buena campaña (publicitaria). Ya para el Niño hubo un incremento de casi el 7%. En general, el año pasado detuvimos la caída que se había producido en la segunda parte de la crisis. A mediados de noviembre de este año, las ventas estaban en números positivos, con un incremento interanual prácticamente en todos los juegos. Las perspectivas son buenas.

P: ¿Se han recuperado los niveles previos a la crisis?

R: No hemos vuelto a los datos de 2010. La bajada global de facturación de 2010 a 2014 ha sido de un 15% entre todos los juegos. Curiosamente, el sector del entretenimiento y del ocio, en el que estaríamos englobados, ha sido de los menos afectados por la crisis, y las loterías han sido las menos perjudicadas en la bajada de ingresos.

P: ¿Son competencia el sorteo de la Once del 1 de enero o la Grossa de Cataluña?

R: Algo se habrá notado el de la Once, que va a cumplir el tercer año, pero nosotros facturamos 2.471 millones para el de Navidad de 2014, con el aumento citado. Es muy difícil de apreciar. En Cataluña estamos aumentando en ventas. Seguramente se habrá notado, pero poco.

P: ¿Repercute el impuesto del 20% a partir de 2.500 euros de premio?

R: Entró en vigor en enero de 2013. Analizando la demanda en función del impuesto, no hemos apreciado que haya afectado en gran manera. Sí ha complicado la gestión del cobro, por ejemplo de las participaciones. Al final, como juegas para el premio mayor, dices: “Ojalá tenga que pagar el 20%”.

P: ¿Habría que suprimirlo o reducirlo?

R: Es un tema legislativo, y yo soy un operador del juego. Se decidió en una situación excepcional, un momento complicado. El legislador estimará conveniente cuándo corresponda.

P: ¿Qué planes tiene Loterías?

R: Constantemente estamos innovando en los distintos juegos, pues llegan a un punto en el que están maduros y necesitan cambios. Les hemos dado una vuelta a todos desde 2013.

P: ¿Y preparan en alguno nuevo?

R: Siempre estamos pensando. Tenemos algún que otro en cartera, que está en fase de laboratorio.

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