Otra vez un millón de coches
La industria del automóvil vive una nueva edad de oro, con unos volúmenes de exportación muy elevados, tras haber incrementado su cuota de participación en el comercio mundial en los últimos años. Pero el papel del automóvil en España ha cambiado con el tiempo, hasta el punto de que ha dejado de ser prioridad en el consumo de la población juvenil, y es cada vez más complicado llegar a las cifras de ventas de hace, por ejemplo, veinte años. Curiosamente, la venta de coches en España es ahora muy inferior a la de los años ochenta del siglo pasado, pese a que el número de ocupados es el 50% más elevado que entonces. No obstante, este año las ventas volverán a superar el millón de unidades en España, y la producción marcará cifras espectaculares para destinarlas a la exportación y conservar lugares de privilegio en el ranking mundial de productores de coches. Además de la recuperación general de la demanda interna, los fabricantes han logrado la mejor disposición de cuantos agentes forman la cadena de producción que les ha devuelto el papel de motor de la economía desde los primeros albores de la recuperación. Ahora que se oyen de nuevo cantos de sirena para volver a comportamientos propios de etapas más desahogadas es cuando más se precisa la disciplina para garantizar la continuidad.