El refino salva las cuentas de Repsol ante la caída del barril
El resultado de Repsol en los nueve primeros meses del año ha quedado en 1.399 millones de euros, cifra que está algo por debajo de las previsiones de los analistas, que apuntaban a 1.440 milloens de beneficio. El beneficio neto de la petrolera, incluyendo operaciones no recurrentes y el efecto patrimonial, queda en 832 millones, la mitad que el ejercicio pasado. En términos trimestrales las cuentas son de 159 millones el ajustado (-62%) y pérdidas de 221 millones en beneficio neto /frente a beneficios de 319 millones).
Las cuentas no han sentado demasiado bien en el mercado. La petrolera Repsol ha caído con fuerza en los primeros compases de la sesión.
Estas operaciones no recurrentes, explica la petrolera, consisten en las provisiones por pérdida de valor de la división de gas norteamericana y en yacimientos de petróleo no convencional en Mississipian Lame. Ambas se ven compensadas por las ventas de la participación de CLH y de licencias de exploración en Canadá.
El entorno de precios bajos hace, en todo caso, que el resultado en exploración y producción sea negativo en 395 millones de euros (185 de beneficio en 2014). La diferencia de 580 millones se explica, además de por los precios, por el alza en los gastos de exploración, la crisis en Libia (la empresa sigue sin producir en el país, azotado por la guerra) y la devaluación de algunas divisas.
Las cuentas de este trimestre incluyen por primera vez la consolidación de Talisman, que aporta 57 millones de pérdidas en el resultado operativo. La canadiense aporta 307.000 barriles de producción diaria, y el trimestre se cierra con una producción de 653.000, un 79% más.
La división de refino y comercialización compensa las caídas de precios, y el resultado crece un 259% por la mejora del margen de refino, que pasa de 3,9 a 8,8 dólares por barril. Esta división aporta 682 millones de beneficio, que se suman a los 103 derivados de la participación de Gas Natural.