11 fotosVisita a la Autostadt y su casa del tiempoRecorrido por la Autostadt, la ciudad de Volkswagen en Wolfsburgo, que alberga una colección de iconos del diseño de automóviles.Carlos Otiniano PulidoWolfsburg - 21 sept 2015 - 20:21CESTWhatsappFacebookTwitterBlueskyLinkedinCopiar enlaceEl emblema del recinto son dos torres de cristal donde se guardan los coches antes de ser entregados a sus compradores. Los autos son traslados desde la fábrica hasta estos edificios a través de un túnel subterráneo de 700 metros.Carlos Otiniano PulidoDentro de la torre, una plataforma eleva y deposita los coches en una plaza de garaje. Allí permanecerán hasta que llegue el momento de entregarlos a sus compradores.Carlos Otiniano PulidoUn ascensor permite a los visitantes subir hasta la cima de una de las torres. Desde allí se tiene una vista panorámica de todo el conjunto, con las chimeneas de la factoría de Volkswagen dominando el paisaje.Carlos Otiniano PulidoLa ZeitHaus –casa del tiempo en alemán– es una de las varias atracciones del parque. Se trata de un museo donde se exponen modelos que supusieron un hito en la historia del automóvil.Marc-Oliver Schulz (Volkswagen)BMW 328 de 1938, uno de los primeros que, con su parrilla delantera dividida en forma de riñón, mostró que el diseño podía dejar de ser un elemento puramente funcional y servir para comunicar la identidad de marca.Carlos Otiniano PulidoEl Escarabajo de Volkswagen mantuvo invariable su forma redondeada desde el comienzo de su fabricación a gran escala en 1945 hasta que dejó de producirse en 2003. Mantener su forma tradicional, incluso cuando la aparición de modelos más grandes y amplios lo hicieron parecer anticuado, ayudó a conservar su cualidad de producto único.Carlos Otiniano PulidoInfluenciada por la moda de los fastback americanos, la británica Bentley montó su primer deportivo de lujo con aletas y una línea de techo fluida que realzaba su elegancia. El R-Type Continental de 1952 fue el cuatro plazas más rápido y atractivo de su tiempo.Carlos Otiniano PulidoEl diseño aerodinámico del Porsche 356 compensaba la potencia relativamente limitada de su motor de cuatro cilindros. No es de extrañar que fuese capaz de alcanzar hasta 160 km/h con motores de solo 40 o 60 caballos de fuerza.Carlos Otiniano PulidoNingún deportivo maravilló tanto a los aficionados como el Lamborghini Countach. Desvelado en el Salón de Ginebra de 1971, nunca antes un coche había tenido bordes tan afilados. Con su cabina adelantada para dejar espacio a un motor central trasero, registraba una velocidad máxima de 288 km/h.Carlos Otiniano PulidoEl Miura, en primer plano, fue el primer deportivo que adelantó la cabina para dejar espacio a un motor central trasero. El francés René Bonnet tomó la idea de los autos de competición, hasta ahora una fuente de inspiración habitual para los diseñadores de coches deportivos.Carlos Otiniano PulidoLa aparición de la Combi de Volkswagen en 1950 borró las fronteras entre auto, bus y camión, ya que este vehículo resultaba adecuado para muchos propósitos diferentes. Ofrecía el confort de un turismo, la capacidad de transporte de un minibús y el espacio de carga de un camión ligero.Carlos Otiniano Pulido