El lavado de estómago de Carlsberg
Cees’t Hart, el nuevo consejero delegado de Carlsberg, ha recetado el equivalente corporativo a un lavado de estómago. Las acciones de la cervecera danesa se desplomaban ayer hasta un 9% después de que la compañía asegurara que su beneficio operativo para todo el año caería. Anteriormente, se había pronosticado un porcentaje medio-alto al alza.
El nuevo jefe de la compañía cervecera, que tomó posesión en junio, tiene razones suficientes para esta sobria evaluación. Los beneficios del segundo trimestre no alcanzaron el consenso de analistas. El mal tiempo en el Reino Unido y los países nórdicos produjo una caída del 19% en las ganancias antes de intereses e impuestos en su división de Europa occidental. El húmedo verano ha persistido en julio y agosto. Mientras tanto, la exposición de los ingresos de Carlsberg del 30% a Europa del Este, casi en su totalidad representada por Rusia y Ucrania, lo deja como rehén tanto de los acontecimientos geopolíticos como del débil gasto de los consumidores.
Puede que Carlsberg pueda mejorar su récord de ahorro de costes con su nuevo jefe. La compañía culpó a los pobres resultados del segundo trimestre, que son parte de su incapacidad para alcanzar sus propios objetivos de mejora de la cadena de suministro. Además, Asia se está comportando con fuerza: en el segundo trimestre el beneficio operativo aumentó un 30% respecto al mismo periodo hace un año. Al decir a los inversores que el balance final de Carlsberg se contraerá, ‘t Hart, al menos, tiene la oportunidad de superar las expectativas. También tendrá un incentivo financiero, dado que está pendiente de recibir 100.000 opciones sobre acciones a finales de mes.
Uno de los lemas publicitarios de Carlsberg es “estar orgulloso de ser diferente.” Pero los accionistas tendrán dificultades para ver el valor de sobresalir cuando Reuters Eikon asegura que la acción cotiza a un PER futuro de 16 veces en comparación con las más de 20 veces de sus rivales SABMiller y Heineken. Parece poco probable que eso se reduzca a corto plazo dado que ‘t Hart quiere esperar hasta el primer semestre de 2016 para dar a conocer una estrategia renovada. El metafórico lavado de estómago es una opción astuta por ahora, aunque solo sea porque da tiempo al nuevo jefe para pensar otras mejores.