Indra prejubila a los 57 y duplica la indemnización legal en los despidos
Indra y la mayoría de la representación legal de los trabajadores han alcanzado un acuerdo sobre el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que contempla, entre otras medidas, la extinción de hasta un máximo de 1.750 empleos, 100 menos de los anunciados inicialmente, durante un plazo que finalizará el 31 de diciembre de 2016, lo que supone aproximadamente el 8% del total de la plantilla en España.
Ambas partes también han acordado reducir ese número de afectados en 350 por medio de recolocaciones en empresas del grupo, reducciones de salario voluntarias (como máximo del 20%) e internalización de puestos subcontratados.
El acuerdo introduce las prejubilaciones en un altísimo grado de voluntariedad (incentivada con 5.000 euros lineales) de trabajadores a partir de los 59 años y hasta los 63, que se acogerán a un programa de garantía de rentas, que en función de su retribución anual percibirán entre un 90% (si el trabajador gana menos de 40.000 euros al año)y un 80% de su salario neto actual (si gana más de esa cifra), según UGT.
De igual forma los trabajadores con 57 y 58 años se podrán acoger a dicho programa de garantía de rentas, que en función de su retribución anual (la misma señalada antes) percibirán entre un 85% y un 80% de su salario neto actual. Y, en el caso de que el trabajador tenga 63 años o más, recibirá una indemnización de 20 días por año y 12 mensualidades como máximo.
Indra y los sindicatos han pactado igualmente duplicar la indemnización legal a los despedidos, pues se ha acordado abonar 40 días por año trabajado y 24 mensualidades de tope, sin distinción entre los contratados por obra e indefinidos. La compañía, presidida por Fernando Abril-Martorell, planteó inicialmente unas indemnizaciones de 20 días por año, más la posible prima de voluntariedad y la de antigüedad.
Prima de antigüedad
Además, ambas partes han determinado primar la elevada antigüedad del colectivo de trabajadores afectados, si nque afecte al tope de los 24 meses, con 10.000 euros lineales adicionales para quien tenga más de 20 años de antigüedad en la empresa y 5.000 euros lineales para quien tenga más de 15 años.
La empresa y los sindicatos han pactado igualmente que haya determinados colectivos que no podrán ser despedidos, salvo que quieran salir voluntariamente. Es el caso de los matrimonios y parejas de hecho (no podrán verse afectados los dos miembros), de trabajadores con hijos con enfermedad grave o aquellos que tengan una discapacidad propia o de hijo del 33% o más.
Otro punto acordado se refiere a la movilidad geográfica, que sería siempre voluntaria e indemnizada con 7.000 euros. Desde UGT se destaca también las garantías de empleo. Indra se ha comprometido a no realizar ningún tipo de despido objetivo por ninguna causa hasta el 31 de diciembre de 2016.
El acuerdo ha sido apoyado por los sindicatos CCOO (5 representantes en la mesa de negociación), UGT (2 componentes), USO (2) y STC (1), y ha sido rechazado por CGT (2 representantes) y Co.Bas (1). Con este pacto se pone fin al proceso de negociación de despido colectivo que se inició el pasado 7 de julio como parte del plan estratégico de la compañía 2014-2018 y que implicaba, entre otras medidas, un objetivo de ahorro de costes de 120 millones de euros por reestructuración organizativa principalmente en España y Latinoamérica.
El ERE afecta a los centros de trabajo de Indra en Barcelona, Madrid, A Coruña, Albacete, Cádiz, Guipúzcoa, Las Palmas, León, Málaga, Mallorca, Murcia, Navarra, Sevilla, Tenerife, Toledo, Valencia, Valladolid y Vizcaya. La totalidad de los costes del procedimiento serán asumidos por la empresa.
La ejecución del plan en Latinoamérica ya se ha iniciado en el segundo trimestre de 2015, mientras que la ejecución del plan en España se concentrará principalmente en el cuarto trimestre, quedando una parte para realizar a lo largo de 2016. Por tanto, la mayor parte de los ahorros anuales se consolidarán a lo largo de 2016, según ha explicado la compañía.