El gasto público en intereses de la deuda cae por primera vez en siete años
La partida para cubrir el coste de la deuda retrocedió un 0,5% en el primer trimestre, algo inédito desde 2008 El mayor ahorro en intereses se genera en las comunidades autónomas por la ayuda financiera del Estado
El peso de la deuda pública no ha cesado de incrementarse desde que la crisis económica derrumbó los ingresos del Estado y disparó el déficit fiscal por encima del 10% del PIB, un nivel nunca visto en la historia reciente. En consonancia con el aumento del pasivo –y sumado a la desconfianza que generaba España en los mercados–, el gasto público en intereses inició una senda alcista en el segundo trimestre de 2008 que no se ha detenido hasta este ejercicio. Entre enero y marzo de 2015, la partida destinada a intereses de la deuda se redujo un 0,5%, según la última publicación de la Cuentas Trimestrales de las Administraciones Públicas elaborada por el Ministerio de Hacienda. Un descenso modesto, pero que es la primero que se registra tras 27 trimestres consecutivos de incrementos (ver gráfico).
La reducción de la prima de riesgo y las mejores condiciones financieras permitieron que, ya el año pasado, el gasto real en intereses fuera menor que el presupuestado, sin embargo, la partida siguió creciendo respecto al ejercicio precedente. Ello ha cambiado en el primer trimestre y habrá que esperar a futuras publicaciones del Ministerio de Hacienda para comprobar si esta tendencia se mantiene. El año pasado ya se registró una mejoría notable. La Administración central, las comunidades autónomas y los ayuntamientos destinaron a intereses un total de 34.542 millones en 2014, un 1% más que el año anterior. Supuso el menor incremento desde 2007. Para entender la presión que ha supuesto la deuda pública sobre las cuentas públicas basta indicar que, en 2011, la partida en intereses se incrementó un 30% en un solo año. No existe ningún otro capítulo presupuestario que haya registrado variaciones tan drásticas de un año a otro. La partida de gastos financieros es la única en la que el Ejecutivo no ha podido aplicar medidas de austeridad o ajustes.
El Estado destina el equivalente al 3,3% del PIB a pagar intereses, el doble que antes de la crisis
Antes de la crisis económica, el pago de intereses se movía en torno a los 17.000 millones, cifra que representaba el 1,5% del PIB. Hoy, alcanza el 3,3% del PIB y se acerca a los 35.000 millones. En los Presupuestos Generales del Estado del ejercicio en curso, la partida destinada a desempleo alcanza 25.300 millones, un 29% menos que los recursos reservados para abonar intereses. En cualquier caso, ambas partidas serán finalmente inferiores a lo previsto.
El ministro de Economía, Luis de Guindos, señaló a principios de la semana pasada que la emisión neta de deuda pública del Tesoro sería un 3,6% inferior a los 55.000 millones previstos. Es decir, 2.000 millones menos. El tipo de interés medio de toda la deuda soberana en circulación se situó en junio en el 3,3%. Y el coste de las nuevas emisiones se mueve en torno al 1%, un nivel históricamente muy bajo.
La última estadística de ejecución presupuestaria del conjunto del sector público en términos de contabilidad nacional corresponde al primer trimestre, sin embargo, sí que hay datos más actualizados para la Administración central y las comunidades autónomas. Las cifras reflejan que son los Ejecutivos regionales quienes logran los mayores ahorros en intereses de la deuda. Así, hasta mayo, las comunidades destinaron 2.737 millones a pagar intereses, un 15,2% menos que en el mismo período del año anterior. En cambio, durante los mismos meses, el Estado gastó en intereses 14.981 millones, un 6,6% más. Estas diferencias se explican por los mecanismos de ayuda financiera aprobados por el Gobierno. La Administración central ha fijado líneas de crédito para las comunidades a tipos de interés del 0% y también ha reducido el coste de los préstamos concedidos en años anteriores. Así, parte del ahorro autonómico es asumido por el Estado central. Los ayuntamientos, por su parte, también cuentan con fondos específicos y destinaron a intereses 161 millones hasta el primer trimestre, casi la mitad que un año antes.
Ahorros en el Presupuesto de 2016
El Presupuesto de 2016 contemplará una reducción de la partida destinada a intereses de la deuda pública, algo que ya se produjo en las cuentas de este ejercicio. El ahorro previsto en el coste de la deuda explica que el techo de gasto de 2016 se sitúe en 123.394 millones, un 4,4% menos que en los Presupuestos en curso. El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, aseguró que, pese al menor gasto, no habrá nuevos recortes. El próximo viernes, el Gobierno aprobará los Presupuestos para 2016, que entrarán en el Congreso de los Diputados el 4 de agosto. El Ejecutivo ya anunció que los ministerios contarán con los mismos recursos de este año y habrá más dinero para pensiones, Seguridad Social, mutualidades, lucha contra el fraude o educación. Moncloa tiene la intención de que el Congreso apruebe el Presupuesto antes de que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, convoque las elecciones generales, que previsiblemente se celebrarán en el mes de noviembre o diciembre.
La mayoría absoluta con la que cuenta el Gobierno en ambas cámaras hace factible esta hoja de ruta. El Gobierno pretende que la economía centre el debate durante la campaña electoral en un momento en el que el PIB avanza al 4% en tasa anualizada y se crea empleo.