El buen trago de Remy Cointreau
El éxito es la mejor forma de defender las fusiones y adquisiciones. Es la lección de Remy Cointreau, la destilería francesa de coñac que desveló ayer un incremento del 18% en su beneficio neto anual. El tópico no se perderá en Diageo, el rival británico de mayor tamaño.
Para que quede claro, hablar de ofertas tanto para Remy como para Diageo es solo hablar. Su mejora en el rendimiento operativo explica la mayor parte de la subida del 8% en las acciones de Remy a primera hora del miércoles. Los problemas en China, donde una caída en la entrega de regalos golpeó a muchos proveedores de bienes de lujo, parecen estar evaporándose.
Las acciones de Remy cotizan en el equivalente de 28 veces las ganancias previstas para el próximo año –una prima del 45% a su grupo homólogo europeo de cerveza y bebidas espirituosas–. Esto, en sí mismo, puede ser lo que sugiere que una oferta es posible. Remy tiene un accionista familiar mayoritario y no quiere vender.
Los datos sugieren que la compañía gala hará crecer los beneficios por acción el doble de rápido que Diageo
Pero para que una oferta fuera aceptable, necesitaría una prima premium. Digamos que un comprador calcula que podría reducir hasta un 10% los costes totales de Remy, un ahorro anual de hasta 100 millones de euros. Gravado al 30% y capitalizado en 10 veces, el valor presente de los ahorros podría ser de 700 millones de euros. Eso es más que la prima implícita sobre sus rivales en la que las acciones de Remy cotizan en la actualidad.
El valor de mercado de Diageo de 70.000 millones de dólares (62.300 millones de euros), alrededor de 20 veces el de Remy, plantea preguntas sobre la financiación de un acuerdo. Un adquirente lo suficientemente grande como para comprar Diageo también podría ser lo suficientemente grande como para chocar con preocupaciones antimonopolio.
Los datos de Thomson Reuters Starmine sugieren que Remy hará crecer los beneficios por acción al menos al doble de la velocidad de Diageo. Eso puede ser demasiado amable con Remy y demasiado poco amable con Diageo. Pero las conversaciones de una oferta podrían venirse abajo si las perspectivas de la empresa británica fueran más dulces y suaves.