Nicaragua, tierra de lagos y volcanes
Un paraíso por descubrir. Así describe el empresario español Ramón Cirera a Nicaragua, país centroamericano que goza de bellezas naturales y hermosos paisajes. Hace más de 10 años Ramón visitó Nicaragua en compañía de su esposa. Esta aventurera pareja planificaba sus vacaciones en lugares exóticos y pocos concurridos por el resto de turistas. Y, “por curiosidad”, llegaron a la tierra de lagos y volcanes, ubicada en el ombligo de América.
La experiencia de recorrer reservas naturales, playas vírgenes, ciudades coloniales e islas con volcanes activos los dejó sorprendidos y enamorados de Nicaragua. Fue tan grata la aventura pinolera que al regresar a España no dejaban de pensar en el paraíso centroamericano.
Un año después de esas inolvidables vacaciones tomaron la decisión de regresar para invertir sus ahorros en un proyecto turístico. Fue así que Ramón preparó sus maletas con destino a Nicaragua por segunda ocasión, pero esta vez con la idea de construir un hotel en la ciudad de Granada, ubicada a 45 kilómetros al sureste de Managua.
“Nos gustaba el ambiente colonial y vimos que en Granada estaba todo en su esencia. Nos pareció que iniciar un proyecto turístico en Nicaragua no se trataba de seguir una rueda que ya estaba girando como podría pasar en otros países, sino que podríamos formar parte del motor que empezaba a girar esa rueda”, cuenta Ramón, quien confiesa que sentía cierto aburrimiento tras 20 años de trabajar en una oficina en España.
“Estuve un mes buscando un local para empezar el proyecto y analizando el potencial de la idea. Todo salió bien y encontré un sitio perfecto que hoy en día es el Hotel Patio del Malinche”, relata el emprendedor.
Granada es una de las ciudades coloniales más visitadas de Nicaragua. En ella se puede caminar con tranquilidad a través de sus coloridas y llamativas edificaciones, calles empedradas y el parque central, o recorrerla en coches tirados por caballos. No debe olvidar degustar un delicioso vigorón, plato típico nicaragüense compuesto por yuca, chicharrón o carne de cerdo frita y ensalada con un poco de picante... ¡Delicioso!
El paseo por esta bella ciudad no estará completo si no conoce las Isletas de Granada, en el Gran Lago Cocibolca o Lago de Nicaragua. Son 360 islotes o islas pequeñas de origen volcánico y en algunas de ellas construyeron hoteles y restaurantes.
Hay decenas de lugareños que ofrecen paseos en lanchas a precios que rondan los siete dólares por persona. Durante el recorrido de casi una hora se pueden apreciar la Isla del Mono y la Fortaleza San Pablo (un pequeño castillo construido entre 1670 y 1685).
¿Dónde dormir? En la capital hay cadenas de hoteles como Holiday Inn, Hilton Princess y Barceló, pero si desea dormir en otras ciudades, hay gran variedad de hoteles y hostales que no sobrepasan los 90 euros por noche. A orillas de la relajante Laguna de Apoyo están La Posada de la Abuela y The Monkey Hut, con habitaciones privadas.
¿Dónde comer? En Managua, la capital de Nicaragua, hay restaurantes de comida típica, entre ellos La Cocina de Doña Haydée y Los Ranchos. Otra deliciosa opción es degustar carne a la parrilla con tostones (plátano frito) y ensalada en Restaurante Carolina, en la Laguna de Apoyo, donde también tendrá una vista espectacular de este espejo de agua de origen volcánico.
¿Cómo ir? Nicaragua tiene conexión aérea directa con todos los países centroamericanos y varias ciudades de Estados Unidos. El billete de avión (ida y regreso) desde España oscila entre los 500 y los 700 euros.
La ciudad universitaria
Otro punto que no se debe perder al visitar Nicaragua es León, conocida como la ciudad universitaria porque ahí se fundó la primera universidad del país, en 1812. Aquí podrá recorrer la imponente Catedral de la Asunción de León, que fue construida entre 1747 y 1814 y declarada Patrimonio de la Humanidad en 2011. En esta basílica se encuentra la tumba del príncipe de las letras castellanas, Rubén Darío.
Luego de caminar y conocer esta ciudad colonial, la siguiente recomendación es refrescarse en alguna de las playas de León, en la costa del océano Pacífico. Poneloya y Las Peñitas son las más famosas y aclamadas por los veraneantes.
Pero si usted es más aventurero y quiere surfear por las laderas de un volcán, el Cerro Negro es una buena opción. Está ubicado a 25 kilómetros del centro de la ciudad y tiene una altura de 726 metros; lleva cerca de una hora subir hasta la cima y unos 40 segundos descender deslizándose sobre una tabla.
Y si desea surfear olas de gran tamaño, Nicaragua tiene playas donde se han realizado torneos internacionales. Están ubicadas en el departamento de Rivas, al sur de Nicaragua, y entre ellas las más visitadas son Playa Popoyo, Maderas, El Peñón, Colorado y El Remanso.
También en Rivas está San Juan del Sur, una bahía con una variedad de restaurantes desde donde se pueden apreciar inolvidables atardeceres. La mejor vista de la bahía se obtiene desde el mirador de El Cristo de la Misericordia, a 110 metros sobre el nivel del mar.
Rutas turísticas
Pero Nicaragua no solo es sol, playa y arena; también ofrece turismo rural sostenible. Hay turoperadores que promocionan la estancia en fincas cafetaleras al norte del país, donde se puede compartir con familias campesinas y conocer más de sus vivencias. O está la opción de ir a reservas naturales privadas, donde se realiza senderismo, avistamiento de especies y paseos a caballo. En estas fincas seguramente le ofrecerán el famoso gallopinto acompañado con huevos, cuajada y tortilla, un típico desayuno nicaragüense.
Selva Negra es una finca sostenible y privada en el departamento de Jinotega, donde hay cabañas muy cómodas para hospedarse. En este sitio se puede pasear entre los cultivos de café y estar en contacto con la naturaleza norteña. Además, ofrecen platos exquisitos preparados con alimentos orgánicos cultivados en este lugar.
Según datos de la Cámara Nicaragüense de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa Turística (Cantur), en 2014 más de un 1.350.000 turistas visitaron Nicaragua, generando 421 millones de dólares (378 millones de euros) en divisas.
Leonardo Torres, presidente de Cantur, detalló que el 60% de los turistas provenían de países centroamericanos; el 28%, de América del Norte, y tan solo el 7%, de Europa y de ese porcentaje tan solo el 1% lo representan visitantes españoles.
“Nicaragua es un 30% más barato que otros países de la región. La gastronomía nicaragüense tiene precios muy cómodos y la oferta turística se ha expandido. Tenemos la ruta del café en cinco departamentos norteños del país, la ruta colonial por el Pacífico, la ruta de los volcanes y la ruta del agua que cubre Río San Juan”, detalla Torres.
Oasis de paz
Si lo que busca es un sitio para relajarse, Nicaragua posee islas que enamoran a sus visitantes. Entre ellas destacan la Isla de Ometepe, en el Lago Cocibolca, y Corn Island, en el océano Atlántico.
Ometepe proviene de un vocablo náhuatl y significa dos montañas; este nombre se debe a que hay dos volcanes que se muestran imponentes en la isla, el volcán Concepción y el volcán Maderas. También aquí está el Ojo de Agua, un oasis natural al que se le atribuyen propiedades medicinales. La paz y la tranquilidad forman parte de este atractivo turístico.
Y si quiere disfrutar de aguas cristalinas, Corn Island le encantará. Solo tiene que tomar un avión en el Aeropuerto Internacional Augusto César Sandino y en pocos minutos estará en un paraíso caribeño donde hay una excelente oferta de hoteles y restaurantes.
Los habitantes de Nicaragua le recibirán con calidez y humildad. ¿Listo para unas vacaciones inolvidables?