El Ibex se da la vuelta a última hora y se alza un 0,23%
La reunión de Merkel y Tsipras, y los malos datos de PMI condicionan la sesión . La prima de riesgo española se rebaja a 120 puntos básicos.
El vendaval que sacude los mercados anunciando un inminente impago de Grecia no arrecia, y las principales plazas bursátiles de Europa vienen perdiendo los cortavientos con que se protegían en los últimos días.
Ni los datos macroeconómicos conocidos hoy, ni la artillería del BCE, que ya se asume que no es perenne, ni el despertar de Wall Street, esta tarde a la baja, han permitido ofrecer cierta resistencia a la pulsión vendedora.
Sin embargo, pese a pasar la sesión a la baja y amagar con repetir la caída del 0,20% con que cerró el día anterior, el Ibex 35 ha logrado darse la vuelta en el último minuto para crecer un 0,23% que lo ha elevado al 11.425,80.
Las subidas han estado lideradas por Bankia (+2,82%); Arcelor Mittal (+1,55%) y Técnicas Reunidas (+1,30%) mientras que los mayores retrocesos han sido de Abengoa B (-4,05%); Bankinter (-2,85%) y Sacyr (-1,36%).
Un movimiento sorprendente en de este alza a última hora en la Bolsa de Madrid después, además, de que España se haya desayunado hoy con una Encuesta de Población Activa (EPA) que vuelve a arrojar un nuevo incremento del desempleo. El resto de plazas europeas, en las que han dominado las ventas, no han tenido un mejor día, especialmente después de hacerse públicos los datos de producción manufacturera.
“Decepcionantes los datos de PMIs de servicios y manufacturas de la eurozona”, comenta José Luis Cárpatos, apuntando a un especial impacto en la Bolsa gala. “las expectativas que se tenían de recuperación económica de la eurozona se han enfriado notablemente”, ha declarado.
A este desánimo general se une la falta de confianza en que llegue a buen puerto el encuentro preliminar que los líderes de Grecia y Alemania, Alexis Tsipras y Angela Merkel, han programado hoy para tratar de desbloquear las negociaciones de cara a la reunión de mañana del Eurogrupo.
Si bien los jefes de Gobierno tienen mejor química que Varufakis y Schäuble (aunque esto no sea decir mucho), los inversores no son optimistas sobre la llegada del paquete de ayuda que necesita Atenas. Tocará esperar aunque, lógicamente, cada semana que pasa Grecia cerca del abismo es un riesgo añadido para los mercados europeos. Una clara señal del riesgo que atraviesa el país heleno es el nivel de rentabilidad exigido al bono griego a tres años: 25,121%.
Por si fuera poco, Cárpatos, señala que otra razón para las caídas son unos comentarios realizados por Peter Praet del comité ejecutivo del Banco Central Europeo. Praet afirma que el programa cuantitativo está teniendo unos resultados positivos y, lo mejor de todo, es que las expectativas sobre inflación se han incrementado en todos los horizontes, diciendo que la inflación volverá estar cerca del 2% cerca de 2017.
"Si tuvimos cierto apoyo en los mercados europeos con la bajada del euro, estos comentarios sobre inflación son negativos para la zona euro porque acortan un poco la vida, o la expectativa de vida del programa cuantitativo", señala Cárpatos.
Es decir, los inversores han asimilado hoy que la artillería pesada del BCE no durará para siempre. De hecho, el euro ha hecho un pequeño esfuerzo alcista hoy y ha recuperado la cota de los 1,08 dólares. .
El mercado de deuda está marcado, mientras, por la reversión de las fuertes ganancias de semanas atrás, y el bund alemán casi ha triplicado su rentabilidad en tres sesiones, hasta llegar al 0,167%. Mientras, el bono español a 10 años está en el 1,36%, lo que contiene la prima de riesgo a 120 puntos básicos.
La última esperanza del día, la posibilidad de recibir un empujón desde el otro lado del Atlántico se ha visto frustrada cuando los índices de Wall Street han abierto la sesión ligeramente a la baja. Y, pese a todo, con el viento en contra, el Ibex ha saldado el día en positivo.