Las claves para el ahorro en seguros

Cuando uno piensa en la contratación de un seguro, lo hace buscando tranquilidad y sabiendo que en caso de necesitarlo habrá una compañía aseguradora que vele por ti. En España no hay una cultura del seguro tan extendida como en otros países, sin embargo cada vez son más los que piensan en la previsión y se decantan por asegurar ámbitos de su vida. Unos por obligación –como el seguro de vehículos- y otros como condición accesoria como el del hogar en determinadas hipotecas, pero todos ellos deben tener una buena relación calidad/precio que aporte garantías al asegurado a la vez que no se pague por coberturas innecesarias.

¿Qué consejos seguir a la hora de contratar un seguro?

Pago de todos los seguros

La posibilidad de fraccionar el pago es una opción que permite a muchos contratar un seguro y facilitar su pago, sin embargo en la mayoría de los casos eleva el coste del seguro. Por lo tanto, siempre que se pueda es mejor realizar un pago anual antes que realizarlo de manera trimestral o mensual.

Seguros de vida

En primer lugar hay asegurarse de que no contamos ya con una cobertura de vida en otros seguros tenemos contratados (como el que cubre la hipoteca) para evitar duplicidades. En segundo lugar, hay que ajustar las primas a lo que verdaderamente se necesita (cubran las necesidades de los hijos). También hay que estar muy atentos a las ofertas gratuitas o promocionales, en la comercialización de estos productos suelen ocultar primas posteriores más altas que otros productos de la competencia.

Seguro de hogar

Es otro de los seguros más extendidos, tanto que según los datos de Unespa (Asociación Empresarial del Seguro) el 76% de las familias tiene un seguro de vivienda siendo los residentes del País Vasco, Navarra y La Rioja los más proclives a su contratación. Los seguros de hogar también generan duplicidades especialmente en las viviendas en edificios donde también existe un seguro de obligatorio en las comunidades de vecinos. Pero el verdadero punto donde conseguir ahorro está en los extras, por ejemplo ofrecer una cobertura para nuestro ordenador o tablet puede ahorrarnos mucho dinero si somos usuarios de estos productos, pero si no los tenemos estaríamos pagando por algo que no necesitamos.

Vehículo y motocicleta

Es el seguro más extendido en los hogares debido a su carácter obligatorio. Lo recomendable es adecuarlo a la antigüedad de nuestro coche. Si tiene hasta 4 años de antigüedad es lógico tener un seguro a todo riesgo pero, con más de 5 años, es más interesante un seguro a terceros con lunas, robo e incendio, mientras con más de 7 años bastaría con contratar un seguro básico a terceros con lunas. La franquicia es también una buena opción de ahorro en las opciones a todo riesgo, aunque será necesario comparar y valorar que la cantidad de daños que asumimos no sea excesiva.

Seguros de salud

El componente principal de este seguro es el de la asistencia sanitaria y según Unespa, tiene una penetración por encima del 30% en España, siendo la Comunidad de Madrid la que más contribuye a ello. La cobertura y el coste varía mucho si contratamos un seguro con cuadro médico cerrado a otro que nos permite elegir cualquier doctor, también varía mucho el precio si tienen coberturas complementarias como la odontología o psicología pero también si existe prestación médica en el extranjero.